Historia

Vestimenta de los aztecas (mexicas)


En la antigüedad, la vestimenta era fundamental para diferenciar a un pueblo de otro. La vestimenta de los aztecas no es la excepción y, además, su indumentaria presentaba características únicas que también servían para distinguir una clase social de otra. 

Otra distinción se establecía a partir del género, ya que las prendas de vestir de los hombres y de las mujeres no eran iguales. Aparte de la ropa, también contaban con elementos decorativos y con algunos tipos de calzado. 

El Imperio azteca o mexica fue muy influyente en Mesoamérica, dominando diferentes zonas. Su época de mayor esplendor se presentó en la etapa posclásica, hasta que finalmente se vieron derrotados por los españoles durante la Conquista.

Vestimenta de los hombres aztecas

Los hombres aztecas utilizaban una especie de taparrabo, el maxtlatl, y en la parte superior del cuerpo se colocaban una prenda tipo capa de forma triangular, que iba anudada, llamada tilma. Lo usual es que llevaran el cabello corto o también podían usarlo rapado, pero esto último no era tan común, más que en el caso de los guerreros.

Estas prendas estaban diseñadas para el clima, permitiéndoles hacer sus actividades diarias cómodamente. Si se trataba de hombres de clases altas, se añadían flecos y bordados a los taparrabos. En el caso de las tilmas, los diseños más elaborados y llenos de color estaban destinados a las clases altas, como los nobles y líderes religiosos.

Cuando usaban calzado, vestían unas sandalias llamadas cactli.

Vestimenta de las mujeres

Las mujeres, por su parte, usaban una falda conocida como cueitl, que iba acompañada de una blusa larga llamada huipil. Se cree que el peinado común para ellas eran las trenzas, pues usaban el cabello muy largo y lo dividían en porciones para acomodarlo en dos o cuatro trenzas.

Según la edad y la clase social a la que pertenecía la mujer, cambiaba el peinado. En ciertas ocasiones, llevar el cabello suelto implicaba que la mujer estaba buscando pareja, mientras que el cabello recogido era sinónimo de madurez y también podía indicar que pertenecían a la nobleza.

Vestimenta de los niños

Los niños y niñas aztecas que eran menores de 3 años no llevaban ningún tipo de prenda. Una vez que rebasaban esta edad, se les colocaban prendas básicas de color blanco. Hasta que las niñas crecían empezaban a usar faldas, y los varones al desarrollarse pasaban a usar las características capas de los hombres.

La ausencia de ropa en los más pequeños se debía al clima caluroso que predominaba en el Golfo de México, por lo que las prendas resultaban un estorbo para los infantes.

Vestimenta de los sacerdotes

Los sacerdotes aztecas no eran considerados como simples mensajeros de los dioses, sino que se creía que personificaban a las deidades, así que la vestimenta iba de acuerdo con esta idea y se utilizaban prendas que eran dignas de una figura divina.

En el caso de los sacerdotes que participaban en sacrificios humanos, no se enjuagaban la sangre con que se manchaban el cuerpo o el cabello, pues se consideraba parte importante de su personificación.

Los atuendos completos se componían de diferentes objetos y adornos lujosos, a veces hechos con piel de enemigos que habían sido desollados; también se pintaban el cuerpo, utilizaban joyas y tocados. Las prendas se confeccionaban con papel, plumas, piedras y pieles de animales.

Vestimenta de los militares

Entre los militares también había diferentes atuendos de acuerdo con su rango, los soldados rasos llevaban un iyac, pieza sin mangas que les cubría tanto el torso como el abdomen. Quienes eran guerreros de la élite podían usar una indumentaria más elaborada, que consistía en un tlahuiztli, que les cubría torso, espalda, así como las extremidades superiores e inferiores.

Las armaduras de los militares funcionaban también para colgar adornos relacionados con su rango y que consistían en estandartes, mosaicos con plumas o pieles de animales.

Las ropas militares más lujosas se ganaban haciendo méritos en la guerra e incluso se diseñaban trajes especiales para algunos privilegiados que imitaban las formas de algunos animales a los que se atribuían cualidades relacionadas con la fuerza, como era el caso del jaguar.

Vestimenta del tlatoani

Los tlatoani eran los gobernantes aztecas y se vestían de manera muy ornamentada y lujosa. Solían llevar una especie de diadema llamada xiuhuiztli, a la que se añadían piedras preciosas.

También usaban el yacaxihuil, una nariguera o pendiente decorado; y se colocaban capas con adornos muy coloridos, conocidas como xiuhtlalpiltilmatl.

Entre los adornos que utilizaban, estaban los brazaletes de oro y los de piedras preciosas, que eran un símbolo de su poder y de su origen noble.