Definición de abdomen
La palabra abdomen tiene su origen en el latín abdomen y se refiere al vientre. En la anatomía, puede referirse a la cavidad del cuerpo de los vertebrados que, en los mamíferos, queda limitada por el diafragma. Por otra parte, el término puede hacer referencia a un conjunto de vísceras.
El abdomen, por lo tanto, es la parte del cuerpo que se encuentra entre el tórax y la pelvis. El diafragma es el órgano que separa la cavidad abdominal de la torácica. En cuanto a las vísceras, la mayoría de las que se encuentran en la cavidad abdominal pertenecen al aparato digestivo. Por otro lado, en los animales invertebrados, como los insectos, el abdomen es la región que sigue al tórax.
A nivel general, se utiliza la noción de abdomen cuando se habla de una persona con un físico esculpido, sea porque hace ejercicio frecuentemente o porque goza de un metabolismo y una complexión tales que le permiten mantenerse en forma sin necesidad de esforzarse. Cuando, en cambio, se quiere nombrar la adiposidad, gordura o un vientre prominente, se utilizan sinónimos más o menos coloquiales, tales como «panza», y su uso puede ser tanto amigable como hiriente, según el contexto.
Tener un abdomen plano y marcado es el sueño de muchas personas, aunque no todos están dispuestos a conseguirlo a través del trabajo constante. El deseo de un cuerpo perfecto es una lamentable constante en gran parte de la población y los motivos son tan diversos como la forma en la que cada individuo lo vive. En primer lugar, los medios de comunicación transmiten dicha necesidad a través de las personas famosas, cuyas imágenes pasan obligatoriamente por una serie de retoques y filtros que las hacen más esbeltas, corrigen los defectos de la piel y les dan un aspecto ciertamente artificial, imposible de alcanzar en la realidad.
Incluso las estrellas que reniegan de dicho fenómeno ven sus fotos retocadas. Y de todos los objetivos necesarios para alcanzar la perfección estética, la delgadez es probablemente el más buscado. Para ello, el mercado ofrece un sinfín de métodos que etiqueta como infalibles, y que probablemente lo sean para la economía de los fabricantes. No importa cuántas veces se diga que el secreto para lucir una figura esbelta reside en una alimentación equilibrada y saludable y una frecuente ejercitación física; la mayoría de la gente prefiere consumir productos de procedencia dudosa que atenten contra su salud y su bolsillo.
Sin embargo, incluso quienes están dispuestos a hacer ejercicio pueden enfrentarse a grandes desilusiones luego de un tiempo. Si en lugar de comprar un suplemento alimenticio nos dejamos convencer por un aparato para tonificar nuestro abdomen con sólo diez minutos de trabajo al día, es probable que al cabo de unos meses nos preguntemos dónde están los resultados. Esto se debe a que son muchas las variables de la ansiada fórmula de la belleza, y es necesario cumplir con todos los requisitos para obtener un resultado satisfactorio: buena alimentación, ejercicio adecuado a nuestra estructura física y teniendo en cuenta cualquier problema muscular u óseo que tengamos, dormir lo suficiente por día, entre otros tantos puntos a tener en cuenta.
El abdomen inflamado o vientre inflamado es un trastorno que se produce cuando el área ventral es mayor de lo normal. Se trata de una afección común ante el exceso de alimento, el síndrome premenstrual, el embarazo o la deglución inconsciente de aire. La distensión abdominal suele producirse por la presencia de gases en el intestino, la acumulación de líquidos o por la intolerancia a la lactosa, por ejemplo.
El abdomen agudo, en cambio, es un proceso patológico intraabdominal que causa dolor, tiene repercusión sistémica y exige un rápido diagnóstico y tratamiento. La apendicitis aguda complicada, por ejemplo, es uno de estos procesos y requiere de un tratamiento quirúrgico.