Biografías de personajes históricos

Roman Jakobson: biografía, modelo de comunicación y aportes


Roman Jakobson (1896-1982) fue un pensador ruso que destacó por sus aportes en el área de la lingüística, llegando a ser considerado uno de los lingüistas más relevantes del siglo XX. Fue precursor a la hora de crear un análisis de la estructura tanto del lenguaje, como de la poesía y del arte.

Su influencia en el área de las humanidades se dio en el siglo XX. Sus aportes más importante comenzaron gracias a que formó parte del Círculo Lingüístico de Moscú, donde fue uno de los miembros fundadores. 

Fuente: [[File:Roman Jakobson.jpg|Roman Jakobson]], vía Wikimedia Commons.
El Círculo Lingüístico de Moscú fue una de las dos asociaciones causantes del desarrollo del formalismo ruso. Este estilo tuvo gran influencia en el área de la crítica literaria.

Jakobson vivió en Praga, donde tuvo un papel importante en la creación del Círculo Lingüístico en esa ciudad. Allí también fue una gran influencia para que la corriente del estructuralismo creciera.

Su rol más importante lo cumplió cuando creó un modelo de comunicación que sirvió como teoría de la comunicación del lenguaje. Esta teoría se basó especialmente en delimitar las funciones existentes en el lenguaje.

Índice del artículo

Biografía

Primeros años

Su nombre completo fue Roman Osipovich Jakobson. El lingüista ruso nació el 11 de octubre de 1896, producto de la unión entre Osip y Anna Jakobson.

Osip, el padre de Roman, fue químico y frecuentó diferentes grupos de intelectuales. Sus padres pusieron gran importancia en la educación de su hijo, quien en sus primeros años aprendió a hablar ruso y francés.

Llegó a hablar seis idiomas con fluidez: ruso, francés, polaco, alemán, checo e inglés. Incluso tuvo conocimientos básicos para defenderse utilizando el noruego y el finlandés, idiomas que incluso utilizó para dar algunas clases. Llegó a dominar la lectura de otros idiomas, especialmente cuando se trataban de documentos académicos.

La poesía y la literatura estuvieron muy presentes en su vida desde muy temprana edad. Sus padres se encargaron de que asistiera a distintos recitales de poesía, influyendo para que al principio sus obras literarias trataran de poemas de estilo futurista.

Jakobson logró su título académico en Moscú, en el Instituto Lazarev de Lenguas Orientales. Luego optó por una maestría en la Universidad de Moscú y finalmente obtuvo un doctorado en la Universidad de Praga.

Durante los años 20 del siglo XX, Roman Jakobson se desempeñó como profesor en la Universidad de Moscú, donde dictó algunas clases de eslavo. Además fue encargado de algunas aulas en la Escuela de Arte Dramático de Moscú.

Sus conferencias fueron muy populares entre los alumnos y estudiantes de la época.

Praga

Ya para finales de los años 20 del siglo XX, Roman Jakobson tuvo que mudarse a Praga debido a los acontecimientos políticos de la época. El lingüista ruso eligió la capital checa como nuevo sitio de residencia porque contaba con una Universidad en la que había un área que se dedicó a los estudios del lenguaje.

Fue en Praga donde empezó a profundizar en sus análisis sobre el estructuralismo. Fue profesor de filología durante los años 30. En la ciudad de Brno realizó varios discursos en los que se manifestó contra los nazis.

Esta posición lo obligó a abandonar también Checoslovaquia cuando los alemanes llegaron a invadir esa nación. Para ello, tuvo que volver a Praga desde Brno y establecerse allí durante tres semanas hasta que pudo huir a Dinamarca gracias a la ayuda de algunos conocidos. Posteriormente se estableció en Oslo (Noruega).

Estados Unidos

Los alemanes también llegaron a invadir Noruega en los año 40. Esto obligó a que Roman Jakobson siguiera cambiando su lugar de residencia. Primero se fue a Suecia y de ahí cambió su residencia hasta Estados Unidos. En el continente americano logró un puesto como profesor en la Universidad de Columbia.

En Estados Unidos gozó con la misma aprobación que tuvo en Europa. Los estudiosos acudían a él por su conocimiento sobre los pueblos eslavos, pero también por sus teorías sobre el estructuralismo.

Para 1949, la Universidad de Harvard solicitó sus servicios ya que habían ampliado el departamento eslavo. Algunos estudiantes lo siguieron en su mudanza y cambiaron también de universidad con tal de seguir adquiriendo sus conocimientos. En Cambridge llegó a ser nombrado como profesor de lenguas eslavas y de literatura.

Su aspecto físico destacó por su cabello desaliñado y tuvo fama de desordenado. Su oficina era conocida por la gran cantidad de papeles que adornaban su escritorio, al igual que los libros que se encontraban desperdigados por toda su estancia.

Jakobson trabajó en Harvard hasta 1967, cuando fue nombrado profesor emérito. Desde ese momento se encargó de dar charlas y conferencias en diferentes instituciones. Tuvo el honor de poder hablar en Yale, Princeton o Brown.

Murió a los 85 de años en el Hospital General de Massachusetts, ubicado en la ciudad de Boston.

Modelo de comunicación

En este modelo comunicacional existe un emisor que fue el encargado de transmitir el mensaje, un receptor, que es el destinatario y un mensaje, que es lo que se transmite. Para que este mensaje pueda ser transmitido debe existir además un código lingüístico y un canal.

El modelo de comunicación de Roman Jakobson consistió en definir seis funciones diferentes que cumple en lenguaje, también conocido como funciones del proceso comunicativo. Estas funciones que definió Jakobson son los que según él permitían desarrollar un acto efectivo de la comunicación verbal.

La función referencial

La primera función a la que hace referencia Jakobson es la referencial. Esta función tiene que ver con el contexto que rodeaba al proceso. Aquí se describió una situación, objeto o estado mental.

Las descripciones que se utilizaban durante la función referencial eran detalles definidos y palabras deícticas, que eran aquellos términos que no podían ser comprendidos sin la información restante.

La función poética

Esta parte del proceso comunicativo tuvo que ver con el mensaje y su forma según Jakobson. Este término se utilizó principalmente en el área de la literatura. Aquí se encontraron recursos como la rima o la aliteración (repetición de algunos sonidos).

Para Jakobson, la poesía unió de manera exitosa la forma y la función del proceso comunicativo.

La función emotiva

Tuvo que ver más bien con el encargado de remitir el mensaje, quién cumplía mejor el proceso comunicativo cuando hacía uso de interjecciones y cambios de sonidos. Estos elementos no cambiaban el significado denotativo de una expresión. Sirvió para dar mayor información sobre el aspecto interno del hablante o emisor del mensaje.

La función conativa

Este aspecto tuvo que ver de forma más directa con el destinatario o receptor del mensaje. Jakobson se refirió a esta función porque tenía que ver con el uso de vocativos e imperativos. El emisor del mensaje contaba con recibir una respuesta del receptor del mensaje. Esta respuesta podía ser también a través de acciones.

La función fática

Esta función se observó principalmente en los saludos, en las conversaciones informales que tenían que ver con el clima, especialmente cuando el emisor y el receptor eran individuos extraños o que no se conocían entre sí.

Esta función también dio elementos que sirvieron para abrir, mantener, verificar o concluir el proceso comunicativo.

La función metalingüe

También se le conoció como función metalingüística o reflexiva. Para Jakobson tuvo que ver con el uso del lenguaje, o lo que también es definido por Jakobson como código. El uso del lenguaje sirvió para discutir o describir.

En este modelo comunicativo de Jakobson, al menos uno de las seis funciones era el elemento que domina en un texto o en el proceso de comunicación. En el caso de la poesía, por ejemplo, la función dominante solía ser la poética.

La primera vez que Jakobson publicó sobre estos estudios del modelo comunicativo fue en los Enunciados de clausura: lingüística y poética.

Críticas

Este modelo propuesto por Jakobson también tuvo a algunos detractores. La principal razón de las críticas a las seis funciones que propuso el lingüista ruso es que no mostró ningún interés en el factor de juego.

Incluso, según el lingüista francés Georges Mounin, este fue un elemento que no fue tomado muy en cuenta por los investigadores del área lingüística.

Otros aportes

Las ideas que presentó Jakobson en relación a la lingüística se mantuvieron vigentes hasta el día de hoy, con un rol importante en el área del lenguaje. La tipología, la marcación y los universales lingüísticos son ideas que se vincularon entre sí.

La tipología tuvo que ver con la clasificación que se hizo de los idiomas en relación a las características que comparten a nivel gramatical. Por su parte, la marcación tuvo que ver con el análisis que se hizo de la manera en que se organizó la gramática.

Por último, Jakobson habló sobre los universales lingüísticos, que se referían al análisis de las características de las distintas lenguas utilizadas en el mundo.

Las ideas y los estudios de Jakobson tuvieron gran influencia en el modelo de los cuatro lados que propuso Friedemann Schulz von Thun. También tuvo un rol importante en las ideas de meta pragmática de Michael Silverstein.

La influencia de Jakobson se extendió hasta los estudios de etnografía de comunicación y etnopoética que propuso Dell Hymes. Incluso en el modelo de psicanálisis de Jacques Lacan y en la filosofía de Giorgio Agamben.

Fue autor de más de 600 artículos a lo largo de su vida.

Referencias

  1. Blackwell, W. (2016). The International Encyclopedia of Communication Theory and Philosophy (4th ed.). West Sussex: International comunication association.
  2. Bradford, R. (1995). Roman Jakobson. London: Routledge.
  3. Broekman, J. (1974). Structuralism. Dordrecht, Boston: D. Reidel.
  4. Enos, T. (1996). Encyclopedia of rhetoric and composition. Nueva York: Routledge.
  5. Roudinesco, E. (1986). Jacques Lacan & Co: A History of Psychoanalysis in France, 1925-1985. Chicago: The University of Chicago Press.