Bosque caducifolio: características, flora, fauna, localización
El bosque caducifolio es una formación vegetal con predominio del biotipo árbol, donde la mayoría de las especies pierden totalmente las hojas anualmente. Dependiendo de los autores, existen bosques caducifolios templados y tropicales.
Sin embargo, el término bosque caducifolio se usa más comúnmente para referirse al bosque caducifolio templado. Por otra parte, a los bosques caducifolios tropicales, muchos los denominan bosques deciduos o selvas deciduas.
Los términos caducifolio y deciduo pueden ser considerados sinónimos ya que hacen alusión a la caída del follaje. Los bosques caducifolios, sean templados o tropicales, se caracterizan por la pérdida del follaje durante el período más limitante del año.
En los bosques caducifolios templados la limitación es de balance energético y ocurre en el período de otoño a invierno. Para los bosques caducifolios deciduos la limitante es el balance hídrico, debido a un período seco marcado.
En general los suelos en los bosques caducifolios son profundos y muy fértiles debido al aporte periódico de la hojarasca.
Los bosques caducifolios templados se extienden por América del Norte y el sur de Argentina y Chile, Europa, Asia y este de Australia. Mientras que los bosques caducifolios tropicales ocurren en América tropical, África e Indomalasia. Estas formaciones vegetales se presentan en distintos tipos de relieve, desde planicies hasta valles y montañas.
En los bosques caducifolios templados del norte predominan especies de Quercus, Fagus, Betula, Castanea y Carpinus. Por su parte, en los bosques de coníferas caducifolias dominan las especies de Larix.
En el hemisferio sur predominan especies de Quercus y Nothofagus y en los bosques caducifolios tropicales abundan especies de leguminosas, bignoniáceas y malváceas.
La fauna característica del bosque caducifolio templado incluye al lobo, el oso, el ciervo, el alce, el reno y al bisonte europeo. Mientras que en los tropicales se encuentran diversas especies de felinos, monos y serpientes.
Los bosques caducifolios templados se presentan en climas continentales y oceánicos con cuatro estaciones marcadas y los de coníferas caducifolias en clima continental frío. Por su parte los bosques caducifolios tropicales se presentan en clima tropical cálido biestacional (estación seca y estación lluviosa).
Índice del artículo
- 1 Características generales
- 2 Tipos de bosques caducifolios
- 3 Localización
- 4 Relieve
- 5 Flora
- 6 Fauna
- 7 Clima
- 8 Referencias
En ninguna planta perenne (con un ciclo de vida de varios años) una hoja dura para toda la vida. Las hojas se van renovando, pero en algunas especies se pierden todas en un mismo período (plantas deciduas o de hojas caducas).
También están las especies marcescentes, que son aquellas cuyas hojas se secan permanecen en los tallos hasta la aparición de nuevas hojas.
Causa
Este proceso está asociado a ciertas limitaciones ambientales como déficit de agua o un balance energético bajo, que obligan a reducir el metabolismo. Una de las estrategias que presentan las plantas para lograr esto, es desprenderse total o parcialmente del follaje.
Mecanismo de respuesta
Las hojas son los centros metabólicos de la planta, donde se realiza la fotosíntesis, la transpiración y la mayor parte de la respiración. Además, mediante los estomas se libera el agua excedente en forma de vapor de agua.
Por tanto, al perder totalidad del follaje o quedar anulado (marcescentes) el metabolismo se reduce al mínimo de supervivencia. Esta pérdida del follaje ocurre en otoño en los bosques caducifolios y en la época seca en los bosques caducifolios tropicales.
Durante el período limitante, la formación de nuevos tejidos se detiene totalmente para reducir el metabolismo. Este es el caso de la formación de tejidos de conducción (xilema y floema) en el tronco de las plantas de zonas templadas durante el invierno.
Al iniciarse la primavera, comienza nuevamente la actividad de los tejidos y se forman nuevas células conductoras. Esto origina los denominados anillos de crecimiento que puede apreciarse al hacer un corte transversal del tronco.
Debido a que en las zonas templadas este proceso ocurre de forma regular, cada anillo de crecimiento corresponde a un período de latencia y activación anual. Por tanto, es posible estimar la edad de un árbol de una zona templada contando sus anillos de crecimiento.
En los árboles de los bosques caducifolios tropicales se puede apreciar igualmente anillos de crecimiento, pero estos no corresponden a cambios anuales. Es por esto que no es posible estimar la edad de los árboles tropicales a partir de sus anillos de crecimiento.
Esto es debido a que es común la ocurrencia de lluvias extemporáneas que alteran los patrones de latencia del metabolismo.
Los suelos de los bosques caducifolios típicos son profundos y fértiles, debido a los aportes periódicos de hojarasca y son ricos en materia orgánica.
Suelos de los bosques de coníferas caducifolios
En estas zonas predominan los suelos tipo podzol que son pobres en nutrientes, con formación de permafrost en algunas áreas y el mal drenaje. Estos suelos se forman debido a las bajas temperaturas y escasa humedad disponible durante casi todo el año.
Los bosques caducifolios se pueden clasificar en tres tipos principales. Uno de ellos en zonas templadas, otro en zonas frías y el tercero en zonas tropicales.
El primero es el bosque caducifolio templado de latifoliadas (angiospermas de hoja ancha) y al que comúnmente se hace referencia cuando se habla de bosque caducifolio.
Otro es el bosque de coníferas caducifolias, que está dominado por especies del género Larix, coníferas que pierden sus hojas. Mientras que el tercero es el bosque caducifolio tropical, también llamado bosque deciduo o selva decidua.
Este bosque ocupa extensas áreas de las zonas templadas de ambos hemisferios, y está conformado por árboles de angiospermas. Presenta un estrato superior de árboles (25 y 45 m de altura) y se puede formar un segundo estrato arbóreo inferior.
El dosel superior no es cerrado y permite el paso de la radiación solar, por lo que se desarrolla un sotobosque. Este último está constituido por arbustos y hierbas, alcanzando cierto desarrollo en áreas más abiertas del bosque.
El factor limitante es el balance energético, ya que en el período de invierno la radiación solar disminuye considerablemente. Las bajas temperaturas que se generan congelan el agua del suelo, haciéndola poco disponible para las plantas.
Por tanto, la totalidad de las especies que lo componen pierden su follaje en otoño y lo recuperan en primavera.
Forma parte de la Taiga, encontrándose en grandes áreas de Siberia y presenta una estructura simple con uno o dos estratos de árboles. El estrato inferior está conformado por juveniles de las especies que forman el dosel.
El sotobosque es muy ralo, formado por algunos arbustos o en algunos casos restringido a musgos.
El factor limitante es el balance energético, debido a la escasa radiación solar en el período invernal. Esto genera una escasez fisiológica de agua por congelación de la misma debido a las muy bajas temperaturas.
Como consecuencia de estas condiciones ambientales extremas, las especies pierden sus hojas en otoño y las renuevan en la primavera.
Su estructura es más compleja que la de los bosques templados y fríos, debido principalmente a la presencia de cierto trepadorismo y epifitismo. Es un bosque con árboles de 7 a 15 m de altura, uno o dos estratos arbóreos y un sotobosque de hierbas y arbustos.
En este bosque el balance energético es favorable todo el año, debido a que la incidencia de radiación solar es más o menos uniforme. El factor limitante es la disponibilidad de agua, debido a la existencia de una estación seca marcada.
El período seco viene determinado por la posición geográfica de los bosques en zonas tropicales que están sometidas al movimiento del cinturón de lluvias. Además, el cinturón de lluvias se desplaza por el régimen de vientos entre los trópicos y el ecuador terrestre.
En la época seca la mayoría de las especies del bosque pierden las hojas para reducir la pérdida de agua por transpiración. Durante el período lluvioso el balance hídrico se hace nuevamente favorable y los árboles producen nuevas hojas.
Las mayores extensiones de bosque caducifolio templado se encuentran en Europa y Norteamérica y los bosques de coníferas caducifolias se ubican principalmente en Siberia. Mientras que la mayor parte de los bosques caducifolios tropicales están en América tropical.
Los bosques caducifolios se extienden por la costa atlántica, Europa Central y Europa Oriental desde el norte de Portugal hasta los montes Urales. Sin embargo, actualmente los bosques caducifolios que cubrían la extensa llanura de Europa Central han desaparecido casi totalmente.
Se ubican en la mitad este de los Estados Unidos, el sureste de Canadá, y menor proporción en la costa oeste de Norteamérica. También se localizan bosques caducifolios templados en el sur de Argentina y Chile.
Los bosques caducifolios tropicales se presentan en Centroamérica, Norte de Suramérica y costa pacífica tropical. Igualmente, se pueden encontrar al este de Brasil y en el Gran Chaco (Bolivia, Paraguay y Argentina).
Se presentan bosques caducifolios tropicales de África sudoriental y de Madagascar.
En este continente se encuentran parches de bosque caducifolio templado desde Turquía hasta Japón y alcanzan su mayor extensión en Asia Oriental.
En el sureste asiático se distribuyen bosques caducifolios tropicales, extendiéndose desde la India hasta Tailandia y por el archipiélago malayo.
Se encuentran bosques caducifolios templados al este de Australia.
Los bosques caducifolios se desarrollan tanto en planicies abiertas como valles cerrados y montañas. En el caso de los bosques caducifolios tropicales, cuando ocurren en montañas es a alturas inferiores a los 600 msnm.
Europa y Norteamérica
Entre las especies que se localizan en los bosques caducifolios están el roble común (Quercus robur) y la haya (Fagus sylvatica). También son frecuentes el abedul (Betula spp.), el castaño (Castanea sativa) y el carpe (Carpinus betulus).
Suramérica
En los bosques caducifolios de esta parte del mundo se encuentran especies del género Nothofagus en asociación con Quercus. Entre los Nothofagus encontramos al raulí (Nothofagus alpina) de madera muy apreciada, y el ñire (Nothofagus antarctica). También está el hualo o roble maulino (Nothofagus glauca) cuya madera se emplea para la construcción de embarcaciones.
Asia
En esta región también son características las fagáceas en los bosques caducifolios, con especies como Quercus acutissima, Q. variabilis y Q. dentata. Estas conviven con especies endémicas de la región como Liquidambar formosana (Altingiaceae) y Pistacia chinensis (Anacardiaceae).
Las especies dominantes en este tipo de bosque caducifolio son gimnospermas del género Larix. Entre ellas están Larix cajanderi, L. sibirica y L. gmelinii y el alerce europeo (Larix decidua).
En los bosques caducifolios tropicales abundan las especies de leguminosas, bignoniáceas, malváceas y compuestas. En el trópico americano son también comunes las burseráceas, especialmente del género Bursera.
En Asia encontramos árboles como la teca (Tectona grandis) de madera muy valiosa y también fuente de aceite para el pulido de maderas.
Dos especies comunes a la extensión de estos bosques en el hemisferio norte son el lobo y el ciervo común.
Europa
Entre las especies de mamíferos destacan el lobo (Canis lupus), el oso pardo europeo (Ursus arctos arctos) y el jabalí (Sus scrofa).
Igualmente es el hábitat del zorro (Vulpes vulpes), el bisonte europeo (Bison bonasus) y diversas especies de ciervos, como el ciervo común (Cervus elaphus).
Norteamérica
Además del lobo, se pueden encontrar al puma (Puma concolor), el oso negro (Ursus americanus) y el alce (Alces alces).
Habita el alce (Alces alces), el reno (Rangifer tarandus, subespecies euroasiáticas) y el oso pardo (Ursus arctos). Asimismo, el zorro rojo (Vulpes vulpes), la comadreja siberiana (Mustela sibirica) y el armiño (Mustela erminea).
En América tropical se encuentran mamíferos como el pecarí de collar o cochino de monte (Pecari tajacu), y aves como la guacharaca (Ortalis ruficauda). Además, habitan especies de felinos pequeños, como el ocelote o cunaguaro (Leopardus pardalis), serpientes venenosas como la mapanare (Bothrops spp.) y especies de mono como el aullador (Alouatta spp.).
Estos bosques se presentan principalmente en clima continental o clima frío con grandes diferencias de temperatura entre verano e invierno. Los bosques caducifolios también pueden ocurrir en climas oceánicos o marítimos, especialmente en Europa occidental.
Clima continental
En este tipo de clima se presentan cuatro estaciones bien diferenciadas (primavera, verano, otoño e invierno). Se caracteriza por veranos cálidos o frescos e inviernos fríos, con temperaturas de congelación y nevadas.
Las oscilaciones térmicas entre día y noche son marcadas y las temperaturas medias en verano superan los 10 ºC, y en invierno se mantienen bajo cero. Las precipitaciones son de medias a bajas, ubicándose entre 480 y 800 mm anuales.
Clima oceánico o marítimo
Las áreas que reciben la influencia de los vientos marinos, no presentan oscilaciones térmicas muy marcadas. En este caso, los vientos y la humedad que acarrean, moderan las diferencias de temperatura tanto diaria como anual.
Están sometidos a inviernos largos, fríos y húmedos, mientras que los veranos son cortos, cálidos y secos. Las temperaturas medias anuales son de -3 ºC a -8 ºC y las precipitaciones de 150-400 mm (en algunos casos se acercan a 1.000 mm).
Se presenta en climas tropicales, bien sea del subtipo monzónico (con un pico máximo de lluvias en el año) o en el clima tropical húmedo-seco. En este último ocurren dos estaciones bien marcadas, una seca y otra lluviosa.
En general las precipitaciones son medias a abundantes, entre 900 y 2.000 mm anuales y las temperaturas cálidas (25 a 30 ºC).
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