¿Cómo era la organización social de los toltecas?
La organización social de los toltecas fue simple y comprendía solo dos clases principales de ciudadanos: los favorecidos por los dioses y los sirvientes. Esta estructura se consolidó tras años de haberse asentado civilizadamente en la hoy conocida localidad de Tula en México.
Los favorecidos estuvieron integrados por los gobernantes, los que ejercían el sacerdocio, los militares y los funcionarios públicos. Por su parte, los sirvientes estaban conformados por el resto del pueblo y su tarea era la elaboración y manejo de recursos para garantizar la estabilidad económica y la comodidad de las máximas autoridades.
La estructura de la sociedad tolteca fue piramidal, de arriba hacia abajo. En la punta de la pirámide estuvieron los que ostentaron el poder, quienes eran los más privilegiados económica y políticamente. En cambio, en la base se ubicaron los menos favorecidos, agricultores y artesanos pobres, que muchas veces eran tomados como esclavos.
Clases sociales de la cultura tolteca
La organización social de los toltecas estuvo representada por dos clases: la privilegiada, la cual gozó de riquezas; y la de los serviles, que estuvo integrada por la gente común del pueblo que se dedicó a satisfacer las necesidades de los jerarcas.
Es importante destacar que el nivel social estuvo sujeto en muchos casos a la clase de familia a la que pertenecía un ciudadano y también al puesto público que desempeñó dentro de la sociedad tolteca. Por otra parte, se tomó en cuenta la creencia hacia los dioses y la manera en como interactuaron con ellos.
Ahora bien, la estructura social de los toltecas estuvo clasificada de la siguiente manera:
Supremo gobernante
El supremo gobernante se ubicó en la cúspide de la pirámide de los toltecas desde el punto de vista social. En él residió el poder total y absoluto, era quien se encargó de diseñar las leyes, dar órdenes para la organización de guerras y batallas y hacer cambios en la estructura política y económica. Todo ello bajo la orientación del dios en que creían.
Por otro lado, el jefe máximo de los toltecas podía contar con el consejo de los sabios sacerdotes. Estuvo rodeado de altos funcionarios militares quienes actuaron en las diferentes batallas para ganar territorios y mantener el poderío de la monarquía.
Del mismo modo, el gobernante superior estuvo acompañado por su familia y con ellos compartía los beneficios de su alta clase social.
Vestimenta
Un rasgo característico del supremo gobernante y de sus familiares era la forma en que vistieron. El pertenecer a una clase social alta y con privilegios económicos les permitió llevar atuendos ostentosos comparados con los estratos sociales más bajos. Por ejemplo, utilizaron cinturones, capas (tilmatli) y cueitl, que era una especie de falda.
Además, los máximos jefes usaron una prenda en forma de taparrabos a la que llamaron máxtlatl. Todas sus indumentarias y ropas estaban decoradas con joyas y adornos que ilustraban la cultura tolteca. Las esposas y familiares de los gobernantes estuvieron a la par llevando un quexquémitl, que era un vestido de forma rectangular.
Vivienda
El máximo gobernante, sus familiares y allegados habitaron en enormes palacios sostenidos por colosales pilares de piedra tallados en forma de serpiente. Al mismo tiempo, sus viviendas estaban edificadas sobre troncos en forma piramidal.
La decoración se caracterizó por objetos de cerámica casi siempre en color rojo y líneas onduladas y rectas. Por otro lado, los palacios estaban rodeados de amplios patios centrales que servían como sitio de reunión.
Estas edificaciones no poseían ventanas, fueron diseñadas solo con puertas pequeñas en gran medida para proteger a sus habitantes de ataques enemigos.
Sacerdotes, guerreros y funcionarios
Los sacerdotes, guerreros y funcionarios públicos también formaron parte de la clase alta de los toltecas, ellos estaban debajo del supremo gobernante. Su posición social se debió a las castas familiares que sirvieron y a la labor bélica y administrativa que realizaron en cada una de las comunidades.
Las principales tareas de estos miembros de la alta sociedad estuvieron orientadas a organizar y dirigir los comandos militares y a administrar las riquezas de los pueblos que integraron la monarquía tolteca. En el caso de los sacerdotes su enfoque se mantuvo en la realización de cultos religiosos y en orientar al jefe máximo.
Prendas de vestir
La vestimenta de los sacerdotes, funcionarios y militares no era muy diferente a las del jefe absoluto. De tal manera que les era propio usar un cinturón con el objeto de sostener las armas durante las batallas en el caso de los militares. También llevaron taparrabos, faldillas y delantales. El cuerpo sacerdotal empleó el cueitl.
Los serviles
La clase servil era uno de los estratos más bajos de la sociedad tolteca. Sin embargo, en ella recayó el peso de la producción agrícola, la maderera, artesanal y todas las demás actividades que fueron necesarias para el flujo de la economía. Por otra parte, se trató de la gente que trabajó para la clase alta dentro de sus hogares o sitios de trabajo.
En relación a la vestimenta que distinguió a los serviles como clase baja estuvieron los taparrabos y el enredo, el cual era un trozo de tela que servía para taparles las nalgas. El calzado no formó parte de su atuendo, ya que siempre andaban descalzos.
Esclavos
En la parte más baja de la estructura social piramidal de los toltecas estuvieron los esclavos, una clase marginada integrada por prostitutas, prisioneros de guerra y por trabajadores de los gobernantes.
En muchos casos, las élites castigaban cruelmente a estos ciudadanos por desobedecer órdenes y en el peor de los casos eran sacrificados a los dioses. Hablar de la vestimenta de estos individuos es referirse únicamente al uso de taparrabos.
Desde el punto de vista económico no gozaron de independencia y tampoco podían tomar decisiones, eso se debió a que sus vidas prácticamente pertenecieron a los poderosos jerarcas. Fueron un grupo limitado en todos los aspectos.