Lengua y literatura

Francisco Rojas González: biografía, estilo y obras


Francisco Rojas González (1904-1951) fue un escritor, guionista de cine y etnólogo mexicano. Su obra literaria se desarrolló en torno a la historia y evolución de los pueblos aborígenes en el mundo hispano. En algunas de sus historias hubo rasgos costumbristas y tradicionales.

Rojas González abarcó varios géneros literarios, entre ellos las novelas, los cuentos y los ensayos. Algunos de sus títulos más conocidos y destacados fueron: Historia de un frac, El diosero, Lola Casanova y La negra Angustias. También colaboró en la realización de varios libros sobre etnología.

El escritor mexicano dedicó parte de su vida al servicio de su país en el exterior. Durante algunos años, se desempeñó como embajador y cónsul. Sin embargo, sus cortos –pero bien aprovechados– cuarenta y siete años de vida los consagró en gran medida a la literatura y la etnología.

Índice del artículo

Biografía

Nacimiento y familia

Francisco nació el 11 de agosto de 1904 en Guadalajara, Jalisco. El escritor provino de una familia de pueblo, de escasos recursos económicos. Si bien no se conoce información sobre sus padres, se sabe que estuvo emparentado con escritores destacados como Luis Manuel Rojas y José López Portillo y Rojas.

Educación de Rojas González

Francisco Rojas González cursó sus primeros años de educación en la localidad de La Barca, Jalisco, donde pasó su niñez y adolescencia. Luego, pasados unos años, se fue a la capital del país para estudiar comercio y administración, a la vez que se preparó como etnólogo en el Museo Nacional.

Primeras publicaciones

Rojas González comenzó a publicar su obra literaria a partir de 1930. Primero salió a la luz Historia de un frac, y luego le siguieron Y otros cuentos, en 1931. Tres años después apareció el ensayo La literatura de la Revolución; y el relato El pajareador, ocho cuentos.

Labor diplomática

Durante sus años de juventud, el escritor y etnólogo se dedicó a trabajar en el servicio exterior de su país. Se desempeñó como diplomático en varias naciones, entre ellas Guatemala, donde fue canciller. También fue embajador en Estados Unidos, específicamente en San Francisco y Colorado.

Rojas etnólogo

La vocación de Rojas González estuvo más orientada a la etnología, la cual compaginó de manera óptima con la literaria. Su pasión le llevó, en 1935, a dejar a un lado sus tareas diplomáticas para incorporarse al Instituto de Investigaciones Sociales dependiente de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Esa experiencia laboral le permitió recorrer el territorio nacional, oportunidad que aprovechó para entrar en contacto con los indígenas. Además, en aquel entonces, compartió sus conocimientos en publicaciones como Estudios etnológicos del Valle del Mezquita y Casta etnográfica de México, por nombrar algunas.

Demanda por plagio

Francisco Rojas González se vio obligado a procesar una demanda contra la productora Fox, debido a lo que él consideró un “plagio” a su obra Historia de un frac. La cadena se atrevió a llevar a la gran pantalla su relato en 1942, bajo el título Seis destinos, sin su permiso, y sin otorgarle crédito alguno.

Aunque la Fox reconoció el plagio, transfirió la responsabilidad al coproductor del film, el cual había sido dirigido por el francés Julien Duvivier. Finalmente el escritor mexicano no recibió ningún tipo de reconocimiento o paga. No obstante, su demanda hizo valer ante el público la autoría de la obra original.

Últimos años y fallecimiento

Desafortunadamente la vida de Rojas González fue corta. Sin embargo, aprovechó cuanto pudo para dedicarse, con pasión y esmero, tanto a la literatura como a la etnología.

El escritor mantuvo siempre su preocupación por los pueblos indígenas, así como por los marginados tras la Revolución. Sobre tales inquietudes desarrolló su obra. Entre los últimos títulos que alcanzó a escribir estuvieron: Cuentos de ayer y de hoy, Lola Casanova, 12 monografías y Por la ruta del cuento mexicano.

Francisco Rojas González falleció en la ciudad que lo vio nacer, el 11 de diciembre de 1951, cuando apenas tenía cuarenta y siete años.

Estilo

El estilo literario de Rojas González se caracterizó por el empleo de un lenguaje preciso, claro y de fácil comprensión. Sus intereses por lo social, y la antropología lo condujeron a investigar y documentarse para darle profundidad a su literatura.

La temática principal de su obra fueron los indígenas mexicanos, y todo lo relacionado con ellos. Su método de observación y de contacto directo, sumado a sus conocimientos, le permitieron una producción cuidadosa, donde el ambiente jugó un papel importante.

Obras

Novelas

– La negra Angustias (1944).

– Lola Casanova (1947).

Breve descripción de sus novelas

La negra Angustias (1944)

Fue una de las novelas más importantes del escritor mexicano. Con ella ganó el Premio Nacional de Literatura. La obra guardó cierta relación con los relato del autor venezolano Rómulo Gallegos. El parecido destaca en la actitud de la protagonista hacia los hombres.

Angustias perdió a su madre después de haber nacido, situación que la llenó de odio. Creció y se interesó por la hechicería mientras vivió en casa de doña Crescencia. A lo largo de la historia la joven se vio envuelta en varias situaciones complicadas con los hombres, y estos enredos la llevaron a cometer asesinatos.

Fragmento

“Los muros sostenían grandes espejos con marcos dorados; sobre las lunas francesas habíase escrito una previsora pero oprobiosa tarifa. En los huecos de las paredes cromos alemanes con cínicas figuras que pretendían reconstruir las más atrevidas hazañas que la mitología atribuye al revoltoso diosecillo de los venablos inoculados…”.

Lola Casanova (1947)

A través de este relato, Francisco Rojas González reflejó la historia de Lola Casanova, una mujer que vivió en Sonora y se convirtió en leyenda tras ser secuestrada por una tribu indígena de esa ciudad. Su permanencia con los indios le agradó y terminó por casarse con El coyote, quien fuera el jefe de la etnia.

Fragmento

“Aquella moza, de contundentes caderas, de pechos agresivos y pasos garbosos, no es otra que Tórtola Parda, dueña de mágicos secretos y de encantos físicos irresistibles; lleva en sus manos un hígado de burra recién cercenado…

Las hembras Seris son entonces una prolongación de la testarudez, son un flujo que revienta a desusadas distancias…”.

Cuentos

– Historia de un frac (1930).

– Y otros cuentos (1931).

– El pajareador, ocho cuentos (1934).

– Chirrín y la celda 18 (1944).

– Cuentos de ayer y de hoy (1946).

– La última aventura de Mona Lisa (1949).

– El diosero (Edición póstuma, 1952).

Breve descripción de algunos de sus cuentos

El diosero (Edición póstuma, 1952)

Fue la obra más conocida de Rojas González, presentada a través de una colección de cuentos. La temática central del libro estuvo basada en las diferentes etnias indígenas de México, en relación a sus costumbres, tradiciones, valores e idiosincrasia.

Algunos de los cuentos que integraron la obra fueron:

– “Las vacas de Quibiquinta”.

– “Hículi Hualula”.

– “Los novios”.

– “La parábola del joven tuerto”.

– “El cenzontle y la vereda”.

– “Nuestra señora de Nequetejé”.

– “La venganza de Carlos Mango”.

– “El diosero”.

– “La triste historia de Pascola Cenobio”.

– “La plaza Xoxocotla”.

– “La tona”.

– ”La cabra en dos patas”.

– “Los diez responsos”.

“La parábola del joven tuerto”

El cuento se trató de un niño que era tuerto, y aunque su madre y él no le habían dado la importancia a su condición, sí les afectó cuando los niños de la escuela se comenzaron a burlar de su defecto. Ante el sufrimiento de su hijo, la madre buscó muchas soluciones.

El relato trató sobre la fe hacia la virgen de San Juan del pueblo de Yucatán. Madre e hijo acudieron esperanzados a la procesión, pero un suceso inesperado, la explosión de un cohete, hizo que el niño perdiera el otro ojo. La madre lo vio como un milagro, y le explicó a su hijo que sería ciego y no tuerto.

Fragmento

“—La varilla de un cohetón ha dejado ciego a mi muchachito —gritó la madre, quien imploró después: —busquen un doctor, en caridad de Dios.

Él gimió y maldijo su suerte… mas ella, acariciándole la cara con sus dos manos le dijo:

—Ya sabía yo, hijito, que la virgen de San Juan no nos iba a negar un milagrito… ¡Porque lo que ha hecho contigo en un milagro patente!

Él puso una cara de estupefacción al escuchar aquellas palabras.

—Ese es el prodigio por el que debemos bendecirla: cuando te vean en el pueblo, todos quedarán chasqueados y no van a tener más remedio que buscarse otro tuerto de quien burlarse… porque tú, hijo mío, ya no eres tuerto”.

“La cabra en dos patas”

Este relato contó la vida de Juá Shotá, quien vivía feliz con su esposa e hija María Agrícola. Todo fue tranquilidad hasta que un día un ingeniero casado, se enamoró perdidamente de la hija de Shotá, y le propuso comprarle a la joven, a quien había comenzado a acechar desde el primer día que la vio.

Fragmento

“El indio borró la sonrisa que le había quedado prendida en los labios después de su carcajada y clavó la vista en el minero, tratando de penetrar en el abismo de aquella propuesta.

—Di algo, parpadea siquiera, ídolo —gritó enojado el blanco—. Resuelve de una vez, ¿me vendes de a tu hija? ¡Sí o no?

—¿No te da vergüenza a tu mercé? Es tan feo que yo la venda, como que tú la merques… Ellas se regalan a los hombres de la raza de uno, cuando no tienen compromisos y cuando saben trabajar la yunta.

—Cuando se cobra y se paga bien no hay vergüenza, don Juan —dijo el ingeniero, suavizando el acento—. La raza no tiene nada que ver… ¡Bonita casta que no sirve más que para asustar a los niños que vienen a los museos!”.

Fragmento de “Los diez responsos”

“Fue el lunes por la tarde; quedó en la cuneta de la carretera con los brazos extendidos en cruz, en su rostro cobrizo y polvoriento perduraba un gesto de sorpresa y en sus ojos semiabiertos un estrabismo horrible, que decía a las claras de la postrera conmoción…

El perro Jolín y esquelético, rascaba su sarna sin perder de vista el cadáver de su amo”.

Fragmento de “La tona”

“Crisanta, india joven, casi niña, bajaba por el sendero; el aire de la media tarde calosfriaba su cuerpo encorvado al peso de un tercio de leña; la cabeza gacha y sobre la frente un manojo de cabellos empapados de sudor…

La marcha se hacía más penosa a cada paso; la muchacha deteníase por instantes al tomar alientos; mas luego, sin levantar la cara, reanudaba el camino con ímpetus de bestia…”.

“El diosero”

Narró la historia de un indio que tenía la capacidad de moldear ídolos para ayudar a su comunidad, que vivía en medio de la selva junto a sus tres esposas. Sin embargo, un día decidió poner en práctica su habilidad para detener las torrenciales lluvias, y las mujeres no podían verlo en su faena.

Fragmento

“Fuera de la champa, la selva, el escenario donde se desenvuelve el drama de los lacandones. Frente a la casa de Kai-Lan, se laza el templo del que él es gran sacerdote, al mismo tiempo que acólito y fiel. El templo es una barraca techada con hojas de palma, solo tiene un muro que ve al poniente; adentro, caballetes de rústica talla… En la selva se desencadenan con furia diabólica, domadores de bestias…”.

“La triste historia de Pascola Cenobio”

La historia estuvo ambientada en una tribu yaqui. Trató sobre los esfuerzos de Cenobio para proveerle a su futura esposa todo lo que necesitara sin tener que depender de su suegro. Logró conseguir un empleo como guía de unos blancos; sin embargo, los de su etnia lo rechazaron por trabajar para otra raza.

Fragmento

“En los rostros impenetrables de los indios ha caído un velo sombrío; particularmente esta señal de desazón se hace más notable en las jóvenes mujeres, en aquellas admiradoras de la postura y de la gracia del Pascola malaventurado.

Emilia, la amada y prometida de Cenobio Tánori, está ausente debido al veto que a su presencia impone a la ley; sin embargo, su padre, el viejo Benito Buitimea, rico y afamado, no esconde su emoción ante aquel dramático suceso de quien es protagonista quien un día quiso ser su yerno”.

Ensayos

– La literatura de la Revolución (1934).

– El cuento mexicano, su evolución y sus valores (1944).

– 12 monografías (1947).

– Por la ruta del cuento mexicano (1950).

Referencias

  1. Francisco Rojas González. (2019). España: Wikipedia. Recuperado de: wikipedia.org.
  2. Tamaro, E. (2004-2019). Francisco Rojas González. (N/a): Biografías y Vidas. Recuperado de: biografiasyvidas.com.
  3. Francisco Rojas González. (S. f.). Cuba: Ecu Red. Recuperado de: ecured.cu.
  4. Francisco Rojas González. (2018). México: Enciclopedia de la Literatura en México. Recuperado de: elem.mx.
  5. Rojas González, Francisco (1904-1951). (S. f.). (N/a): La Web de las Biografías. Recuperado de: mcnbiografías.com.