Flora y fauna de Entre Ríos: especies representativas
La flora y fauna de Entre Ríos queda representada por especies como el ñandubay, el irupé, el princho, el manduví, entre otros. Entre Ríos es una de las provincias centrales de Argentina, de un total de 23 que existen en ese país. Dicha región, en conjunto con Corrientes y Misiones, forma parte de la Mesopotamia argentina.
Alrededor de un 15% del territorio está integrado por tierras anegadizas y por islas, que están rodeadas por arroyos y ríos, como el Paraná y Uruguay. El relieve es llano, surcado por numerosos cursos de agua. Con relación al clima, al norte es subtropical, sin presencia de la estación seca. Al sur es de tipo templado pampeano.
En la provincia existen más de 40 reservas naturales protegidas. En estas, la extensa y rica biodiversidad de flora y de fauna se encuentra resguardada de manera natural, por los ríos que rodean las áreas y por leyes ambientales del país.
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Flora de Entre Ríos
Ñandubay (Prosopis affinis)
Este árbol se encuentra en Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay. En estos países, suelen crecer en las áreas de mayor altura de las llanuras. También, pudiera sobrevivir en aquellas regiones que de manera periódica se inundan.
La altura de esta leguminosa pudiera estar entre 3 y 13 metros. El tronco es corto, con una corteza rugosa, gruesa y de color pardo grisácea. Además, presenta fisuras transversales y horizontales, formando así placas irregulares.
La copa tiene forma achatada. En los nudos de las ramas existen espinas, de aproximadamente 2 centímetros de largo. Estas son cónicas y se distribuyen en pares. Las hojas del ñandubay son pequeñas y caducas, pudiendo así ser fasciculadas o alternas.
La madera del Prosopis affinis es de color marrón, con tonos rosados. Por ser muy resistente a la intemperie, pudiera ser utilizada para elaborar estructuras que estarán expuestas al aire libre. Además de esto, es una especie melífera y sus vainas forman parte de la alimentación de los animales que forrajean en la región.
Irupé (Victoria cruziana)
El irupé o yacaré yrupe es una planta acuática que se encuentra en las cuencas de los ríos Paraguay y Paraná.
A partir del rizoma, que se encuentra sumergido, emergen las raíces. Estas son fibrosas y se adhieren al fondo del cuerpo de agua. Del sistema radical brotan largos y flexibles pecíolos, donde se ubican las grandes hojas flotantes.
Las hojas están cubiertas de una cutícula, que ayudan a repeler el agua. En la parte de abajo tienen un tejido poroso, presentando intercelularmente unas cavidades llenas de aire, facilitando de esta manera la flotación de la planta. Las estructuras de la planta que se encuentran sumergidas poseen espinas, protegiéndola así de los depredadores.
La flor del irupé se caracteriza por un particular aroma, similar al del ananá. Esta crece sobre un tallo que mide hasta 2,5 centímetros de ancho. El capullo floral tiene forma elongada y es de color blanco, con un cáliz rosado de 4 sépalos. Los pétalos exteriores tienen cámaras de aire, que contribuyen a que la flor flote.
El fruto es una baya cubierta de espinas. Es globosa y de color pardo, conteniendo en su interior numerosas semillas ovales.
Curupí (Sapium haematospermum)
Este árbol pertenece a la familia Euphorbiaceae. Se encuentra distribuido en Suramérica, especialmente en Uruguay, Argentina, Paraguay, Bolivia y Brasil. En Argentina, vive en las áreas del delta del río Paraná, donde forma parte de la selva de galería.
El curupí es una especie arbórea semidecidua, con una copa ancha, baja y globosa. Una de las características de sus ramas es que suelen crecer hasta casi llegar al suelo. Con relación los frutos, estos son de color rojo, aspecto que los hace muy llamativos.
El Sapium haematospermum es utilizado para hacer un pegamento casero, conocido como pega-pega. Para esto, se utiliza el látex que emana de la corteza, luego que esta sea cortada. Sin embargo, el látex puede ser altamente irritante para los ojos y para la piel.
Por otra parte, la madera es ligera, por lo que es empleada en la elaboración de cajas, tallados y como contrachapado. Las semillas del curupí han sido utilizadas como veneno para exterminar a las ratas.
Fauna de Entre Ríos
Princho (Guira guira)
El princho es un ave gregaria que habita en espacios tanto abiertos como semiabiertos de Brasil, Paraguay, Uruguay, Bolivia y Argentina.
La longitud total de este animal es de aproximadamente 34 centímetros. Aunque no existe un dimorfismo sexual muy acentuado, debido a que la apariencia del macho y de la hembra es muy similar, la hembra suele ser un poco más grande que el macho.
La región superior del cuerpo es marrón oscuro, con algunas rayas de color blanco. Contrariamente, la garganta, el vientre, el pecho y la grupa son blancas. La cola es ancha, larga de color marrón intenso, con la punta blanca.
En la cara destacan los ojos y un pico en tonos amarillos o naranjas, al igual que el pico. Además, esta especie tiene una cresta de color naranja-rojizo.
El cuco guira, como también es conocida esta especie, es un depredador oportunista que caza sus presas en el suelo o las captura entre las ramas. Su dieta se basa en insectos, gusanos, ranas, renacuajos y ratones. También se alimenta de aves pequeñas, de sus huevos o de los polluelos.
Martín pescador de collar (Megaceryle torquata)
Esta ave coraciforme, que pertenece a la familia Cerylidae, se distribuye desde la zona sur de Texas hasta Tierra del Fuego. En Argentina, esta especie se encuentra en casi todo el territorio, especialmente en la provincia Entre Ríos.
El tamaño de este animal es de aproximadamente 36 centímetros de largo. En la cabeza, que es de gran tamaño, se encuentra un semi-copete y un pico recto y agudo.
El plumaje del dorso y de la cabeza es de color gris azulado, mientras que el pecho es marrón. La zona ventral y la subcaudal del ala pudieran ser blancas, marrones o rojizas. Por otro lado, en el cuello se destaca una franja blanca, en forma de collar. La hembra es idéntica al macho, excepto por tener el pecho en tono azul pizarra.
En las costas argentinas puede apreciarse al martín pescador de collar posando en solitario sobre las ramas, a la espera de poder zambullirse y cazar a sus presas. Su dieta se basa en ranas, insectos, crustáceos y también pequeños peces.
Manduví (Ageneiosus valenciennesi)
El manduví es un pez que forma parte de la familia Auchenipteridae. La especie adulta mide alrededor de 40 centímetros, pesando un máximo de 1 kilogramo. Se caracteriza por su gran habilidad de nado, permitiéndole así escapar rápidamente de sus depredadores.
La coloración es blanca rosada y, debido a lo fino de su piel, puede observarse a través de esta un dibujo negro y ramoso, característico de este animal. Tiene una cabeza aplanada y larga.
En la parte delantera del cuerpo tiene una aleta dorsal. Mientras que, en el otro extremo, cercano a la zona anal, tiene una aleta pequeña adiposa. En una vista lateral del manduví real, como también es llamado el Ageneiosus valenciennesi, puede apreciarse un vientre prominente y algo caído.
Referencias
- Entreriostotal (2019). Provincia Entre Ríos. Recuperado de entreriostotal.com.ar.
- Kewscience (2019). Victoria cruziana. Recuperado de powo.science.kew.org.
- S. Schulenberg (2019). Guira Cuckoo (Guira guira). Neotropical Birds Online . Cornell Lab of Ornithology, Ithaca, NY, USA. Recuperado de neotropical.birds.cornell.edu.
- Reserva natural educativa Montecito de Lovera (2001). Martin pescador grande. Recuperado de cerrito.gob.ar.
- Ministerio de Producción y Trabajo de Argentina (2019). Manduvi. Recuperado de agroindustria.gob.ar.
- Wikipedia (2019). Entre Rios, province. Recuperado de en.wikipedia.org.