Modelo primario exportador: qué fue, origen, características, ventajas
¿Qué fue el modelo primario exportador en México?
El modelo primario exportador fue un modelo de desarrollo económico implementado por México y otros países de América Latina entre 1870 y 1930. Consistió en la exportación de materias primas agropecuarias y mineras a los grandes mercados globales, como Europa y Estados Unidos.
El modelo abrió las economías latinoamericanas (que estaban surgiendo) a las inversiones extranjeras, las cuales impulsaron el desarrollo de la minería, la agricultura, la ganadería y, más tarde, la explotación petrolera.
Sin embargo, el modelo también generó corrupción en la administración estatal de las rentas y regalías y obstaculizó la diversificación de la economía, condenando a estos países a la dependencia de una sola fuente de ingresos: las exportaciones de materias primas.
Finalmente, la crisis económica mundial de 1929 y la preferencia de la economía por bienes de valor agregado hizo el modelo exportador cada vez más insostenible.
Tanto México como el resto de Latinoamérica sufrió profundas reformas, pero nunca ha sido abandonado totalmente.
Origen del modelo primario exportador
Después de las guerras de Independencia, en la segunda mitad del siglo XIX, los países latinoamericanos se vieron ante la tarea de reconstruir la sociedad, y para ello se necesitaban recursos económicos.
La riqueza que estos países poseían era la única que más o menos habían desarrollado durante el tiempo que duró la Colonia: la agricultura y la minería. Así nació el modelo primario exportador, que consistía en vender estos productos en los mercados internacionales.
En México, el modelo fue impulsado especialmente entre 1876 y 1930, desde el gobierno de Porfirio Díaz hasta el de Lázaro Cárdenas. Entre los principales productos de exportación se encontraban el plomo, el cobre, el café y el henequén (una fibra utilizada en la fabricación de hilo).
Características del modelo primario exportador
En México, al igual que en el resto de América Latina, el modelo exportador primario se distinguió principalmente por las siguientes características:
Basado en las materias primas
Los únicos productos que se exportaban eran materias primas, es decir, productos que eran vendidos tal cual se obtenían de la naturaleza, sin someterlos a ningún procesamiento. Las principales materias primas eran agropecuarias (carne, vegetales, hortalizas, frutas) y mineras (cobre, zinc, plata, oro).
Establece una relación entre la economía local y la economía global
Esta relación no solo permitía comerciar con los grandes mercados mundiales (Europa y Estados Unidos), sino que también atraía fuertes inversiones extranjeras destinadas a aumentar el volumen y la eficiencia de la producción de materias primas.
Generó un sistema productivo desarticulado
En el interior de México, el modelo de exportación generó dos tipos de economías desvinculadas: la de exportación, desarrollada gracias al capital extranjero y a la tecnología, y una industria local subdesarrollada, destinada al consumo interno de productos manufacturados.
Modelo estatista
La renta, es decir, el producto por la venta de las materias primas, va a las arcas del Estado, el cual lo gasta o lo reinvierte según su conveniencia, con poca participación de la empresa privada y de la sociedad en general.
Depende del mercado mundial
La cantidad de riqueza que puede generar el modelo exportador depende del precio que las materias primas tengan en el mercado mundial. Si el precio sube, los ingresos también lo hacen; pero si baja, la economía local se ve perjudicada.
Ventajas y desventajas del modelo primario exportador
Ventajas
Incrementó la riqueza nacional
El modelo primario exportador fue una manera eficaz de generar riqueza en el México de finales del siglo XIX, pues como no tenía desarrollo tecnológico, contaba fundamentalmente con sus recursos naturales como mercancía para comerciar.
Generó empleo
La expansión de la actividad minera y agropecuaria hizo que se crearan nuevos puestos de trabajo y, por tanto, ayudó al desarrollo de la sociedad mexicana.
Atrajo inversiones extranjeras
Para incrementar el volumen y el ritmo de la producción, e impulsado por la necesidad de materias primas latinoamericanas por parte del mercado mundial, se produjeron fuertes inversiones de capital extranjero.
Impulsó el desarrollo de los sectores agrícola y minero
Con este capital extranjero fue que se puso en marcha el desarrollo agrícola, minero y posteriormente petrolero en los países latinoamericanos.
Impulsó el desarrollo del sistema financiero
El crecimiento de la economía, impulsado por el sector de materias primas, generó la necesidad de modernizar el sistema financiero con la creación de nuevos bancos o la llegada de bancos europeos y estadounidenses.
Desventajas
Generó el sistema de regalías
El sistema de regalías se manifestó especialmente en lo relacionado con la extracción de minerales y de petróleo. Este sistema consiste en que la empresa extranjera pone la tecnología, el capital y el personal especializado para realizar la extracción, y a cambio paga una regalía al estado nacional.
Este sistema de alquiler de los recursos naturales no generaba riqueza ni desarrollo económico sustentable, pues solo enriqueció a la élite gobernante y a la burocracia estatal.
Generó corrupción
Puesto que los funcionarios del Estado eran los administradores exclusivos de las regalías o las rentas, era frecuente que una parte de ellas se destinara a intereses personales, sin relación con el Estado o la nación.
Perpetuó el subdesarrollo
Debido a dos razones:
1- Para la extracción de sus recursos naturales (en el caso de la minería y el petróleo), los países latinoamericanos dependían de la tecnología extranjera.
2- El modelo primario importador dependía de las materias primas, que son las que menos valor tienen en el mercado. La tecnología y los productos manufacturados continuaron importándose desde Europa o Estados Unidos.
Impidió la diversificación productiva
El estatismo y la corrupción propios del modelo primario exportador impidieron que los ingresos fueran reinvertidos en el desarrollo económico de otras áreas, como servicios y tecnología, y mantuvo la dependencia de la economía nacional a una sola fuente de ingresos, la del modelo mismo.
Consecuencias del modelo primario exportador
– Impulsó el desarrollo de la industria agropecuaria, minera y petrolera en México y otros países de América Latina.
– Abrió la economía de los países latinoamericanos al comercio global.
– Condenó a las economías nacionales a depender de una sola fuente de ingresos, impidiendo la diversificación de la economía.
– Generó una cultura de la corrupción en la administración pública.
¿Por qué fue abandonado el modelo primario exportador?
Hubo dos causas principales:
1- La crisis económica de los años 30 hizo que el mercado mundial bajara significativamente la necesidad de materias primas mexicanas. Esto significó un descenso en los ingresos que afectó en conjunto a la producción de materias primas, y a la totalidad de la economía mexicana, que dependía de ella.
2- Durante el siglo XX la economía mundial se orientó hacia la producción de bienes con valor agregado, es decir, productos elaborados a partir del conocimiento tecnológico y la innovación. Una economía basada exclusivamente en la exportación de materias primas se hizo cada vez menos rentable, hasta el punto de que tuvo que ser reformada.
Referencias
- (s/f). Consolidación y crisis del modelo primario-exportador. Tomado de ucm.es.
- (s/f). Surgimiento del modelo primario exportador mexicano y su impacto en la actualidad. Tomado de protlcuem.gob.mx.
- Sánchez Bárcenas, H. (s/f). Alcances y perspectivas del modelo exportador mexicano. Tomado de repositoriodigital.ipn.mx.