Botánica

Tejido meristemo: qué es, características, funciones, histología y tipos


¿Qué es el tejido meristemo?

El tejido meristemo o tejido meristemático es el tejido vegetal especializado en la división celular y en el crecimiento de la planta. A partir de la actividad de estos tejidos, se originan todos los tejidos adultos de la planta. Se ubica en la raíz y en el vástago (parte aérea de la planta). 

Se han clasificado utilizando diversos criterios: el momento de aparición en el desarrollo de la planta, y por la posición que ocupan en el cuerpo de la planta.

Los meristemos también se conocen como yemas. Estos tejidos están activos durante toda la vida de la planta, y son los responsables del crecimiento indeterminado y permanente que presentan estos organismos.

Características del tejido meristemático

Origen

– Todas las plantas se originan por la actividad de una única célula (cigoto). Cuando se diferencia el embrión, hay ciertas zonas que mantienen la capacidad de dividirse.

– En la radícula del embrión, las células en posición subapical siguen dividiéndose. Mientras que en el vástago, constituye la primera yema (zona meristemática) de la planta.

– En algunos casos, células ya diferenciadas del cuerpo de la planta pueden volver a dividirse. Esto ocurre cuando se genera algún daño a la planta o por control endógeno.

Citología

– Las células meristemáticas no están diferenciadas. Su tamaño va de 10-20 µm y son isodiámetricas (con todos sus lados iguales).

– Presentan una pared celular primaria delgada formada por pectinas, hemicelulosa y celulosa.

– El núcleo ocupa el mayor volumen celular, hasta el 50% del citoplasma.

– Hay gran abundancia de ribosomas. También se presentan numerosos dictiosomas formando el aparato de Golgi. El retículo endoplasmático es escaso.

– Se presentan muchas vacuolas de pequeño tamaño, dispersas por todo el citosol.

– Los plastidios no están diferenciados, por lo que se denominan proplastidios.

– Las mitocondrias son muy pequeñas y con pocas crestas mitocondriales.

Actividad hormonal

– La actividad de las células meristemáticas está regulada por la presencia de hormonas producidas por la planta, que regulan la actividad de los tejidos.

– Las hormonas que intervienen más directamente en la actividad de los meristemos son las auxinas y las giberelinas.

– Las auxinas estimulan la formación y el crecimiento de las raíces. En altas concentraciones pueden inhibir la división en los meristemos del vástago.

– Las giberelinas son capaces de estimular la división celular en meristemos en latencia. Estas yemas generalmente han detenido su crecimiento por la influencia de factores ambientales. El desplazamiento de giberelinas a estas zonas rompe la latencia y el meristemo inicia su actividad.

Funciones del tejido meristemático

– Su función es la formación de nuevas células. Este tejido está en constante división mitótica y originará todos los tejidos adultos de la planta.

– Es responsable del crecimiento en longitud y grosor de tallos y raíces, y determina el patrón de desarrollo de los órganos de la planta.

Histología

Los meristemos ubicados en el ápice del vástago y la raíz tienden a tener forma cónica. Su diámetro está entre 80-150 µm.

En el vástago, este tejido se ubica en el extremo apical. En la raíz, las células meristemáticas se localizan justo por encima de la caliptra, que las protege.

Los meristemas del vástago y de la raíz tienen una organización histológica particular, que determina el tipo y la posición de los tejidos adultos a los que darán origen.

Meristema apical del vástago (MAV)

La zona meristemática en la parte aérea de la planta conforma las yemas. En la parte más apical del meristemo, se ubican las células menos diferenciadas. Se conoce como promeristema y tiene una configuración particular.

Se pueden reconocer dos niveles de organización. En el primer nivel, se toma en cuenta la capacidad de división de las células y la posición que ocupan en el promeristema. Se presentan tres zonas:

Zona central

Está formada por células alargadas y altamente vacuoladas. Estas células tienen una baja tasa de división en comparación con otras áreas del promeristema. Son pluripotentes: tienen la capacidad de originar cualquier tejido.

Zona periférica

Se ubica rodeando a las células de la zona central. Las células son pequeñas y se presentan muy teñidas. Se dividen frecuentemente.

Zona medular o de costilla

Se presenta justo debajo de la zona central. Las células son vacuoladas y se configuran en columnas. Conforman la médula del meristemo y dan origen a la mayor cantidad de tejidos del tallo.

Cuando las células de la zona central se dividen, parte de las células hijas se desplazan hacia los lados. Estas formarán la zona periférica y darán origen a los primordios foliares.

Las células que se forman hacia la parte inferior de la zona central, se incorporan a la zona medular.

En el segundo nivel de organización del MAV, se toma en cuenta la configuración y los planos de división de las células. Se conoce como configuración túnica-cuerpo.

Túnica

Está formada por las dos capas más externas del MAV (L1 y L2). Se dividen solo en el plano anticlinal (perpendicular a la superficie).

La capa más externa de la túnica origina la protodermis. Este meristema primario se diferenciará en el tejido epidérmico. La segunda capa participa en la formación del meristema fundamental.

Cuerpo

Se ubica por debajo de la túnica. Está formado por varias capas de células (L3). Se dividen tanto en sentido anticlinal como periclinal (paralelo a la superficie).

A partir de las células del cuerpo se forma el meristema fundamental y el procambium. El primero formará los tejidos de la corteza y médula del tallo, y los tejidos del mesofilo en la hoja. El procambium formará los tejidos vasculares primarios.

Meristema subapical de la raíz (MSR)

La zona meristemática de la raíz tiene una posición subapical, debido a que está protegida por la caliptra, que evita el daño de las células al penetrar el suelo.

La organización del MSR es mucho más simple que la del MAV. Por debajo de la caliptra, hay un grupo de células con baja tasa de división. Estas forman el centro quiescente, que se considera un centro de reserva de células meristemáticas.

En posición lateral al centro quiescente, se presentan una a varias capas de células iniciales, según el grupo de plantas.

La capa de células iniciales más externa originará las células de la caliptra. También formará la protodermis. Las capas más internas se dividen para formar el meristema fundamental y el procambium.

Tipos de tejido meristemático

Los criterios más utilizados para clasificar los meristemos son la posición y momento de aparición en la planta.

Por posición

Según el lugar donde se ubiquen en la planta, tenemos:

Apicales

Se ubican en las zonas terminales de las raíces y los tallos. En el tallo están en posición apical y en la parte terminal de las ramas. Forman las yemas apicales y laterales.

En cada raíz solo se presenta un meristemo, en posición subapical.

Laterales

Ocupan una posición periférica a raíces y tallos de gimnospermas y dicotiledóneas. Son los responsables del crecimiento en grosor.

Intercalares

Se ubican en el vástago. Están alejados de los meristemos apicales e intercalados con tejidos adultos. Son los responsables de incrementar la longitud de entrenudos y vainas foliares en algunas plantas.

Adventicios

Se forman en distintas posiciones en el cuerpo de la planta. Sucede como respuesta a diversos estímulos. Las células adultas son capaces de retomar la actividad meristemática.

Entre estos están los meristemos de cicatrización, originados cuando se causa un daño mecánico. También están los meristemoides, células meristemáticas aisladas que pueden originar estructuras como estomas o tricomas.

Por momento de aparición

En todas las plantas se presenta un crecimiento primario, que consiste básicamente en el crecimiento en longitud del vástago y las raíces. Los tejidos que se forman, se originan a partir de los denominados meristemos primarios.

En algunos grupos, como las gimnospermas y muchas dicotiledóneas, ocurre un crecimiento secundario, que es el aumento en el diámetro de tallos y raíces.

Ocurre principalmente en árboles y arbustos. Los tejidos que originan este crecimiento se forman por la actividad de los meristemos secundarios.

Primarios

Son la protodermis, el meristema fundamental y el procambium.

La protodermis forma los tejidos epidérmicos en raíces y vástago. Siempre está ubicada en la parte más externa de la planta.

A partir de la actividad del meristemo fundamental, se originan los distintos tipos de parénquima. Igualmente, se forman los tejidos mecánicos (colénquima y esclerénquima).

En el tallo se ubica hacia afuera y dentro del procambium. Los tejidos internos formarán la médula, y los externos la corteza primaria. En la raíz está entre la protodermis y el procambium. Los tejidos que origina constituyen la corteza radical.

El procambium forma los tejidos vasculares primarios (xilema y floema primario). Las células de este meristemo son alargadas y vacuoladas. En el tallo tiene posición lateral, mientras que en las raíces se presenta en el centro del órgano.

Secundarios

Son el felógeno, o cambium suberoso, y el cambium vascular.

El felógeno se forma por la desdiferenciación de células adultas del tallo o la raíz. En el tallo se puede originar de cualquier tejido de la corteza primaria. En la raíz se forma a partir de la actividad del periciclo.

Este meristemo forma, hacia la parte externa del órgano, el súber o corcho. Hacia la parte interna se origina la felodermis. El conjunto de súber, felógeno y felodermis constituye la corteza secundaria.

Los tejidos vasculares secundarios se forman a partir de la división del cambium vascular. Este meristemo se origina de restos de procambium que permanecen latentes en tallos y raíces.

Asimismo, en las raíces el periciclo también participa en su formación. En el tallo, células parenquimáticas pueden participar en la formación del cambium vascular.

El meristemo origina, hacia la parte externa, floema secundario, e internamente, xilema secundario. En todos los casos, se forma mayor cantidad de xilema secundario, o madera.

Referencias

  1. Fletcher, J. (2002). Shoot and floral meristem maintenance in Arabidopsis. 
  2. Risopatron, J.P.M., Y. Sun y B.J. Jones (2010). The vascular cambium: molecular control of cellular structure. Protoplasma.
  3. Stearn, K. (1997). Introductory plant biology. WC Brown Publishers.