Riesgos ambientales: factores, tipos, gestión, ejemplos
¿Qué son los riesgos ambientales?
Los riesgos ambientales son daños que se considera que pueden ocurrir en caso de surgir un desastre natural o causado por el ser humano (antropogénico). Cuando ocurre un desastre ambiental es que se ha materializado un riesgo ambiental, el cual está determinado por uno o más factores de riesgo.
Estos factores son aquellas condiciones ambientales o antrópicas que predisponen a una situación de riesgo y que están definidas por la peligrosidad y vulnerabilidad. La peligrosidad consiste en la probabilidad o posibilidad de ocurrencia de un evento o situación peligrosa. Por su parte, la vulnerabilidad es la probabilidad de que el ambiente sufra daños si se da este evento peligroso
Ejemplos de riesgos ambientales son el riesgo de que ocurra un terremoto, un maremoto, erupciones volcánicas pandemias o vertidos petroleros. Como se puede observar, son desastres ambientales que ocurren frecuentemente en el mundo.
Factores de riesgos ambientales
Son factores de riesgo ambiental todos los que promuevan la posibilidad de ocurrencia de un accidente o catástrofe que impacte negativamente en el medio ambiente. Sin embargo, para que dicha situación peligrosa o de amenaza se transforme en un determinado riesgo ambiental, no basta la probabilidad de ocurrencia.
Además, debe considerarse lo frágil que es el ambiente concreto ante la catástrofe. Es decir, hay que evaluar la vulnerabilidad o probabilidad de que el ambiente sufra daño ante ese evento peligroso.
Existen dos parámetros que determinan si un riesgo ambiental pude ser mayor o menor:
- La resiliencia del ecosistema: se refiere a la capacidad del ecosistema de absorber el impacto del evento y retomar su equilibrio, es decir su capacidad de recuperarse.
- La interferencia humana: se refiere al papel que juega el ser humano en provocar o amplificar el efecto negativo del evento. Por ejemplo, la diferencia en el daño resultante ante un terremoto cuando en la zona se instala o no una central nuclear. Al igual que cuando se construyen casas a orillas de ríos, sabiendo que hay un riesgo determinado de inundación.
Factores físicos
Entre los factores físicos que determinan un riesgo ambiental, es fundamental el contexto geográfico y la localización de las actividades humanas (interferencia). Al establecer instalaciones humanas en una determinada zona, puede aumentar el riesgo de ocurrencia de un evento peligroso e igualmente la vulnerabilidad.
Además, hay factores físicos naturales de riesgo, como todos los factores y elementos climáticos. De igual forma, las vibraciones, movimiento de placas tectónicas, radiaciones y ruidos.
Por ejemplo, en una montaña de fuerte pendiente, la presencia de un suelo poco profundo con una capa rocosa debajo. Esto mezclado con un evento de alta precipitación, puede llevar a que ocurra deslizamiento.
Factores químicos
Se refiere a la presencia de elementos químicos potencialmente dañinos para el ambiente y a los seres humanos. Los factores químicos dan lugar a riesgos especialmente atribuibles a la acción del ser humano.
También hay factores de riesgo químicos naturales, como por ejemplo la contaminación por arsénico que deriva de fuentes naturales del suelo.
Sin embargo, en la mayoría de los casos los factores de riesgo químicos tienen que ver con las instalaciones químicas y sus condiciones de seguridad. Esto incluye sustancias explosivas, tóxicas, irritantes, corrosivas, sean sólidas, líquidas o gaseosas.
Factores biológicos
Factores biológicos para que haya un riesgo ambiental pueden ser la presencia de insectos y otros animales que transmiten enfermedades, al igual que la existencia de organismos potencialmente peligrosos para el ser humano de forma directa. Ejemplos son microorganismos patógenos como virus, bacterias, hongos y protozoarios o animales ponzoñosos, como insectos, arácnidos y serpientes.
También implican riesgo ambiental biológico factores como el posible contacto con partes orgánicas derivadas de centros médicos y laboratorios. De igual forma el contacto con fluidos corporales de animales, los cuales pueden transmitir distintas enfermedades.
Factores sociales
Los factores sociales son las actividades humanas que determinan situaciones de posible ocurrencia de catástrofes ambientales. Por ejemplo, la alteración de los equilibrios ecológicos esenciales o la construcción de infraestructuras inadecuadas que puedan provocar o incrementar daños ambientales.
Así, la emisión de gases de efecto invernadero como el CO2 es un factor de riesgo provocado por el ser humano. Este factor incrementa el riesgo del calentamiento global, una de las principales catástrofes que amenaza al ambiente hoy en día.
Tipos de riesgos ambientales
El riesgo ambiental implica la posibilidad de un peligro que devenga en catástrofe y dicho riesgo es de dos tipos fundamentales: naturales y antrópicos. Sin embargo, muchos expertos incluyen un tercer tipo basado en la combinación de ambos, los riesgos socionaturales.
Riesgos naturales
Estos riesgos ambientales se presentan por la acción de fenómenos naturales con poca o ninguna interferencia humana. Entre estos riesgos ambientales están los terremotos, tsunamis, huracanes, erupciones volcánicas e impactos de meteoritos.
Riesgos antrópicos
Los riesgos ambientales de origen antrópico son todos aquellos donde el evento peligroso que amenaza con suceder sería causado por la acción humana. En este renglón entran los riesgos relacionados con posibles accidentes industriales o de transporte de productos potencialmente dañinos.
Por ejemplo, los derrames petroleros, vertidos químicos, vertido de aguas residuales no tratadas, escapes radiactivos, fugas de material de riesgo de laboratorios. Igualmente, el mal manejo de alimentos en la industria procesadora y expendedora de alimentos así como el mal manejo de fauna silvestre como alimento.
Riesgos socionaturales
Estos riesgos se generan por la combinación de fenómenos naturales y la interferencia y exposición al riesgo por parte de los seres humanos. Este tipo de riesgo da lugar a las llamadas catástrofes socionaturales.
Por ejemplo, cuando en una zona comprobadamente sísmica (proclive a sufrir terremotos), se construyen edificios no diseñados para resistir estos movimientos. En este caso, ante un peligro determinado (terremoto) se crea una alta vulnerabilidad (construcciones inadecuadas). Por tanto, peligrosidad más vulnerabilidad, da lugar a un riesgo ambiental determinado.
Gestión de riesgos ambientales
Ante la existencia de los riesgos ambientales la disciplina de la gestión ambiental dispone del área concreta o subdisciplina de la gestión de riesgos ambientales. Esta se encarga de identificar los riesgos, analizarlos, asignarles un nivel de probabilidad o posibilidad, establecer posibles consecuencias y sugerir medidas de prevención.
Identificación de riesgos
El primer paso es identificar los posibles sucesos iniciadores, es decir aquellos eventos que de ocurrir generarían un daño ambiental.
Análisis de riesgos
Luego, se establecen los posibles escenarios de daño ambiental, creando el árbol de sucesos. Es decir, a partir de cada posible suceso iniciador, se va estableciendo la cadena de eventos que pueden desencadenarse.
De tal forma que se van perfilando los distintos escenarios de peligro posibles. Posteriormente, se asignan probabilidades de ocurrencia a cada escenario, bien sea con métodos cualitativos o cuantitativos.
Hay eventos a los que se le puede establecer la probabilidad de que ocurran con más facilidad que otros. Muchos fenómenos naturales tienen cierto nivel de predicción, como una gran tormenta tropical, otros lo tiene más bajo como un terremoto.
Además, se evalúa la vulnerabilidad ante cada escenario y se establecen las posibles consecuencias en cada caso. Finalmente, con toda la información se hace la estimación de riesgo.
Respuesta a factores de riesgo
Dependiendo del contexto, cada riesgo ambiental en particular requerirá determinadas medidas para reducir su probabilidad de materializarse. También es posible que simplemente se acepte un determinado nivel de riesgo o que se preparen planes de contingencia para mitigarlo una vez materializado.
Ejemplos de riesgos ambientales
Terremotos
Se trata del llamado riesgo sísmico, que considera la probabilidad de un terremoto, al tiempo que toma en cuenta la vulnerabilidad ante el mismo. Este es un tipo de riesgo ambiental natural o socionatural, ya que la vulnerabilidad depende de factores sociales, como dónde y qué tipo de infraestructuras se construyen.
En este caso es difícil predecir la posibilidad de ocurrencia, aunque si las áreas susceptibles. Las ciudades ubicadas en áreas de contacto de placas tectónicas o sobre fallas, tienen alto riesgo de ocurrencia. Por ejemplo Ciudad de México (México), muchas ciudades japonesas o Los Ángeles (EE.UU.).
Erupciones volcánicas
Otro tipo de riesgo ambiental natural o socionatural son las erupciones volcánicas, las cuales tiene un nivel predictivo mayor al de los terremotos. Las zonas con volcanes activos enfrentan este tipo de riesgo ambiental de forma permanente, como las áreas alrededor del volcán de Fuego de Guatemala.
Tsunamis
Los tsunamis son olas de grandes dimensiones causadas por terremotos o erupciones volcánicas submarinas. El riesgo de que ocurran es alto en zonas de contacto entre placas oceánicas, como ocurre en el llamado Cinturón de Fuego del Pacífico.
El riesgo de tsunami es predecible solo con muy poco tiempo de antelación, una vez detectado el movimiento submarino. Ante tal eventualidad se emite un Alerta de Tsunami, que informa el riesgo de su ocurrencia.
Derrames, vertidos y escapes
Los derrames, vertidos o escapes de diversas sustancias peligrosas para el ambiente son un riesgo permanente a nivel mundial, definidos por factores antrópicos. Especialmente frecuentes son los derrames petroleros, que causan un fuerte impacto ambiental negativo, especialmente en áreas marinas.
Pero también toda instalación relacionada con la industria química implica un riesgo de fugas, con graves consecuencias ambientales. Igualmente, los escapes radiactivos en las centrales nucleares son un riesgo permanente, que de concretarse trae graves consecuencias.
Tal como quedó demostrado en el accidente nuclear de Chernóbil en 1986 en una central nuclear ucraniana. También el riesgo de vertidos de aguas residuales no tratadas, está acabando con gran parte de las fuentes de agua dulce y afectando los ecosistemas marinos.
Pandemia
Este tipo de riesgo ambiental biológico se hace cada vez más patente en el mundo. En este caso el peligro es la expansión a nivel mundial de un patógeno extremadamente contagioso, convirtiéndose en pandemia.
En tanto que la vulnerabilidad se manifiesta en las grandes concentraciones humanas que existen hoy en día. Así como en la facilidad de medios de transporte masivo y en la debilidad de los sistemas de salud pública.
Referencias
- Dirección General de Calidad Ambiental (2009). Guía de evaluación de riesgos ambientales. Ministerio del Ambiente. Perú.
- Lucía Araujo-Alvarado, L., Ortega-Montoya, C.Y. y Ávila-Galarza, A. (2018). El riesgo ambiental: su regulación, evaluación y comunicación. Universitarios Potosinos.
- Maturana, A. (2011). Evaluación de riesgos y gestión en desastres. 10 preguntas para la década actual, Revista Médica Clínica Las Condes.
- PNUMA. (1999). Documento de orientación del PNUMA Herramientas de reducción de los riesgos para el control de los productos químicos. ONU Medio Ambiente.