Botánica

Botrytis cinerea: características, taxonomía, síntomas, control


Botrytis cinerea es un hongo filamentoso patogénico que afecta una gran variedad de cultivos hortícolas y frutales de importancia económica. Conocido como moho gris o podredumbre gris, es un ascomiceto de la familia Sclerotiniaceae que ataca de forma primaria bulbos, hojas, flores y frutos.

Es un hongo necrótrofo capaz de desarrollarse sobre heridas y tejidos deteriorados, senescentes o muertos de diversos huéspedes. Se reproduce principalmente a través de conidios o esporas asexuales, cuyas masas de conidios grises se dispersan fácilmente a través del viento, agua o cualquier actividad física.

Los ambientes ideales para su propagación son los espacios cerrados con alta humedad relativa y temperatura fresca, como invernaderos o viveros. Además, es un patógeno común de plantas ornamentales o cultivos como fresa y uva, en especial durante las etapas de floración y fructificación.

Los síntomas se manifiestan como tejidos que se oscurecen y ablandan debido a la muerte de las células del huésped, posteriormente se cubren de un moho gris característico. De igual forma, la infección se puede desarrollar sobre células vivas, siendo visibles luego de 15-20 días. Una vez instalado es difícil de erradicar por diferentes métodos de control.

Índice del artículo

Características generales

Desde un punto de vista morfológico, Botrytis cinerea se caracteriza por la gran cantidad de conidios o esporas asexuales. Los conidios de forma ovalada se disponen de manera terminal al final de un largo conidióforo ramificado de color grisáceo.

En condiciones de baja temperatura o durante el invierno, el esclerocio o micelio endurecido del hongo permanece en hibernación en el suelo. Por lo general, crece sobre desechos vegetales en proceso de descomposición. Cuando las condiciones de humedad y temperatura le son favorables, dispersa los conidios con la ayuda del viento.

Las esporas no penetrar a través de los tejidos sanos, generalmente inician la infestación a través de heridas ocasionados por daños físicos, insectos o podas. Por este motivo, es importante realizar un efectivo manejo agronómico, ya que, una vez infectado el cultivo, su propagación se realiza fácilmente.

El patógeno no solo afecta los cultivos en plena producción, sino que puede atacar las flores o frutos una vez cosechados, así se encuentra almacenados a bajas temperaturas.

Como saprofito puede sobrevivir en una gran diversidad de plantas cultivadas y sobre material en descomposición. Los conidios se mantienen por más de un año bajo condiciones de almacenamiento, aunque se reduce su viabilidad. En el suelo no es capaz de sobrevivir, a menos que se mantenga como esclerocio sobre restos orgánicos.

Taxonomía

– Reino: Fungi

– Filo: Ascomycota

– Clase: Leotiomycetes

– Orden: Helotiales

– Familia: Sclerotiniaceae

– Género: Botrytis

– Especies: Botrytis cinerea Pers., 1801

Etimología

Botrytis: el nombre del género proviene del griego «botrys» que significa «racimo de uvas».

cinerea: el adjetivo específico deriva latín «cinerea», en alusión al color cenicientos de las esporas acumuladas sobre el moho.

Síntomas

Uno de los principales síntomas es la podredumbre de los tejidos blandos en flores y frutos. La podredumbre se inicia como una mancha de color pardo claro con márgenes irregulares.

Posteriormente el tejido se torna de color oscuro, pero los márgenes se mantienen de un tono más claro. La coloración de la mancha puede variar de acuerdo al tono del órgano afectado.

Es frecuente la aparición de pequeñas erupciones o eflorescencias grisáceas sobre los tejidos afectados. Estas coloraciones están compuestas por los conidios del hongo que se desarrollan de manera libre.

En el caso de las flores, la infección del hongo no se aprecia en un primer momento. Solo cuando el hongo se ha instalado se forman manchas pálidas con un anillo marrón oscuro. Posteriormente se inicia la necrosis de los tejidos cerca del lugar de la infección.

Suele aparecer bajo condiciones de humedad ambiental elevada y temperaturas frescas. Su incidencia es mayor en períodos de precipitación abundante o cualquier situación en que la superficie de la planta se mantenga húmeda, como el riego por aspersión frecuente.

La presencia de daños físicos o heridas sobre tallos, hojas, flores y frutos favorece la germinación de las esporas. Su presencia solo se detecta cuando los tejidos afectados se empiezan a pudrir y aparecen las manchas necróticas. Al final el tejido afectado se cubre por un moho grisáceo.

Plantas comúnmente afectadas

Como se ha mencionado, el hongo Botrytis cinerea afecta a diversos cultivos comerciales como plantas ornamentales, hortalizas y frutales. Sobre todo, afecta plantíos establecidas en espacios cerrados como viveros o invernaderos, donde se mantiene un ambiente fresco con elevada humedad relativa.

Este fitopatógeno puede ocasionar serias pérdidas económicas en cultivos de hortalizas como alcachofa, berenjena, calabaza, fríjol, lechuga, pepino, pimiento, tomate y zanahoria. En frutales como arándano, fresa, manzana, naranja, pera, plátano y uva. Asimismo, en alhelí, begonia, ciclamen, clavel, crisantemo, dalia, gerbera, gladiola, iris, lirio, rosa, tulipán y violetas.

Métodos de control

El moho gris o podredumbre gris ocasionado por Botrytis cinerea es una de las enfermedades más frecuentes en diversos cultivos, y su presencia no es una simple casualidad. Se trata de un hongo fitopatógeno que se desarrolla bajo condiciones de alta humedad relativa y temperaturas frescas.

Ningún cultivo comercial o silvestre está exento de padecer esta enfermedad, ya que, una vez afectados los tejidos, es difícil revertir su desarrollo. Aunado a ello, su propagación de realiza de manera sencilla, rápida y efectiva.

Por este motivo, es recomendable aplicar medidas de control cultural, control biológico o control químico, con el objeto de prevenir su incidencia.

Control cultural

Las denominadas «prácticas culturales» son una serie de acciones que permiten evitar la aparición del moho gris sobre cultivos comerciales o plantas de jardín. Un efectivo manejo cultural enfocado en evitar la presencia de cualquier fitopatógeno como Botrytis cinerea, requiere las siguientes acciones:

– Evitar densidades de siembra muy cerradas, en especial bajo condiciones de alta humedad ambiental y baja radiación solar. Poblaciones muy densas favorecen la dispersión del patógeno una vez establecido en el cultivo.

– Mantener un control efectivo de la aireación, temperatura, humedad y riego en los invernaderos. El exceso de humedad favorece el desarrollo y dispersión del hongo.

– Una vez detectado, es necesario eliminar inmediatamente las plantas infectadas, evitando contaminar el medio ambiente. El moho gris es un hongo extremadamente infeccioso y puede afectar las plantas vecinas rápidamente.

– Evitar los cambios bruscos de temperatura que puedan provocar la condensación de humedad dentro del invernadero. La acumulación de gotas sobre las hojas tiende a favorecer la aparición del hongo.

– Al propagar esquejes, estacas o injertos es convenientes tratar las heridas con algún tipo de gel protector o cicatrizante. En efecto, las heridas son la principal vía de penetración del hongo y el mismo ataca los tejidos débiles.

– La propagación por semillas requiere el uso de semillas certificadas o en buen estado.

– Se deben mantener las plántulas propagadas en vivero a cierta distancia. El moho gris es una enfermedad muy infeccionado que con solo infectar una planta puede propagarse rápidamente por el resto del cultivo.

– Todo los equipos y herramientas utilizados dentro del invernadero o vivero deben ser desinfectados con el objeto de prevenir la propagación de la enfermedad.

– De igual forma, los usuarios deben cuidarse de usar vestimenta adecuada y desinfectada al desplazarse en su lugar de trabajo.

Control biológico

El control biológico es una técnica que permite utilizar organismos vivos para reducir la incidencia o el impacto de un hongo fitopatógeno. Actualmente, existe una gran variedad de hongos o bacterias que controlan el moho gris bajo ciertas condiciones y manejo agronómico.

Esta técnica de control, además de ser efectiva, es una práctica respetuosa con el medio ambiente, ya que no contamina el ecosistema. De igual forma, no presenta efectos adversos sobre los animales ni los seres humanos.

Entre los principales agentes de control biológico contra Botrytis cinerea, se pueden mencionar:

– Hongos del género Mucor

Grupo de hongos filamentos que se desarrollan sobre diversos sustratos, su acción incluye competencia por nutrientes o espacio, y producción de metabolitos secundarios. Así como el microparasitismo y la estimulación del mecanismo de defensa de la planta huésped.

Entre las principales especies destaca el Mucor corymbilfer que se desarrolla sobre los alimentos descompuestos, como el pan mohoso y el Mucor mucedo que crece en el suelo y ocasiona la pudrición de las frutas. Asimismo, el Mucor pusillus que crece sobre el pan húmedo y el Mucor racemosus que se desarrolla sobre material vegetal en descomposición.

– Trichoderma harzianum

Se considera una de los principales hongos beneficiosos para el hombre, siendo utilizado ampliamente como agente de control biológico. Se usa en aplicaciones foliares y el tratamiento de semillas para controlar enfermedades ocasionadas por hongos fitopatógenos.

Su acción consiste en incrementar la capacidad de las plantas en absorber los nutrientes necesarios para enfrentar el ataque del moho gris. Se considera un organismo amigable del medio ambiente que no presenta efectos adversos contra la flora o fauna silvestre, ni los seres humanos.

– Bacillus subtilis

Se considera una bacteria cosmopolita que se desarrolla sobre diversos hábitats y se emplea ampliamente como agente de control biológico. Se emplea como un polvo mojable que se aplica en pulverizaciones a razón de 3-4 kg/Ha en cultivos de berenjena, fresa, pimentón o tomate.

Control químico

El control químico se basa en la aplicación de fungicidas. Además, de ser costoso muchas veces resulta poco efectivo, ya que Botrytis cinerea una vez instalado es difícil de erradicar.

Un control químico efectivo consiste en la aplicación preventiva de fungicidas a base de Iprodiona 50% P/V, Vinclozolina 50% P/P o Procimidona 50% P/P. Asimismo, es recomendable la aplicación de fungicidas de amplio espectro durante la floración y aplicar pastas fúngicas sobre los tejidos que presenten chancros.

El tratamiento químico debe ir acompañado de buenas prácticas de manejo agrícola con el objeto de incrementar las probabilidades de éxito. Una aplicación excesiva o uso del fungicida inadecuado puede traer consecuencias negativas, incluso más graves que el ataque del fitopatógeno.

Referencias

  1. Benito, E. P., Arranz, M., & Eslava, A. (2000). Factores de patogenicidad de Botrytis cinerea. Revista Iberoamericana de Micología, 17, S43-S46.
  2. Botrytis cinerea. (2020). Wikipedia, La enciclopedia libre. Recuperado en: es.wikipedia.org
  3. Botrytis cinerea Pers., 1801 (2017) Catalogue of Life: 2020. Recuperado en: catalogueoflife.org
  4. Botrytis cinerea o podredumbre gris (2020) Agromática. Recuperado en: agromatica.es
  5. Calvo Garrido, C. (2014). Control de la podredumbre por Botrytis cinerea mediante la aplicación de Candida sake CPA-1 y otras estrategias alternativas a los fungicidas químicos en uva de vinificación (Doctoral dissertation, Universitat de Lleida).
  6. Cano, M. A. (2013). Estrategias biológicas para el manejo de enfermedades en el cultivo de fresa (Fragaria spp.). Revista Colombiana de Ciencias Hortícolas, 7(2), 263-276.
  7. García, I. (2018) Botrytis cinerea: un exterminador de cosechas altamente infeccioso – detallado. Recuperado en: canna.es
  8. Koike, S., & Bolda, M. (2016). El Moho Gris, o Pudrición de Fresa. UC Cooperative Extension. Santa Cruz. Recuperado en: ucanr.edu
  9. Podredumbre Gris (2018) Seminis Vegetable Seeds, Inc. Recuperado en: seminis-las.com
  10. Técnicas para el control de Botrytis (2016) ABC Agro: Portal Agrícola chileno de Infoagro.com. Recuperado en: abcagro.com