Recolección de datos: concepto y técnicas
La recolección de datos es una actividad donde se agrupa o se recoge información importante sobre un tema determinado; por lo general, esta actividad tiene como objetivo aportar conocimientos necesarios para el desarrollo de un trabajo o una investigación.
Por ejemplo: para conocer los síntomas de un nuevo virus, los científicos recolectan datos que les permitirán establecer las características de la enfermedad. Para ello, realizan algunas encuestas que ofrecen información sobre el virus. En este caso, los datos pueden estar conformados por la edad de los enfermos, los malestares que cada uno de ellos experimenta, entre otros.
La recolección de datos también se usa en las actividades periodísticas; por ejemplo, si un periodista desea conocer la situación económica de una ciudad, primero debe recoger información a través de entrevistas realizadas a un porcentaje de las personas que habitan en ese lugar. Luego, el periodista establece unas conclusiones según las respuestas de la mayoría de los entrevistados.
La recolección de información se lleva a cabo de distintas maneras: puede ser a través de encuestas y entrevistas, mediante la observación de fenómenos o a partir de consultas bibliográficas (es decir, a partir de la revisión de libros y materiales donde se registraron los datos).
Además, esta actividad no solo la realizan investigadores y científicos; también es muy usada en las escuelas e instituciones educativas. Esto ocurre —por ejemplo— cuando los profesores recolectan datos de sus alumnos (edad, sexo, notas de los exámenes…) con el objetivo de conocer el desempeño académico de un grupo de estudiantes.
Índice del artículo
- 1 Concepto de recolección de datos
- 2 Técnicas de recolección de datos
- 3 Técnicas según datos cualitativos y datos cuantitativos
- 4 Referencias
La recolección de datos como concepto es bastante reciente; se puede establecer que surgió con la aparición de las disciplinas a partir del siglo XVII. En esta época, los conocimientos comenzaron a dividirse en varias ramas y se les otorgó una serie de nombres a las actividades de investigación realizadas por el ser humano.
Sin embargo, algunos afirman que las personas han usado este método desde los inicios de las civilizaciones. Por ejemplo, el filósofo Aristóteles se encargó de recopilar 540 especies distintas de animales; para ello, tuvo que recolectar información y observar metódicamente la naturaleza.
En líneas generales, la recolección de datos es un proceso de recopilación cuyo objetivo es obtener información para establecer conclusiones sobre un tema determinado. Esta actividad se puede aplicar en cualquier disciplina; ya sea en las ciencias sociales, los negocios, las ciencias naturales, entre otras.
Por ejemplo, si se desea estudiar una especie de loros, el investigador debe recoger una serie de datos que indiquen el peso, la alimentación y los colores de estas aves. A partir de esta información, la persona establece unos resultados que permiten conocer con mayor profundidad las características de esta especie.
Esta actividad es muy importante dentro de cualquier investigación, ya que le otorga veracidad al trabajo. Es decir, la recolección de datos es esencial para que las personas tomen con seriedad la investigación que se está realizando. Esto ocurre porque los datos permiten establecer preguntas y respuestas objetivas que guiarán adecuadamente al investigador durante su trabajo.
Vale resaltar que los datos se pueden definir como cuantitativos o cualitativos; en el primer caso, se trata de una información que se expresa en caracteres numéricos (como el peso, la edad, entre otros). En cambio, los datos cualitativos son características que se expresan mediante caracteres alfabéticos; es decir, en letras (como los colores, la raza, el nivel socioeconómico, entre otros).
Por lo general, existen cuatro técnicas para recolectar datos: las entrevistas, las encuestas, la observación y los cuestionarios.
Las entrevistas se pueden definir como conversaciones dirigidas a un determinado público que están estructuradas en un formato de pregunta-respuesta. Por esta razón, se afirma que una entrevista es un diálogo breve entre el entrevistador y el entrevistado.
Este encuentro tiene como objetivo recoger información sobre las ideas o los sentimientos de un grupo de personas sobre un tema determinado.
Por ejemplo, se puede realizar una entrevista para recolectar datos sobre la opinión de las personas acerca de las dietas vegetarianas; a partir de esta, el investigador puede conocer cuántas personas estarían dispuestas a alimentarse únicamente de productos vegetales, dejando de lado los alimentos de origen animal.
Al momento de emplear el método de entrevista, se debe elegir si las preguntas serán abiertas o cerradas: en el primer caso, se trata de preguntas que requieren de respuestas descriptivas (es decir, con grandes detalles).
Por otro lado, las preguntas cerradas son aquellas cuyas respuestas son limitadas y fueron previamente definidas por el entrevistador. Por ejemplo: respuestas como si, no, frecuentemente, ocasionalmente, nunca.
Es una de las técnicas de recolección de datos más antigua y más usada a lo largo de la historia. En líneas generales, consiste en observar al sujeto de estudio (este puede ser un grupo de personas, animales, plantas…) con el objetivo de determinar sus características.
En este caso, el investigador actúa como un espectador que analiza las particularidades del sujeto de estudio. Por ejemplo, si se desea conocer las características de los cactus—el objeto de estudio—, el investigador puede observar y describir los elementos que componen a este tipo de plantas: las raíces, el color, las púas, las flores (en caso de tenerlas), entre otros aspectos.
Tras observar el grupo de cactus, se procede a elaborar una lista donde se enumeran las características; esta actividad se considera como una recolección de datos.
Para usar la técnica de la observación, los investigadores siguen los siguientes pasos:
1- Definir el sujeto u objeto que se desea observar.
2- Determinar la duración de esta actividad (es decir, el tiempo que se usará para la observación).
3- Establecer los objetivos de la observación (es decir, qué se desea lograr con esta actividad).
4- Registrar lo que se observa de forma ordenada. Esto permitirá cuantificar o cualificar las características de forma efectiva.
5- Establecer las conclusiones.
Se pueden definir como un conjunto de preguntas precisas y sencillas que están dirigidas a un porcentaje determinado de la población. Al igual que las entrevistas, las encuestas tienen como objetivo recoger información sobre un determinado tema, sin embargo, se diferencian en su modo de aplicación.
Es decir, las entrevistas requieren de una interacción más profunda entre el entrevistador y el entrevistado, mientras que las encuestas emplean una interacción más superficial que no necesita de la presencia del entrevistador, ya que incluso pueden ser enviadas por correo o por email.
Por ejemplo, una marca de ropa puede enviarles a sus clientes una encuesta por correo electrónico con el objetivo de conocer la experiencia de los compradores al momento de asistir a las tiendas. De esta forma, la marca está recolectando datos que le permitirán mejorar el servicio que ofrece.
Los cuestionarios se utilizan principalmente para evaluar a un grupo determinado de personas. No deben confundirse con las encuestas, ya que los cuestionarios no se basan en un análisis estadístico.
Vale resaltar que un análisis estadístico o las estadísticas son una ciencia que busca recopilar datos para descubrir patrones o tendencias.
En consecuencia, las encuestas tienen como objetivo obtener datos específicos que serán evaluados mediante estadísticas; en cambio, los cuestionarios siguen una estructura más sencilla que no requiere de estadísticas.
Por ejemplo: un cuestionario puede ser el examen que realizó un grupo de alumnos, porque esto les permite a los profesores evaluar el conocimiento de los estudiantes. Por otro lado, una encuesta puede ser un conjunto de preguntas que se realizan para conocer los posibles resultados de las elecciones presidenciales.
Es importante destacar que, dependiendo del tipo de datos, se emplearán determinadas técnicas. Esto quiere decir que los métodos de recolección pueden tener variaciones si se trata de datos cualitativos o cuantitativos.
Cabe destacar que cualquier técnica de recolección de datos puede arrojar resultados de forma cuantitativa o cualitativa, ya que, básicamente, los valores o las cualidades son el medio de expresión de los datos.
Como se mencionó anteriormente, los datos cualitativos se expresan mediante caracteres alfabéticos y se pueden adquirir principalmente a través de la observación, las entrevistas y las lecturas bibliográficas (es decir, se recopila información mediante la lectura de textos).
Por ejemplo, si se desea realizar una observación cualitativa de las características de los gusanos, el investigador tendrá en cuenta los elementos no cuantificables (no numéricos) tales como el color y la alimentación de estos insectos.
Así mismo, un periodista realiza una entrevista cualitativa cuando le pregunta a un grupo de personas sobre su experiencia con una determinada película.
Para ello, el periodista utiliza preguntas como ¿Qué opina usted sobre la actuación de este artista? ¿está satisfecho con el desempeño del director? ¿le gustaron los efectos especiales? Entre otras. Como se puede notar, las posibles respuestas a estas preguntas no utilizan números.
Las técnicas cuantitativas consisten en utilizar datos que fueron producto de mediciones, por lo tanto, los investigadores utilizan únicamente datos numéricos; además, estos datos suelen evaluarse mediante un análisis estadístico.
Por ejemplo, si un investigador desea conocer el porcentaje de personas con sobrepeso en una localidad, puede realizar una encuesta cuantitativa donde se hagan preguntas acerca de la edad, el sexo, el peso y la estatura de las personas.
La observación también se usa para las investigaciones cuantitativas; por ejemplo, se puede investigar sobre las características de los gusanos, pero esta vez desde un enfoque numérico, registrando datos como la longitud, el número de patas, el número de ojos, entre otros.
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