Definición de cifosis
La raíz etimológico de cifosis se encuentra en kýphos, un vocablo griego que se puede traducir como “convexo”. Kýphos derivó en kýphōsis, que llegó a nuestra lengua como cifosis: una curvatura atípica de la columna vertebral en la zona dorsal.
Recordemos que la columna vertebral es eje del esqueleto de los vertebrados como el ser humano. Está compuesta por huesos cortos conocidos como vértebras, que se encuentran articulados entre sí y se ubican en fila. El adjetivo dorsal, por su parte, alude a la espalda o el dorso.
Para comprender qué es la cifosis, debemos saber que la columna vertebral cuenta con curvaturas normales que se califican como fisiológicas. Otras curvaturas, en cambio, son anormales (patológicas). La cifosis, según la definición aportada por el diccionario de la Real Academia Española (RAE), es una curvatura patológica.
La cifosis implica que la columna vertebral se curva más de lo habitual, sufriendo una disminución de su capacidad para moverse hacia adentro. Incluso dicha disminución puede ser absoluta. La persona que padece la cifosis, por lo tanto, tiene el cuerpo inclinado, en una postura perjudicial.
Una de las palabras que se suele usar en estos casos para describir el aspecto del paciente es «joroba», precisamente porque su postura agachada produce un delineamiento de la espalda que de perfil puede percibirse como el de una persona jorobada.
Con respecto a las causas de la cifosis, la cual se puede presentar en personas de todas las edades con menos frecuencia en los recién nacidos, son muchas y debemos dividirlas en un mínimo de dos grupos. Por un lado se encuentran las que corresponden a la cifosis en los adultos, que pueden ser las siguientes:
* enfermedades de tipo degenerativo que afecte la columna vertebral, como ser la artritis o degeneración de discos;
* fracturas que hayan tenido lugar a causa de la osteoporosis (las cuales se denominan osteoporóticas por compresión);
* lesiones varias;
* espondilolistesis, es decir, que una vértebra se deslice sobre otra hacia el frente.
Por otro lado, tenemos las siguientes causas, que no se engloban necesariamente en los casos de cifosis del adulto:
* algunas enfermedades endocrinas, es decir, de tipo hormonal;
* problemas en el tejido conectivo;
* tuberculosis o alguna otra infección similar;
* distrofia muscular, una serie de problemas hereditarios que provocan debilidad en los músculos y disminución anómala del tejido muscular;
* neurofibromatosis, una condición que acarrea la formación de tumores en el tejido de los nervios;
* enfermedad de Paget, la cual conlleva el deterioro y la reconstrucción anormal del tejido óseo;
* polio, una enfermedad de los nervios que puede provocar parálisis parcial o total;
* escoliosis, otro trastorno que genera una curvatura anómala en la columna vertebral, en este caso en forma de letra S o C;
* espina bífida, un defecto congénito que impide el correcto cerramiento del canal vertebral y de la columna vertebral antes del nacimiento;
* presencia de ciertos tumores.
Se llama cifosis postural a la cifosis más frecuente. Como su nombre lo indica, se debe a una mala postura. Esta cifosis no suele generar molestias ni inconvenientes. La cifosis congénita, en cambio, ya está presente al momento del nacimiento y en algunos casos requiere de una cirugía.
La cifosis de Scheuermann, provocada por la enfermedad de dicho nombre, genera dolor y diversas incapacidades; aparece durante la etapa de la adolescencia y surge como consecuencia de que diversos huesos consecutivos de la columna vertebral se aprieten entre ellos. La causa de la cifosis de Scheuermann no se conoce.
Además del dolor en la mitad inferior de la espalda, la cifosis puede generar fatiga, extrema sensibilidad y hasta problemas en la respiración. Por eso su tratamiento siempre es importante.