Nutrición

Dieta hipoglucémica: qué es, alimentos, tips y menús


¿Qué es una dieta hipoglucémica?

Una dieta hipoglucémica, o dieta para tratar la hipoglucemia, incluye carbohidratos con bajo índice glucémico, fibra soluble y proteínas vegetales y animales. Además, es importante evitar una serie de alimentos.

Actualmente, en el mundo existe un gran porcentaje de personas que sufren una enfermedad denominada hipoglucemia, donde encontramos pacientes de todas las características.

La hipoglucemia significa que los niveles de azúcar en sangre son bajos, y no necesariamente se padece diabetes. Los niveles de azúcar deben ser los normales, ni más altos ni más bajos, para gozar de buena salud.

Alimentos clave en la dieta para la hipoglucemia

La cantidad de alimentos beneficiosos es variada, recordando siempre no abusar demasiado de las cantidades. A continuación os dejamos una lista dividida según tres preceptos:

Alimentos generales favorables

Proteínas de origen vegetal o animal que se encuentran en estos alimentos:

– Huevo

– Carne

– Pescado

– Soja

Alimentos integrales

– Galletas de grano entero

– Tortillas de maíz

– Arroz integral

– Fideos de trigo

– Avena

Infusiones de hierbas sin cafeína

– Alfalfa

– Manzanilla

– Consuelda

– Diente de león

– Enebro

– Menta piperina

Alimentos a evitar

Tras ver los diferentes alimentos clave para realizar la dieta de una manera correcta y exitosa, es necesario conocer de primera mano cuáles son los que hay que evitar bajo todo concepto.

Debemos comenzar con las pastas, las cuales introducen altos porcentajes de condimentos grasos, como pueden ser, por ejemplo, las pillas o los canelones.

Asimismo, los productos pertenecientes a la confitería son especialmente perjudiciales, no ya solo para una dieta hipoglucémica, sino para cualquier otra. Dentro de esta familia encontramos todo tipo de dulces, helados, aperitivos, etc.

Por último, habría que señalar bebidas tales como las refrescantes de marcas reconocidas, como Coca Cola o Fanta. Estas, además de una gran cantidad de sustancias químicas perjudiciales, tienden a mostrar altísimas cantidades de azúcar.

Es por ello por lo que se recomienda, si se decanta por ellas, intentar siempre escoger las que no contengan azúcar, como las zero, o directamente buscar alternativas saludables, como zumos naturales o batidos.

Claves para realizar con éxito una correcta dieta

Comidas en pequeñas cantidades, regularmente y de forma constante

Siempre se ha dicho que hay que realizar un total de cinco comidas al día, pero la cosa cambia cuando hablamos de una dieta hipoglucémica.

Lo ideal aquí sería situarse entre las seis o siete comidas al día que ronden la ingesta de dos a tres horas normalmente. Además, nos ayudará a no aumentar de peso.

Ahora bien, una de las claves, como hemos mencionado antes, es ingerir pequeñas cantidades, pues comer en grandes proporciones puede crear insulina en exceso, y como consecuencia empeorar la hipoglucemia sufrida.

Ingiere carbohidratos con bajos niveles glucémicos

Si decidimos decantarnos por hidratos de carbono con un alto porcentaje glucémico, es posible que el azúcar en nuestra sangre haga que se estimule insulina para provocarnos una hipoglucemia rápidamente.

Por lo tanto, sería conveniente intentar evitar los hidratos de carbono refinados o procesados por los de bajo índice glucémico. ¿Cuáles pueden ser estos?

Cereales como la avena, pan de pasa, o la harina de grano entero molida, frutas pertenecientes a clima templado, y diferentes tipos de pasta de grano entero. Los cereales hay que consumirlos integrales.

Agrega proteína a tu dieta

Estas hacen que nuestros niveles de azúcar se regulen de una manera mucho más eficientes justo después de comer. Podemos escoger entre queso, pollo, pescado, verduras, huevos, verdura o incluso distintas variedades de semillas.

Añade fibra soluble

Al igual que el efecto que la proteína realiza sobre nuestro cuerpo, agregar fibra soluble a nuestra dieta ayudará de manera efectiva a la regulación de la glucosa. Su efecto hace que el agua se absorba creando un gel que consigue retrasar la elevación de los niveles de azúcar presentados.

Podemos encontrar fibra soluble en alimentos como el psilio, las semillas de linaza, avena, berenjenas, o frutas como la manzana o la naranja.

Evitar el consumo excesivo de cafeína

Esta produce que se estimule la producción en nuestro organismo de insulina, por lo que se llega a empeorar los síntomas derivados de la hipoglucemia debido a los efectos de la adrenalina.

Realizar ejercicio físico

Lo ideal para mantenernos completamente sanos sería la realización de actividad física. Lo ideal se basa en parámetros de realización de 30 minutos diarios de deporte un total de 3 días a la semana.

En este apartado la variedad está servida, pues se pueden realizar distintos tipos de deporte, como por ejemplo, running, natación, bicicleta, o incluso largas caminatas a una velocidad media-rápida, lo cual se torna en algo totalmente perfecto para combinar con nuestra dieta.

Pasos a seguir para realizar la ingesta de manera exitosa

Acudir a un médico

Antes de nada y de comenzar a ingerir y a practicar una dieta que sea accesible y sana para los hipoglucémicos, debemos acudir a la ayuda de un experto. Lo correcto sería acudir a un doctor especializado.

Por lo tanto, la dieta debería cambiarse después de visitar a un experto en la materia que pueda analizar el caso en particular para poder diagnosticarte y prepararte para lo que sería el siguiente paso.

Acudir a un nutricionista

Tras haber sido diagnosticado por el médico, y con el caso por delante, habrá que acudir a un nutricionista. Este, a raíz de analizar las características del paciente, podrá realizar una correcta visión sobre los alimentos que se deberán ingerir para planificar una tabla por días.

Tener cuidado con los síntomas

Es adecuado que vigilemos constantemente los síntomas de la hipoglucemia, pues estos pueden variar dependiendo de las cantidades, las veces o directamente el tipo de comida que se ingiere.

Así que es recomendable estar al tanto regularmente y proponer unas fechas fijas (por ejemplo, una vez a la semana) para hacer balance de cómo han afectado los alimentos a nuestro organismo.

Seguir las pautas

Seguir las pautas y los consejos prácticos es indispensable para el éxito de la dieta. 

Si esto se realiza de una forma adecuada, lo más probable es que no haya ningún tipo de problema a la hora de ejecutar la dieta.

Mantener el peso

Una vez estemos en plena dieta, habrá que intentar mantener siempre la misma cantidad de kilos. Según especialistas, está demostrado que la cantidad de peso interfiere en los distintos procesos corporales que controla la cantidad de glucosa en la sangre.

Es por ello por lo que es recomendable mantenerse siempre en la misma cantidad de peso.

Ejemplo de menú semanal

Basándonos en las características que debe presentar una ingesta correcta si se presenta hipoglucemia, hemos aunado dos tipos de variadas dietas, para así poder elegir la que más guste.

Dieta número 1

Desayuno

  • Una cucharada de levadura de cerveza mezclada con un jugo de tomate.

Media mañana

  • Una taza de infusión de manzanilla.
  • Una pieza de fruta, como por ejemplo, una manzana.

 Almuerzo

  • Dos filetes de pechuga de pollo cocinado a la plancha.
  • Una ensalada de lechuga y tomate con una cucharada de aceite vegetal.
  • Una sopa de brócoli.
  • Finalizamos con una gelatina sin sabor.

Merienda

  • Pequeño puñado de frutos secos, preferiblemente cacahuetes.

 Cena

  • Dos rebanadas de pan de grano entero.
  • Dos onzas de queso cheddar natural.
  • Un vaso de leche de soja.
  • Una pieza de fruta, como por ejemplo, una pera.

Dieta número 2

Desayuno

  • Tres cuartos de una taza de copos de maíz con leche desnatada.
  • Un par de tostadas de trigo entero con una rebanada de margarina más cucharadita de azúcar y mermelada.
  • Una pieza de fruta, a preferir, mandarina.
  • Tres cuartos de una taza de café descafeinado con sacarina.

Media mañana

  • Una manzana de tamaño mediano.

Almuerzo

  • Media taza de zanahoria cocida.
  • Una cucharada de aderezo italiano.
  • Un aguacate o plátano, a elegir.
  • Media taza de semilla y frutos secos.
  • Un pan de hamburguesa de carne magra con lechuga y tomate natural cortado en rodajas.

Media tarde

  • Una pieza de fruta, como por ejemplo, una manzana.
  • Una taza de leche desnatada.

Cena

  • Combinación de frutas, como fresas o uvas, por ejemplo.
  • Media taza de judías verdes junto a media patata horneada.
  • Rollito vegetal.
  • Un filete de pechuga de pollo al horno.

Otro tipo de alimentación para la dieta: los suplementos

Además de alimentos comunes, existe otro tipo de tratamientos alimenticios. Así pues, debemos hablar de los suplementos adicionales.

Estos se tratan de un aporte extra que viene dado comúnmente en forma de pequeños sobres, polvos, tabletas o incluso en pastillas.

Por ello, los expertos recomiendan añadir de 15 a 20 gramos de glucosa, si queremos mejorar nuestro estado en forma de suplemento.

También existen suplementos en forma de hidratos de carbono. Lo recomendable sería, de la misma manera que con la glucosa, ingerir un total de unos 15 gramos.

Hay que señalar que existen muchas más posibilidades de suplementos, pero las más corrientes suelen ser los dos ejemplos que os hemos expuesto en las anteriores líneas.