Ballena gris: características, migración, alimentación, reproducción
La ballena gris (Eschrichtius robustus) es una ballena de la familia Eschrichtiidae. Es la única representante de esta familia. El nombre del género está dedicado al zoólogo danés Daniel Eschrich. Lleva el epíteto específico “robustus “debido a la robustez de su cuerpo. Las ballenas grises presentan las barbas más cortas y gruesas entre las ballenas barbadas.
Hasta hace poco tiempo, estaban ampliamente distribuidas en el hemisferio norte. Sin embargo, solo quedan dos poblaciones en el océano Pacífico, ya que las del Atlántico norte se extinguieron debido a las actividades de los balleneros.
Esta ballena es la que se desenvuelve más cerca de las costas continentales en comparación con otras especies. Además, son las que realizan la migración más larga, entre 15 y 20 mil kilómetros ida y vuelta, desde las zonas de alimentación primaria a las zonas de cría invernales.
La migración dura cerca de dos meses, siendo generalmente las hembras preñadas quienes parten primero, seguidas por otras adultas, hembras inmaduras y finalmente los machos.
Son pocos los enemigos naturales que poseen estas ballenas. Sin embargo, son muchos los ataques que sufren por orcas que generalmente no son letales y son evidenciados en marcas de mordidas o rasguños en la piel de los adultos. El objetivo de las orcas generalmente son las crías, que se ven afectadas durante la migración al norte luego de su nacimiento.
En cuanto a la alimentación de la ballena gris, generalmente capturan su presa (krill principalmente) a profundidades que varían entre 4 y 120 metros.
Índice del artículo
- 1 Características de la ballena gris
- 2 Migración
- 3 Taxonomía
- 4 Hábitat y distribución
- 5 Conservación
- 6 Alimentación
- 7 Reproducción
- 8 Referencias
Estas ballenas del grupo de los misticetos (Mysticeti), también conocidas como ballenas barbadas en conjunto con otras especies, se distinguen por ser animales bastante robustos y de movimientos lentos.
En apariencia, son más esbeltas que las ballenas francas y más robustas que los rorcuales con las que están íntimamente relacionadas. Estas ballenas alcanzan una longitud máxima de 15,3 metros aproximadamente.
Su coloración es grisácea, razón por la cual recibe el nombre de ballena gris. Además, posee manchas blancas irregulares en el cuerpo y en general, la piel siempre se encuentra plagada de percebes y crustáceos similares.
Estas ballenas no poseen una aleta dorsal, en su lugar, poseen una joroba que es continuada por una serie de abultamientos carnosos posteriormente. Poseen barbas de coloración amarilla o color crema pálido.
Los pliegues presentes en la garganta contrastan con los de otras ballenas, ya que son pocos (entre 2 y 7), cortos y longitudinales. La cabeza es triangular, no tan telescópica como la de otras ballenas y es relativamente corta con respecto a la longitud total del esqueleto.
Un rasgo característico de estas ballenas es la presencia de un quiste o glándula en la superficie ventral del pedúnculo caudal, cuya función permanece desconocida.
Las ballenas grises son observadas en grandes grupos en invierno en las cercanías de lagunas o en lagos costeros de la costa oeste de Baja California y el Golfo de California en costas mexicanas.
La migración comienza en otoño. Durante la migración pueden nacer algunas crías mientras se dirigen al sur, sin embargo, el resto de las crías nace alrededor de las lagunas poco profundas donde se reúnen en Baja California.
En primavera migran hacia zonas con aguas poco profundas y productivas del noreste del mar de Bering y los mares del sur de Chukchi y Beaufort e incluso más al oeste en localidades Rusas.
Esta migración de retorno ocurre en una primera etapa donde las hembras recién preñadas viajan primero, seguidas de otros adultos y los machos.
En una segunda fase retornan las hembras que parieron con sus crías. Esto ocurre debido a que los pequeños ballenatos permanecen de 1 a 2 meses en su área de nacimiento junto con sus madres, siendo el fin fortalecerse y crecer antes de realizar el largo viaje al norte.
Otras ballenas grises pasan el verano a lo largo de la costa pacífica de Norte América desde California hasta Kodiak (Alaska) formando grupos de alimentación.
Por otro lado, la población asiática de ballenas grises regresa cada año (incluyendo madres con crías y hembras preñadas) a Sakhalin, un sitio de alimentación, para luego migrar al Pacífico oriental durante el invierno. También algunas ballenas grises, que se alimentan en el mar de Okhotsk, migran a aguas japonesas y posiblemente más al sur en el invierno.
Las rutas de migración de la población asiática permanecen poco dilucidas.
La historia evolutiva de esta familia de ballenas es prácticamente desconocida, existiendo pocos representantes en el registro fósil.
La familia Eschrichtiidae, incluyendo el registro fósil, agrupa solo tres géneros, siendo el registro más antiguo del género Eschrichtius del Plioceno tardío (de 1,8 a 3,5 millones de años).
De acuerdo a estudios recientes, estas ballenas están más relacionadas con los rorcuales (familia Balaenopteridae) con las cuales forman el clado monofilético Balaenopteroidea.
La ballena gris ocupó gran parte de los océanos del hemisferio norte. Sin embargo, se extinguió en el océano Atlántico, quedando poblaciones relictuales en las aguas neríticas y productivas al norde del océano Pacífico y aguas adyacentes del océano Ártico.
Las poblaciones del Atlántico y el Pacifico estuvieron comunicadas durante los periodos interglaciares quedando separadas cuando las capas de hielo se formaron en la bahía de Hudson y el Mar de Beaufort al noreste de Canadá.
Actualmente existen dos grandes poblaciones de ballenas grises, una denominada población de California, la cual se ubica entre el océano Ártico oriental del Pacífico norte y Amerasia. La segunda población se encuentra en el Pacífico norte occidental, también conocida como población asiática ubicada frente al continente asiático.
Estas ballenas ocupan hábitats neríticos, es decir, zonas cercanas a las costas que no entran en contacto con la transición entre el continente y el ecosistema marino. También ocupan ambientes como los estuarios.
Las ballenas grises en general se encuentran por encima del umbral poblacional para considerarla en cualquier categoría de amenaza de la IUCN. Sin embargo, esto es solo aplicable a la población de California, la cual ha ido aumentando en número en las últimas tres generaciones.
La población reproductiva del atlántico Norte esta extinta.
La población occidental de ballenas grises en el océano Pacífico, un grupo genéticamente distinto o autocontenido en relación con la población californiana, se encuentra en peligro de extinción debido principalmente a la captura excesiva por los balleneros. Esta población posee alrededor de 250 individuos reproductores, lo que representa un umbral crítico poblacional.
El cambio climático y la disminución de la productividad de los mares donde se alimentan las ballenas grises suponen una gran amenaza.
Ya se han registrado varios eventos de disminución de las poblaciones del Pacifico oriental atribuidas a una gran mortalidad de ballenas por deficiencia de recursos. De hecho, han sido observadas ballenas con cuerpos flacos en vez de robustos durante las migraciones al Sur.
Ante un posible incremento en las condiciones de escasez de alimentos debido al cambio climático global, la supervivencia de estas ballenas dependerá de su adaptación a las transiciones.
Las ballenas grises suelen responder de manera negativa a los ruidos subacuáticos altos y generalmente cambian de dirección de nado para evitarlos. Por otro lado, la incidencia de estos ruidos durante las actividades reproductivas suele alterarlas.
Se ha documentado que cambian de rumbo y velocidad de natación cuando son seguidas por barcos de observación. También se han visto afectadas por derrames petroleros en su ruta de migración.
Ante estos hechos parece que las barbas de las ballenas grises muestran resistencia al daño por el contacto con petróleo al igual que su piel. Sin embargo, otros químicos pueden ser absorbidos por los crustáceos de los cuales se alimentan y podrían afectarlas negativamente al consumirlos.
Por otro lado, una gran cantidad de ballenas son heridas o resultan lesionadas mortalmente por colisión con grandes embarcaciones. Un hecho que podría influir en la estabilidad de las poblaciones reproductivas a largo plazo.
Estas ballenas se alimentan principalmente por succión intermitente. La cantidad de ítems alimentarios son variados y complejos. Generalmente toman su alimento del bentos, consumiendo organismos que viven y se desarrollan dentro o cerca del fondo marino como los anfípodos bentónicos.
Son capaces de ingerir de manera oportunista el plancton y nectos de aguas medias y superficiales y quizás algunas plantas, así como otros organismos pequeños.
Las estrategias de captura consisten principalmente por succión intermitente. Sin embargo, pueden realizar tragos oportunistas y roces para capturar recursos no bentónicos. El agua la extraen principalmente de sus presas que contienen en promedio entre 60 y 80% de agua.
La alimentación se concentra a lo largo de 5 meses. De mayo a octubre en la población californiana y de junio a noviembre en la población asiática, cuando se encuentran en aguas con alta productividad. Las actividades de alimentación ocurren a lo largo de todo el día
Debido a los cambios climáticos, la productividad de las zonas de alimentación de estas ballenas en el norte de su área de distribución ha disminuido hasta en un 75%. Esto último, ha provocado que las ballenas pasen más tiempo en dichas zonas o recorran zonas de alimentación alternativas. En este video se muestra cómo se alimenta una ballena gris:
La reproducción entre las ballenas grises ocurre principalmente durante la migración, generalmente a mitad del viaje. Sin embargo, también son frecuentes los eventos reproductivos en las lagunas poco profundas de reunión invernal.
Las hembras preñadas usan como área de parto lagunas costeras de la costa oeste de la península de Baja California y la costa de California.
La mayoría de los ballenatos nacen cerca o dentro de la Laguna Ojo de Liebre, Laguna de San Ignacio o la Bahía Magdalena. Otras lagunas costeras ya no son usadas en temporada de cría.
Solo las madres y crías ocupan estas áreas. El resto de las ballenas se distribuyen a lo largo de costas cercanas.
También pueden ocurrir eventos de reproducción durante la migración, pero la regla general es que la reproducción ocurra en las inmediaciones de las lagunas de crianza. En el siguiente video se muestra el apareamiento de dos especímenes de ballena gris:
- Cooke, J.G. 2018. Eschrichtius robustus. The IUCN Red List of Threatened Species 2018: e.T8097A50353881. http://dx.doi.org/10.2305/IUCN.UK.2018-2.RLTS.T8097A50353881.en. Downloaded on 28 October 2019.
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