Definición de abedul
El abedul es un árbol del orden de las fagales, que forma parte de la familia de las betuláceas. El género al que pertenecen los abedules, por otra parte, se denomina betula.
Existen diferentes especies de abedul. El abedul común (Betula pendula) es originario del sudoeste asiático y se encuentra también en el continente europeo, Canadá, la región caucásica y otras zonas. Su crecimiento suele darse en lugares con tierra húmeda y clima templado.
El abedul amarillo (Betula alleghaniensis), el abedul gris (Betula populifolia), el abedul negro (Betula nigra), el abedul enano (Betula nana), el abedul papirífero (Betula papyrifera), el abedul pubescente (Betula pubescens) y el abedul de Erman (Betula ermanii) son otras especies de abedul.
A nivel general, puede decirse que el abedul alcanza una altura de hasta treinta metros, con flores femeninas y masculinas y hojas de forma romboidal. Sus ramas tienen corteza de color plateado y se caracterizan por su flexibilidad.
Por sus características, el abedul es un árbol que se emplea de distintas maneras. Pueden aprovecharse tanto su madera como las raíces, las hojas y la savia para realizar construcciones, producir alimentos y desarrollar tratamientos médicos, por citar algunas posibilidades.
Gracias a la impermeabilidad de la corteza, el abedul se utilizó tradicionalmente para construir embarcaciones, zuecos, cuerdas y recipientes de distinto tipo. La flexibilidad de las ramas, por otra parte, hace que el árbol sea propicio para la confección de canastas y cestas.
Diversos pueblos, por último, atribuían al abedul propiedades purificadoras y por eso utilizaban sus ramas para alejar a los espíritus y los demonios.
Propiedades medicinales del abedul
Entre los componentes del abedul encontramos vitamina C, betulina, salicilato de metilo, resinas y aceite esencial, cada uno con diversas características beneficiosas para el cuidado de nuestro organismo y la lucha contra un gran número de enfermedades. A continuación se listan algunos de los trastornos que podemos combatir con ayuda de esta planta:
* sobrepeso y obesidad: son muchas las dietas de adelgazamiento que incluyen decocciones de abedul para colaborar con la pérdida de peso. Si bien debe tomarse de forma complementaria a un adecuado cambio en la alimentación, su uso marca una diferencia;
* retención de líquidos: dado que este árbol tiene propiedades diuréticas dignas de resaltar, es ideal para la estimulación de los riñones. Además, al tratarse de un producto natural, su contacto con nuestro organismo no es agresivo;
* artrosis y artritis: estas enfermedades pueden marcar un antes y un después en la vida de una persona, especialmente de aquéllas que usan su cuerpo de forma intensa para la práctica de algún deporte o la ejecución de un instrumento musical. El abedul ha probado ser un adecuado complemento para tratarlas, gracias a sus propiedades diuréticas y antiinflamatorias, porque desinflaman las articulaciones y colaboran con la eliminación de los líquidos allí retenidos;
* piedras en el riñón: para combatir este trastorno, muchas personas hacen uso de la savia de abedul, la cual es capaz de colaborar con la disolución de las piedras. Para obtenerla, es necesario realizar un corte en el tronco durante la última etapa del invierno, y luego beber dos pequeñas dosis al día;
* cistitis: es difícil pensar en un problema más molesto e irritante que la cistitis, especialmente en el contexto de una vida con obligaciones tales como el estudio y el trabajo fuera de casa. Por suerte, además de los medicamentos industriales, existe el abedul, cuya acción bacteriana en combinación con sus ya mencionadas propiedades antiinflamatorias son ideales para tratar la inflamación de la vejiga provocada por la presencia de microorganismos patógenos;
* diarrea: se recomienda beber una decocción de abedul tres veces al día. Para prepararla basta con agregar una cucharada de corteza por taza de agua.