Biología

Paleobotánica: historia, qué estudia, métodos, técnicas


La paleobotánica es una rama de las ciencias naturales que se encarga de estudiar los restos vegetales que existieron en eras pasadas. Se trata de una disciplina compartida entre la paleontología y la botánica; su importancia radica fundamentalmente en el análisis y la comprensión de ecosistemas y del clima del pasado geológico del planeta Tierra.

Esta ciencia estudia a los fósiles de plantas a nivel macroscópico y microscópico. El nivel macro se enfoca en hojas y tallos, mientras que el micro, analiza elementos como el polen y las esporas.

Índice del artículo

Historia

La paleobotánica evoluciona de la mano de la geología y la paleontología, al estar muy emparentada con estas dos ramas de las ciencias biológicas. Con el avance de la tecnología en el mundo Occidental, nuevos instrumentos, herramientas y métodos contribuyeron a que esta disciplina se diferenciara por sí sola.

Durante el siglo XVIII, más precisamente durante los primeros años de la década del 1700, ya existían publicaciones que hablaban de la importancia y el estudio de fósiles vegetales, piedras y sedimentos.

Según los expertos fue el libro Herbarium Diluvianum, del naturalista suizo Johann Jakob Scheuchzer, el que acumulaba la mayor cantidad de información y el de divulgación más grande en esa época.

La obra de Scheuchzer consistía en una recopilación de información detallada y exhaustiva sobre la vegetación europea. Los resultados de su investigación en países como Alemania, Inglaterra y Suiza, incluían gráficos de las plantas fosilizadas halladas en estas regiones.

Siglo XIX

Ya entrado el siglo XIX, el interés sobre la fosilización de las plantas y la geología creció al tiempo que se estructuraban otros estudios modernos. Pero no fue hasta la primera década de esta era que la paleobotánica adquirió su nombre en manera oficial y empezó a ser tomada seriamente.

Esto sucedió gracias a los estudios y publicaciones hechas por Johan Steinhauer en 1818, quien fue el primer científico en asignar a sus descubrimientos, clasificaciones y nomenclaturas. Esto marcó un antes y un después, ya que elevó el estatus del estudio de plantas fósiles a una auténtica ciencia en sí misma.

En el mismo sentido colaboró a la evolución de este estudio el trabajo hecho por Ernst von Schlotheim, quien también fue pionero en nomenclaturas binominales, solo que en 1820.

Era dorada

Posteriormente, durante la década de los 30, surgiría la que se conoce como “la era dorada” de la paleobotánica. Con la explosión de la revolución industrial aparecerían avances técnicos y nuevas clases sociales con interés en las ciencias y altos estudios.

Es en este momento cuando emergen miles de estudios en esta disciplina acompañados de la producción casi masiva de ilustraciones y, con ellas, aparece la profesión de ilustrador en ciencias naturales.

Apenas unos diez años después, apareció en escena el geólogo que sin lugar a dudas hizo la mayor contribución a la paleobotánica: el escocés Hugh Miller. Este notable científico destacó no solamente por poseer una colección enorme de plantas, rocas y animales fosilizados recolectados por el mismo, sino por ser un prolífico autor.

Hijo de una familia de comerciantes marítimos y capitanes de barco, Miller era un ávido lector e ilustrador que supo combinar su capacidad como autor de novelas con sus dones de investigador científico.

Métodos y técnicas

La mayor parte de los fósiles (incluyendo animales), se encuentran habitualmente enterrados en la arena o diferentes tipos de sedimentos. Esto puede darse en laderas de montañas, en la vera de los ríos o en zonas desérticas, entre otras.

No solamente es fundamental durante el proceso de estudio de los fósiles que su recolección no dañe la pieza, sino también que esta pueda ser conservada para que su posterior estudio no arroje resultados confusos o erróneos. Las piezas fósiles que no son tratadas adecuadamente pueden destruirse o perder información valiosa.

Es por eso que al momento de encontrar indicios de material orgánico fósil, los científicos paleobotánicos deben conservar de inmediato la pieza hallada para luego poder ser estudiada con éxito.

En la actualidad, y gracias a los avances científicos de la geología y la paleontología, podemos decir que existen por lo menos seis técnicas principales de análisis de fósiles.

Sección de tierra delgada

El espécimen a estudiar es cortado en pequeñas partes. La superficie de uno de estos fragmentos es pulida utilizando un químico limpiante. La sección recortada se pega sobre con resina fundida sobre un vidrio, luego el material excedente remueve. El vidrio con el material biológico adherido está listo para ser observado en el microscopio.

Técnica de pelado

El primer paso de esta técnica es grabar la superficie del fósil utilizando ácidos minerales, previo a un proceso de “envejecimiento” que puede durar unas semanas.

El siguiente y final paso, es lavar la superficie con agua, secarla y cubrirla con nitrocelulosa. Esta película se secará y podrá ser despegada (o pelada) para su estudio.

Técnica de transferencia

Esta técnica se utiliza más que nada en fósiles hallados en rocas o materiales duros. Un líquido de pelado se vierte sobre el material y, una vez seco, se remueve la parte de la roca que está sujeta al organismo.

Técnica de macerado

Este método implica que el material fósil permanezca sumergido durante una semana en una solución acuosa especial. Terminado este período de tiempo, el objeto se limpia con agua para remover cualquier tipo de ácido que pueda dañar su estructura, y queda listo para ser estudiado.

Técnica de rayos X

Bajo este método y como su nombre lo indica, el fósil a analizar es sometido a impresiones similares a radiografías. Esto se logra empleando máquinas de rayos X que arrojan información valiosa sobre la constitución de la pieza.

Técnica de microtomía

Esta técnica se utiliza sobre todo en tejidos que han pasado por el proceso de maceración. Una vez hecho esto, estas secciones de material se incrustan en una cera especial que al endurecerse se cortan en “rebanadas” finas por un micrótomo.

Este se trata de una máquina especial diseñada exclusivamente para el corte de todo tipo de materiales, con el fin de ser estudiado por científicos bajo el microscopio.

Referencias

  1. Biology Discussion. (s.f). Palaeobotany: Concept, Technique and Important Strata Botany. Recuperado de biologydiscussion.com
  2. Biology Discussion. (s.f). Studying Fossils in Laboratory, Palaeobotany. Recuperado de biologydiscussion.com
  3. González-Akre, E. (s.f). Paleobotánica: Plantas del Pasado Geológico. (PDF).
  4. Vergel, M., Durango de Cabrera, J., & Herbst, R. (2008). Breve historia de la paleobotánica y la palinología en el noroeste argentino. (PDF).
  5. Chesnutt, B. (s.f.). What is Paleobotany? – Definition & Importance. Recuperado de study.com