Biografías de personajes históricos

Alvaro Obregón: biografía, gobierno, aportes


Álvaro Obregón fue un revolucionario, militar y político mexicano nacido en 1880. Ocupó la presidencia del país entre 1920 y 1924 y está considerado como el hombre que terminó con la violencia revolucionaria. En su etapa presidencial realizó una gestión favorable hacia los campesinos y obreros, además de impulsar la cultura.

En su vida militar, Obregón jugó un papel fundamental en la lucha del movimiento constitucionalista contra la dictadura impuesta por Victoriano Huerta. Tras el derrocamiento de este, Obregón derrotó en varias ocasiones a Pancho Villa. En una de esas batallas, perdió un brazo al estallar una bomba cerca del lugar en el que se encontraba.

Obregón participó en la elaboración de la Constitución de 1917. Ante los intentos de los sectores conservadores de anular algunos de los logros sociales, decidió presentarse a las elecciones. Su victoria ante Venustiano Carranza lo convirtió en presidente del país.

Durante su presidencia tuvo que enfrentarse a la oposición de los terratenientes y de la Iglesia Católica, temerosos de perder sus privilegios. En 1928, volvió a presentarse y ganar las elecciones, pero antes de volver a ocupar el cargo fue asesinado por un militante cristero.

Índice del artículo

Biografía

Álvaro Obregón Salido nació el 19 de febrero de 1880 en Siquisiva, en el estado de Sonora (México). Su padre, agricultor, falleció el mismo año en el que nació el futuro presidente. Por ese motivo, el joven debió dedicar buena parte de su tiempo a trabajar en el campo, lo que supuso que su educación primera se viera perjudicada.

Cuando terminó esa etapa de sus estudios, Obregón comenzó a trabajar en una hacienda de Huatabampo, donde permaneció hasta que cumplió los 18 años. A esa edad trató de cambiar de profesión, pero tuvo que volver pronto a las labores agrícolas.

Aún muy joven, a los 23 años, contrajo matrimonio y compró un rancho para fijar la residencia familiar. Sin embargo, su esposa falleció pronto, en 1907. Obregón volvería a casarse años más tarde, cuando ya se había implicado en la política mexicana.

Inicios políticos

Aunque no participó en los acontecimientos que provocaron la caída del régimen de Porfirio Díaz, Obregón mostró simpatía por el movimiento revolucionario liderado por Francisco I. Madero.

Con el triunfo de Madero, Obregón decidió implicarse en la nueva etapa del país. Así, se presentó como candidato a la alcaldía de Huatabampo en 1911, nada más aprobarse la nueva constitución.

En su victoria fue fundamental el apoyo proporcionado por la comunidad indígena yaqui, al igual que lo sería en su paso a la política nacional.

Campaña contra Orozco

La presidencia de Francisco Madero no fue aceptada por todos los sectores del país. Entre los que tomaron las armas contra su gobierno se encontraba un antiguo aliado, Pascual Orozco.

Obregón se posicionó a favor del presidente y decidió participar en el conflicto. Para ello, reclutó a un importante número de hombres, muchos de ellos yaquis. Con su pequeño ejército, se preparó para defender al gobierno constitucional.

Al frente de sus hombres, el papel de Obregón fue notable. Gracias a eso, su nombre comenzó a ser conocido en la escena nacional. Cuando los partidarios de Madero derrotaron a Orozco, Obregón regresó a su hacienda sin querer aceptar ningún puesto en el gobierno.

Durante la campaña que le enfrentó a Orozco, Obregón conoció al que se convertiría en uno de sus colaboradores más cercanos, Plutarco Díaz Calles.

Dictadura de Huerta

La vuelta de Obregón a la agricultura en su hacienda duró poco. En el año 1913, un golpe de Estado liderado por Victoriano Huerta desembocó en la denominada Decena Trágica.

Maduro fue asesinado junto a su vicepresidente y Huerta estableció un régimen dictatorial en el país. Los protagonistas de la primera etapa de la revolución, aunque enfrentados antes del golpe de Estado, se unieron para hacer frente al dictador.

El primero en no reconocer la presidencia de Huerta fue Venustiano Carranza, que llamó a las armas a sus partidarios. Obregón respondió enseguida al llamamiento y fue nombrado jefe militar de Hermosillo.

La labor militar de Obregón fue, de nuevo, enormemente eficaz. Para finales de 1913, en solo unos meses de conflicto, sus tropas ocuparon toda Culiacán y Sinaloa. Después se dirigió hacia el sur con la intención de alcanzar Jalisco. Después de vencer en algunas batallas, consiguió hacerse con el control de Guadalajara.

Llegada a Ciudad de México

Para confirmar su victoria, a los revolucionarios solo les quedaba entrar en la capital. Huerta había admitido su derrota y había abandonado el país. Sus partidarios trataron de negociar un acuerdo con Obregón, pero este movilizó a su ejército y entró en Ciudad de México el 14 de agosto de 1914.

Pocos días después, Carranza llegó a la capital, condecoró a Obregón por sus servicios e inició el cambio de régimen.

La tarea de establecer un nuevo gobierno no resultó sencilla. Zapata y Villa se negaron a aceptar a Carranza como presidente y sus milicias continuaron activas. Álvaro Obregón intentó que todas las partes alcanzaran un acuerdo, pero sin éxito.

Carranza nombró a Obregón jefe del Ejército y le encargó acabar con sus antiguos aliados revolucionarios. En 1915, derrotó a Villa, aunque perdió un brazo durante una batalla.

Además de por esas victorias militares, la popularidad de Obregón se incrementó por medidas como la promulgación de una ley de salarios mínimos en algunos estados del norte. El gobierno de Carranza lo nombró Secretario de Guerra y Marina, cargo del que dimitió en 1917 para volver a ocuparse de sus tierras.

Plan de Agua Prieta y presidencia

Desde su hacienda, Obregón empezó a preocuparse por las decisiones que estaba tomando Carranza. Para el militar y político, el presidente se estaba alejando de los principios revolucionarios y acercándose a los sectores más conservadores.

Finalmente, Obregón se involucró en el llamado Plan de Agua Prieta, que tenía como propósito derrocar al gobierno carrancista. La insurrección, que comenzó con el desconocimiento de la autoridad presidencial, terminó con la muerte de Carranza y la convocatoria de nuevas elecciones.

Obregón fue uno de los candidatos a ocupar la presidencia y, a pesar de algunos movimientos que pretendieron minar su popularidad, logró hacerse con la victoria.

Presidencia

El programa de Obregón pretendía seguir los principios surgidos de la revolución. Una vez que juró el cargo en noviembre de 1920, procedió a aprobar una reforma agraria y cambios en la legislación laboral. Igualmente, realizó profundos cambios en la política educativa.

Esas medidas provocaron que tuviera un gran apoyo entre obreros, intelectuales y campesinos. Por su parte, los sectores más conservadores, como la Iglesia católica, se convirtieron en sus principales opositores.

La oposición de la Iglesia, cuyos privilegios en educación y como poseedora de tierras habían sido recortados, se centró en la figura de Plutarco Elías Calles. Este político ocupó primero la Secretaría de Educación y después fue nombrado sucesor de Obregón en la presidencia. Calles tuvo que afrontar la Guerra Cristera, que enfrentó al gobierno con movimientos armados católicos.

La legislatura de Obregón terminó en 1924. El militar y político volvió a su trabajo agrícola, aunque no dejó de estar pendiente de la situación política.

Vuelta a la política y asesinato

Sus partidarios convencieron a Obregón para que volviera a presentarse a la presidencia, a pesar de que la ley prohibía la reelección. Para que fuera legal, Elías Calles impulsó una reforma de la Constitución mexicana.

Obregón acabó aceptando la petición de sus partidarios. Sin embargo, en esta ocasión encontró mucha oposición. Tanto sus antiguos aliados yaquis como otras figuras importantes de la revolución trataron de levantarse en armas para impedir contra él, pero sin éxito.

Las elecciones fueron ganadas, de nuevo, por Obregón. Sin embargo, no pudo retomar el cargo, ya que un cristero lo asesinó el 17 de julio de 1928.

Características del gobierno de Obregón

Álvaro Obregón se hizo cargo de la presidencia de México el 1 de diciembre de 1920. Su presidencia se caracterizó por el intento de pacificar el país, además de por el reparto de tierras entre los campesinos de Morelos y del Estado de México.

Educación

Uno de los ámbitos que caracterizó el gobierno de Obregón fue la educación. Al frente de la Secretaría de Educación Pública nombró a José Vasconcelos, quien ya había ocupado ese cargo durante la presidencia de González Garza y que, tras pasar un tiempo exiliado, había dirigido la Universidad Nacional.

Las medidas de Vasconcelos fueron fundamentales para mejorar la educación en el país. El político llevó a cabo un plan para fundar escuelas rurales y para formar nuevos maestros. Igualmente, impulsó la edición de clásicos de la literatura.

Además, impulsó las escuelas de arte y oficios y promocionó a toda una generación de artistas entre los que se encontraban Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros o José Clemente Orozco.

Política interna y relaciones con EE.UU

Obregón trató de mantener el control de todos los sectores políticos del país, especialmente del ejército. Desde la presidencia, amnistió a Francisco Villa y a Saturnino Cedillo a cambio de que abandonaran las armas y ayudaran a mantener la estabilidad del país.

El gobierno de Obregón se esforzó por conseguir el reconocimiento de Estados Unidos. La relación, que comenzó con los contactos que mantuvo con las cámaras de comercio de Nogales y Tucson (Arizona), se formalizó con la firma del Tratado de Bucareli, en 1923.

La práctica normalización de relaciones le costó a Obregón realizar algunas concesiones a los estadounidenses. Estas se centraron en la política agraria y, sobre todo, en el petróleo.

Política agraria y laboral

Como seguidor de los principios revolucionarios, Obregón aprobó medidas que favorecían a los campesinos. Entre ellas destacó la reforma agraria que expropió latifundios y tierras más cultivadas. Estas se repartieron entre los campesinos.

Por otra parte, también apoyó y concedió subvenciones a algunas organizaciones obreras, como la Confederación Regional Obrera Mexicana y la Confederación General de Trabajadores.

Aportes de Obregón a la sociedad mexicana

Una de las medidas más importantes del gobierno de Obregón fue la expropiación de las tierras ociosas que estaban en manos de los terratenientes y de los latifundios. Los beneficiados fueron los pequeños productores y campesinos, que recibieron la tierra expropiada.

Secretaría de Educación Pública

Aunque Obregón creó varias instituciones importantes, la más destacada fue la SEP (Secretaría de Educación Pública). Al frente de la misma nombró a José Vasconcelos, quien inició la federalización de la educación.

El encargo de Obregón a Vasconcelos fue que mejorara la situación en tres campos diferentes: El escolar; las Bellas Artes; y las bibliotecas y archivos.

El presidente y Vasconcelos coincidían en la necesidad de crear un país progresista mediante la lectura. Por esa causa, fomentaron el estudio de la literatura y de la filosofía. Igualmente, introdujeron el muralismo en algunos edificios.

Tratados de Bucareli

Otro de los aportes del gobierno de Obregón fue la firma del Tratado de Bucareli con los Estados Unidos. Este acuerdo daba respuesta a las demandas presentadas por los estadounidenses durante el periodo revolucionario, entre 1910 y 1920. En esa década, solo 18 de las 3176 reclamaciones presentadas fueron resueltas.

El tratado se firmó el 13 de agosto de 1923, en la calle Bucareli de la Ciudad de México, lo que dio nombre a un acuerdo cuya denominación oficial fue Convención Especial de Reclamaciones.

Entre sus artículos se recogía que las propiedades agrícolas que hubieran sido expropiadas se pagarían en bonos si no superaban las 1755 hectáreas. Las mayores, por su parte, se debían abonar en efectivo.

Por otra parte, el gobierno mexicano se comprometió a no aplicar el artículo 27 de la constitución, el relacionado con los hidrocarburos. En consecuencia, las empresas estadounidenses podían seguir explotando el petróleo con libertad absoluta.

Uno de los motivos que llevaron a Obregón a negociar el tratado fue su convencimiento de que México necesitaba inversión extranjera para reconstruir el país.

El 31 de agosto de 1923, Estados Unidos reconoció al gobierno de Obregón. Francia, Bélgica y Cuba hicieron lo mismo poco después.

Otros aportes

Durante el mandato de Obregón se celebró el centenario de la independencia de México. Para conmemorarlo, el presidente ordenó acuñar nuevas monedas que sustituyeron a los billetes de Carranza.

Además, también se repararon el cableado telegráfico y las vías del ferrocarril. Por otra parte, el gobierno estableció normas para elegir a los miembros de los cuerpos diplomáticos y consulares, así como para regular su funcionamiento.

Referencias

  1. Biografías y Vida. Álvaro Obregón. Obtenido de biografiasyvidas.com
  2. Instituto Sonorense de Cultura. General Álvaro Obregón. Obtenido de isc.gob.mx
  3. Triedo, Nicolás. Álvaro Obregón, el general invencible. Obtenido de mexicodesconocido.com.mx
  4. The Editors of Encyclopaedia Britannica. Álvaro Obregón. Obtenido de britannica.com
  5. Minster, Christopher. Biography of Alvaro Obregón Salido, Mexican General and President. Obtenido de thoughtco.com
  6. The Famous People. Álvaro Obregón Biography. Obtenido de thefamouspeople.com
  7. Global Security. President Alvaro Obregon. Obtenido de globalsecurity.org