Trastornos mentales/Psicopatología

Selenofobia: qué es, causas y tratamientos


¿Qué es la selenofobia?

La selenofobia es un irracional, injustificado y persistente miedo a la luna, al anochecer y a su luz. Todos los síntomas que sufren las personas con esta fobia se intensifican si la luna se encuentra en su fase llena.

El problema puede llegar a ser tan fuerte que las personas afectadas, además de tener terror a observarla cualquier noche, presentan repulsión a la palabra luna e incluso a la visión de simples imágenes de nuestro satélite.

La selenofobia se encuentra dentro de las denominadas fobias específicas. Estas son consideradas como un tipo de trastorno de ansiedad, en el cual una persona puede experimentar síntomas extremos de ansiedad o tener un ataque de pánico cuando es expuesta al objeto que produce su miedo irracional.

En una persona con selenofobia, el simple hecho de tener que salir de noche y enfrentarse al objeto que le produce el malestar (la luna, en este caso), le puede provocar sensaciones tanto físicas como psicológicas graves de ansiedad y pánico.

Causas

Las causas de las fobias específicas, como es el caso de la selenofobia o fobia a la luna, de manera general se desarrollan cuando el niño tiene entre cuatro y ocho años de edad. En algunos casos, pueden ser el resultado de algún acontecimiento traumático desarrollado en edad temprana.

También, la fobia de un familiar es una causa común para que se inicie durante la infancia, pues son aprendidas mediante aprendizaje vicario.

En el caso de la selenofobia, se desconocen realmente las causas que pueden desencadenarla. No queda claro que se deba a algún acontecimiento pasado ni tampoco a aprendizaje vicario, aunque sí es cierto que las fobias del tipo ambiental, entre las que se encuentra la selenofobia, suelen desarrollarse en la infancia.

Las creencias erróneas y supersticiosas sobre la luna quizá tengan algún peso en el desarrollo de esta fobia, al pensar que, por ejemplo, durante la luna llena hay más asesinatos y más crímenes en general, o que de algún modo las personas pueden experimentar cambios internos o externos al exponerse a la luz lunar.

 Tratamiento

Para superar la selenofobia, es necesario un tratamiento o un acompañamiento terapéutico, para ello existen diversas terapias.

Técnicas psicológicas de exposición: en esta técnica los profesionales enfrentan al paciente con la situación tan temida, en este caso, la luna. La exposición gradual y progresiva hace que las personas poco a poco vayan controlando sus temores, disminuyendo además la sintomatología producida por la ansiedad. A una persona afectada por selenofobía se le puede realizar un tratamiento de exposición gradual, comenzando porque intente salir a la calle en noches de luna menguante o creciente, sin tener que observarla para que, posteriormente, en el último paso de la exposición, pueda enfrentarse a salir una noche de luna llena y poder observarla directamente.

Desensibilización sistemática: en esta técnica, en lugar de enfrentarse en vivo con la luna, se recurre a la imaginación del paciente o a una exposición gradual, que va proyectando en su mente el estímulo temido. En ambos ejemplos de tratamiento, la exposición o la imaginación del estímulo se detiene cuando el paciente no puede controlar su ansiedad, y se vuelve a retomar cuando los niveles de ansiedad disminuyan. Gradualmente, el sujeto logra resistir períodos cada vez más largos y así se va perdiendo el miedo.

Terapia cognitiva: con esta técnica, se intenta dar al paciente toda la información posible, con el fin de que anule las creencias que tiene el sujeto sobre aquella situación u objeto al que teme. De esta manera, se busca que la persona adquiera confianza y gradualmente se vaya familiarizando con él, teniendo como objetivo que no vea este estímulo como algo a lo que se le deba tener miedo y pueda ir entendiendo que su miedo es irracional y exagerado.

Métodos de choque: son terapias que se encuentran dentro del enfoque conductual, donde se produce una exposición forzada al estímulo, hasta que disminuya la ansiedad del sujeto y poder controlarla. Se diferencia de la desensibilización sistemática en que en este método se enfrentaría al sujeto directamente a la luna sin ningún tipo de escalado de situaciones.

Programación neurolingüística: hoy en día es un tratamiento que se utiliza mucho ante determinadas fobias, pero los resultados de la misma aún no han sido científicamente comprobados.

Otros tratamientos alternativos incluyen las terapias con flores de Bach, los libros y grupos de autoayuda y la hipnosis. El uso de psicofármacos no suele ser recomendado en el tratamiento de las fobias, debido a que, si bien pueden paliar los síntomas de ansiedad, no eliminan el problema.

En todo caso, si fuese necesario para disminuir los síntomas de ansiedad, el tratamiento farmacológico más útil para poder afrontar esta fobia son los inhibidores de la recaptación de serotonina.

Algunos tratamientos logran hacer modificaciones en el cerebro, reemplazando la memoria y las reacciones anteriores por un comportamiento más adaptativo. Las fobias son fenómenos irracionales, el cerebro reacciona de forma exagerada ante un estímulo.

Referencias

  1. Edmund J. (2005). Bourne, The Anxiety & Phobia Workbook, New Harbinger Publications.
  2. Kessler et al. (2005). Prevalence, Severity, and Comorbidity of 12-Month DSM-IV Disorders in the National Comorbidity Survey Replication. Archive of General Psychiatry, Vol. 20.