Definición de asesoramiento
El asesoramiento es la acción y efecto de asesorar o asesorarse. Este verbo hace referencia a dar o recibir consejo o dictamen. La noción de asesoramiento está vinculada a la de consultoría ya que, justamente, el latín consultus significa “asesoramiento”.
En este sentido, puede decirse que un consultor es un especialista en determinado tema que ofrece consejos y asistencia sobre su área de experiencia.
De esta manera, tendríamos que hablar de que existe lo que se conoce como asesoramiento financiero. Este es aquel que llevan a cabo los profesionales que, una vez analizadas la historia de su cliente así como sus necesidades y características, le aconseja y recomienda las inversiones que debe realizar para conseguir los objetivos que desea cumplir.
Para poder conseguir que fluya la relación entre cliente y asesor se establece como regla necesaria y primordial que entre ambos surja no sólo una relación de confianza sino también de cercanía. Y es que sólo de esa manera se logrará que la unión profesional existente se mantenga.
Por otro lado, también tendríamos que hablar que existe lo que se conoce como asesoramiento laboral. Como su propio nombre indica, aquel es el que lleva a cabo un profesional que está especializado en el área del trabajo. Así, el citado aconsejará y guiará a sus usuarios sobre todo lo que tiene que ver con el ámbito laboral, ya sea sobre ayudas, subvenciones, derechos y deberes o caminos a seguir para encontrar un empleo.
En este sentido, hay que subrayar que lo habitual es que dentro de ayuntamientos y organismos públicos existan servicios gratuitos de asesoramiento laboral para ciudadanos que necesiten una guía en el ámbito profesional.
En tercer lugar, tendríamos que hablar de lo que es el asesoramiento legal. Tanto de manera pública como privada, existen profesionales especializados en el mismo que se encargarán de guiar, aconsejar y encauzar a sus clientes en todo tipo de acciones judiciales y legales.
En la actualidad, existen numerosas empresas de consultoría (conocidas como consultoras) que brindan servicios profesionales gracias a sus planteles formados por especialistas. Las consultoras suelen ofrecer asesoramiento en áreas como calidad, comunicación, contabilidad, gerencia, marketing y recursos humanos.
Las cuatro consultoras más grandes del mundo son PricewaterhouseCoopers, Deloitte & Touche, Ernst & Young y KPMG, las cuales suelen ser denominadas como “Las Cuatro Grandes” o “The Big Four”.
Cabe destacar que la consultoría es un servicio independiente de la empresa. Esto supone que el consultor debe ser imparcial, por lo que está en condiciones de dar su punto de vista y de señalar los errores que, según cree, comete la organización. Por eso, la relación entre el consultor y el cliente puede ser compleja, ya que el consultor no tiene la autoridad necesaria para ejecutar las acciones que cree conveniente, sino que debe convencer al empresario acerca de las ventajas de un cambio en su conducta o en su forma de dirigir.
El asesoramiento que brinda un consultor, por lo tanto, proporciona los conocimientos necesarios para que el cliente (la empresa que lo contrata) pueda resolver los problemas cotidianos. El consultor no debe llevar adelante las tareas de resolución; en cambio, debe asesorar y brindar las capacidades profesionales necesarias a los directivos de la empresa.