Historia

Las 14 Tradiciones y Costumbres de los Mayas Más Populares


Las tradiciones y costumbres de los mayas reflejan la trascendencia que hasta hoy ha tenido una de las más poderosas civilizaciones de Mesoamérica. Una cultura que logró extenderse durante más de 3000 años, abarcando los territorios que hoy constituyen Guatemala, Honduras, Belice, El Salvador y todo el sureste de México ubicándose en estados como Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán.

Tras haber creado cientos de dialectos y tener un legado científico y astronómico reconocido a nivel mundial, los mayas construyeron grandes monumentos religiosos y políticos que dan prueba de su increíble desarrollo económico y social.

Realizaron grandes avances en el campo de la escritura, matemáticas, arquitectura y medicina, llegando a sostener una gran y rica cultura gracias a su dedicación a la agricultura, el comercio, la caza y la pesca.

Los mayas sirvieron de ejemplo para las diversas culturas que emergieron posteriormente en Mesoamérica, dejando tras su paso sofisticados sistemas de distribución de agua y grandes cosechas de maíz, tubérculos, frijoles y algodón.

Además, crearon uno de los calendarios más precisos e hicieron aportes a la ciencia moderna, como la creación del número cero, fundamental para el sistema numérico actual.

Sus descripciones sobre la posición de las estrellas, el sol y la luz, aunado a sus creencias y costumbres los convierten en una civilización que, a pesar del tiempo, ha logrado permanecer en las raíces culturales de toda América Central y sus interesantes tradiciones y celebraciones son prueba de ello.

Costumbres de los mayas

Como se ha señalado, la colonización llevada a cabo por los españoles no se limitó a una conquista territorial y política. Así, los nuevos gobernantes de las tierras conquistadas iniciaron un proceso de aculturación de los pueblos indígenas. Se trataba de imponer las costumbres, creencias y tradiciones de los conquistadores para facilitar el control político.

En el caso de los mayas, los expertos destacan el carácter místico y espiritual de sus costumbres. Muchos de los aspectos de su vida, desde el nacimiento hasta la muerte, estaban regidos por sus creencias religiosas, algo que tenía su reflejo en la vida diaria.

El parto en las costumbres mayas y la ceremonia del Hetzmek

A la hora de tener un hijo, los mayas seguían un procedimiento establecido para que todo fuera bien. Así, las manos de la mujer eran atadas a una soga, que, a su vez, estaba amarrada a una viga. La parturienta debía colocarse en cuclillas, con las piernas flexionadas.

Cuando llegaba el momento, un hombre debía abrazar a la mujer por detrás mientras le soplaba la cabeza. Ese soplo, de acuerdo a sus creencias, ayudaba a salir al niño.

Una vez nacido el niño tenía lugar uno de los rituales más importantes dentro de la cultura maya: la ceremonia de Hetzmek. Para empezar, los sacerdotes realizaban augurios sobre el futuro del niño, siempre teniendo en cuenta el día del tzolkin en el que había venido al mundo.

Tres meses más tarde, en el caso de las niñas, o cuatro, en el caso de los niños, comenzaba la ceremonia del Hetzmek. Esta consistía en colocarlos a horcajadas por primera vez sobre la cadera de una persona de su mismo sexo, que jugaba un papel similar al de los actuales padrinos.

Realización de sacrificios humanos

Para la cultura maya, los sacrificios eran necesarios para garantizar el adecuado funcionamiento del universo, el paso de las estaciones, el crecimiento del maíz y el devenir del tiempo.

Tenían por objetivo proteger la vida de los seres humanos y a su vez mantener viva la existencia de los dioses.

De acuerdo a sus creencias, la sangre humana es el lazo que une a los dioses y al ser humano, de ahí que con la realización de sacrificios se alimentaba a los dioses y se pagaban las deudas que tienen los seres humanos con ellos.

Y es que los mayas creían que ellos le deben su vida a los dioses, y la manera de complacerlos era ofrecer tabaco, incienso, alimento y la propia sangre era la manera de demostrárselos.

Aspecto físico

Son varias las costumbres que los mayas seguían relacionadas con su aspecto físico. En muchos casos, también tenían un significado religioso.

Una de ellas era la costumbre de alargar los cráneos. Para ello, colocaban tablas en la cabeza de los niños al cuarto día después de su nacimiento. Una de las tablas se ponía sobre la frente y la otra en la zona posterior.

Igualmente, los mayas también provocaban estrabismo o bizquera en sus descendientes. Las madres colgaban de los pelos de sus hijos pequeñas bolas de resina. Los niños, atraídos por el objeto, intentaban enfocarlos con sus ojos torcidos todo el tiempo.

Agujerearse la nariz era otra de las costumbres de los mayas. Según los historiadores, lo hacían perforándose esa zona de la cara con una piedra de ámbar. La razón podía ser tanto estética o por algún tipo de reconocimiento honorario.

Por último, hombres y mujeres mayas se hacían incrustaciones de pequeños discos de obsidiana o jade en los dientes. En algunos casos, además, se limaban sus dientes en forma de sierra.

Matrimonio

En la cultura maya existía la figura del casamentero, al que denominaban atanzahab. Su función era descubrir los posibles conflictos que pudieran darse en la pareja para poder solucionarlos antes de contraer matrimonio.

Por otra parte, los padres de la novia recibían una dote por su hija. Además, el novio estaba obligado a trabajar durante un tiempo para su suegro. Ambos aspectos, dote y tiempo de trabajo, eran decididos por el atanzahab.

Dado que muchos matrimonios eran concertados por las familias era muy habitual que los novios se encontraran por primera vez el día de la boda. En muchas ocasiones, no llegaban a hablarse hasta después de la ceremonia.

Adoración de cenotes

Los cenotes son pozos de agua natural que destacan por su gran belleza. Aunque se pueden encontrar en otras zonas, es en la denominada Riviera Maya donde se pueden encontrar en mayor número. Estas formas geomorfológicas se asemejan a pequeñas cuevas, con grandes ríos subterráneos en su interior.

Los mayas dieron a estos cenotes un carácter religioso. Para ellos se trataba de lugares sagrados y, por lo tanto, los utilizaban para realizar rituales religiosos, como los sacrificios humanos.

De acuerdo a las creencias mayas, los cenotes eran la puerta al Xibalbá, un espacio mítico por el que las almas de los difuntos recorren en su camino al paraíso. De esta forma, los cenotes eran las vías de entrada hacia la eternidad y la dicha de la vida después de la muerte.

Muerte y entierro

Los mayas pensaban que algunos de sus ancestros iban a renacer como dioses. Por ese motivo, los funerales y los lugares de enterramiento tenían una gran importancia. Los cronistas españoles señalaron que los mayas recordaban a sus antepasados de cientos de años atrás, lo que prueba honraban a sus muertos.

Además de la propia ceremonia fúnebre, las familias mayas realizaban rituales en las tumbas de sus ancestros para intentar obtener su ayuda.

Los muertos se enterraban acompañados de pan y maíz, con objeto de que tuvieran alimentos suficientes para poder recorrer el camino que les llevaría al paraíso.

Tradiciones de los mayas

Algunas de las tradiciones de los mayas se han perdido con el tiempo y otras, por razones obvias, se han abandonado. Sin embargo, la conquista espiritual llevada a cabo por los españoles no pudo eliminar todas sus festividades. En ellas, los mayas han conservado algunos elementos de su antigua religión, aunque mezclados con los elementos cristianos.

Práctica de juego de pelota maya

También llamado “Pok a Pok”, por el sonido que producía la pelota al ser golpeada contra las paredes de las canchas o los brazos y caderas de los jugadores.

Los mayas acostumbraban a jugar a la pelota, y la existencia de diferentes canchas de pelota antiguas en la península de Yucatán lo demuestra.

Los mayas consideraban este juego como algo divino, en donde el objetivo principal era encestar la pelota en unos anillos de piedra dispuestos para ello.

Se creía que el juego era una constante lucha entre la luz y la oscuridad, de ahí que el equipo ganador representase la luz y su fuerza sobre las tinieblas. Generalmente, el equipo perdedor era sacrificado y ofrecido a los dioses.

Ceremonias de ofrenda de sangre

De acuerdo a la mitología de la cultura maya, los dioses habían derramado su propia sangre para formar el cuerpo humanos. Ese sacrificio era honrado en las ofrendas de sangre llevadas a cabo por el pueblo maya.

Además de utilizar a prisioneros de guerra, los mismos líderes mayas ofrecían su sangre en los rituales, aunque sin llegar a la muerte.

La ofrenda de sangre, aparte de honrar el gesto de sus dioses, debía permitir a los mayas alcanzar niveles de consciencia más elevados y poder comunicarse con sus deidades. Normalmente, este tipo de ceremonias se celebraban durante los acontecimientos importantes, como un nacimiento, una muerte o los cumpleaños de la nobleza.

Ceremonia de Sac Ha

Continúa siendo celebrada por los agricultores cada año con el objetivo de hacer crecer las cosechas de maíz.

Significando “agua blanca” en maya yucateco, consistía en elaborar una bebida sagrada preparada a base de maíz hervido molido mezclado con agua proveniente del rocío o de las profundidades de alguna cueva.

Dicha bebida se presentaba en un altar especial, siendo considerada una tradición poderosa encargada de conservar el equilibrio de la tierra.

Festival Hanal Pixan

Hoy en día, el festival Hanal Pixan se ha fusionado con la celebración cristiana de los santos. Esta mezcla ha dado como resultado una de las fiestas más conocidas de todo México: el día de los muertos. El objetivo es honrar a todos los fallecidos.

La visión de la muerte que tenían los mayas era muy natural. Para ellos no era una tragedia, sino algo inmerso en la naturaleza de las personas. Además, creían en una vida después de la muerte y en que sus ancestros debían ser honrados.

En la antigüedad, los mayas celebraban este festival de una manera muy similar al día de los muertos actual: con comida, música e incienso.

Ceremonia de Pa Puul

En el dialecto maya del Yucatán, Pa Puul significa “rompiendo vajillas”. El festival tenía como objetivo pedir que llegaran las lluvias y comenzaba al amanecer, momento en el que los niños recogían animales (reptiles sobre todo) y los metían en vasijas. Más tarde, estos envases se rompían, lo que producía un sonido parecido al de los truenos.

En la actualidad, este festival continúa realizándose todos los 24 de junio en buena parte del antiguo territorio maya de México.

Ceremonia maya o xukulem

Es una ceremonia para acercarse y comunicarse con Ajaw, el dios creador y formador del universo.

Dicha ceremonia es una celebración litúrgica de la espiritualidad maya, en la cual se queman resinas, candelas y ofrendas en diferentes lugares sagrados realizando una hoguera acompañada con música y bailes.

Las personas se arrodillan al frente del fuego, pues se cree que dependiendo del tiempo que la persona estuviera arrodillada más demostraba su agradecimiento hacia dios. El objetivo era inclinarse con profundo respeto ante los padres y abuelos.

Los mayas realizaban esta ceremonia para demostrar agradecimiento y solicitar peticiones, sanaciones y retiro de malas energías al dios. Igualmente se llevaba a cabo para pedir consejo divino y abundancia.

Ceremonia de Wajxaquib’B’ atz “el 8 del mono”

Ceremonia que se realiza cada 260 días y que sigue llevándose a cabo entre la gente maya quiche de Guatemala. El objetivo es celebrar el nuevo ciclo del calendario sagrado Tzolk’in de los mayas.

Durante la ceremonia se escoge a un hombre o una mujer que serán los contadores del calendario, y que servirán de guía espiritual y cultural a la comunidad.

Este rito de iniciación se realizaba en cuevas, manantiales y montañas considerados sagrados por ser portales que conectan el cielo con la tierra y el mundo de los ancestros.

La danza de Nan Pach y ceremonia de agradecimiento

Es una famosa ceremonia maya en la que se agradece a la naturaleza por la cosecha del maíz. La noche antes de la celebración se fabrican muñecas con cuerpos de mazorcas que se conocen bajo el nombre de “reinas o abuelas” mientras se recitan plegarias.

Al día siguiente, son puestas en preciosos altares que se adoran con música y bailes mientras se bebe pinol, una bebida caliente hecha a base de maíz.