Definición de arroyo
Arroyo, del latín arrugia, es un caudal corto pero casi continuo de agua. El término se utiliza para nombrar también al cauce por donde corre dicho caudal o a la parte de la calle por donde suelen correr las aguas. Por ejemplo: “Juan fue a pescar al arroyo: supongo que regresará al anochecer”, “Marcela estaba nadando en el arroyo cuando se desató la tormenta”, “La sequía hizo desaparecer el arroyo”.
Puede decirse, por lo tanto, que un arroyo es una corriente de agua que suele fluir con continuidad. Su bajo caudal lo diferencia de un río ya que el arroyo incluso puede llegar a desaparecer en las estaciones más secas del año.
Tanto es así que muchos arroyos han sido aprovechados para la construcción de casas a pocos metros de su cauce, y la gente vive tranquilamente todo el año, simplemente debiendo sobrellevar la época de lluvias y la consiguiente inundación del camino, aunque en algunos sitios la presencia del agua no dura más de unos pocos días. Tal es el caso del Arroyo de Totalán, por ejemplo, que se encuentra a pocos kilómetros de la ciudad de Málaga, en la región española de Andalucía; sus habitantes hacen una vida normal y sólo deben aceptar unos días de incomunicación al año.
Los arroyos pueden desembocar en un río, en un lago o en el mar. La parte del arroyo menos profunda, que incluso puede cruzarse a pie, recibe el nombre de vado, baño, bañadero o balneario.
Lo frecuente es que los arroyos no sean navegables debido a su escaso caudal. Es posible, sin embargo, encontrar arroyos que pueden recorrerse con pequeñas embarcaciones. En algunos países de América del Sur, se utiliza la noción de arroyo para nombrar a verdaderos ríos de corta extensión que sí son navegables durante todo el año.
Los arroyos tropicales, así como los arroyuelos, poseen una estabilidad menor a la de los ríos, y su cauce puede pasar de estar seco completamente a presentar un poderoso torrente de casi 10 metros de profundidad en tan sólo unas pocas horas, a causa de una fuerte lluvia. Los de menor tamaño no pueden observarse desde el aire, ya que pasan por debajo de las copas de los árboles de los bosques.
Aunque el arroyo no es especialmente llamativo, se trata de un cuerpo de agua que da hogar a un importante número de especies animales; en los bosques lluviosos suele albergar a varias especies de insectos, algunos anfibios y peces. Por otro lado, no se debe olvidar que también se trata de una fuente de agua para muchos individuos terrestres.
La ciudad colombiana de Barranquilla debe enfrentar los problemas que generan los importantes caudales de agua que, durante el invierno, circulan por sus arroyos. En el año 1920, HERBARD & COMPANY INC estudió la situación y planteó a las autoridades la necesidad de crear un sistema de alcantarillado pluvial, pero la escasez de fondos hizo que Barranquilla se quedara sin protección contra las épocas de lluvia. Casi cuatro décadas más tarde otra compañía recomendó la canalización de ciertos arroyos, lo cual tampoco se llevó a cabo, y en la actualidad los habitantes pagan las consecuencias.
Otra utilización del término es simbólica y está vinculada al afluente de cualquier líquido: “El asesino le hincó el puñal y un arroyo de sangre comenzó a brotar de sus entrañas”, “La noticia generó un arroyo de lágrimas en los presentes”.
Arroyo también es el nombre de varias localidades y un apellido bastante usual en Latinoamérica: “Mi abuelo nació en Arroyo, una localidad de Cantabria”, “Carlos Arroyo es mi jugador preferido de la selección de baloncesto de Puerto Rico”.