Definición de busto
Busto es un término que se origina etimológicamente en el vocablo latino bustum. Esa palabra latina se empleaba concretamente con dos acepciones: como sinónimo de la hoguera donde se incineraba a los difuntos y como monumento que se solía colocar en la tumba de los fallecidos. Y es que aquella procedía del verbo “burere”, que era equivalente a “quemar”.
El término actual tiene distintos usos. Puede emplearse para nombrar a la región superior de la estructura corporal de una persona y a la obra artística que retrata dicho sector del cuerpo.
Por ejemplo: “Recuerdo que, en la entrada de la casa de mi abuela, había un busto de un emperador romano”, “El museo denunció que un visitante atacó el busto de Aristóteles que formaba parte de una exposición”, “El artista francés se hizo famoso en toda la comarca gracias a sus bustos hechos con mármol”.
Los bustos, en el campo del arte, son representaciones de la mencionada zona del cuerpo. El concepto suele aplicarse para nombrar a una estatua o escultura, aunque también puede tratarse de un dibujo, una pintura u otra clase de creación. En un busto, es posible advertir la cabeza del individuo representado, sus hombros y una parte del pecho.
A lo largo de la Historia del Arte muchos son los bustos que se han realizado con el claro objetivo de ensalzar la figura de un personaje concreto. Este sería el caso, por ejemplo, de los siguientes:
• Busto del Cardenal Richelieu. En el museo parisino del Louvre es donde se puede admirar esta obra, que fue realizada por Bernini y que viene a representar a una de las figuras eclesiásticas que más poder tuvo en sus manos durante el reinado Luis XIII.
• Busto de Nefertiti. Tutmose fue el escultor que llevó a cabo la realización de este trabajo, también llamado Mona Lisa de Amarna, que está considerado como uno de los mejores ejemplos del arte egipcio. Está datado en el año 1.330 a.C y representa a la esposa de Akenatón.
• Busto de Trajano. En la Gliptoteca de Múnich es donde actualmente puede admirarse esta escultura que se llevó a cabo con el claro objetivo de adular y enfatizar el papel del emperador romano.
• Busto de Julio César. Muchos son los bustos que realizaron de este otro emperador. No obstante, el último de ellos fue hallado hace unos años en Arles, concretamente junto al Ródano. La pieza es de mármol y se ha datado en el año 46 a.C.
Los historiadores afirman que los romanos fueron quienes popularizaron la presentación de sus personalidades más prominentes en busto. Gracias a que los escultores utilizaban materiales muy resistentes, muchos bustos o fragmentos de ellos se han conservado hasta la actualidad.
La noción de busto, por otra parte, puede utilizarse para nombrar al pecho de las integrantes del género femenino. Quien habla del busto de una mujer, por lo tanto, se estará refiriendo a sus mamas o senos: “María es una mujer de busto prominente”, “Es importante que acudas a un ginecólogo para que te revise el busto y te asegures que todo está en orden”, “Una rama cayó del árbol y me golpeó en el busto”.