Culturas precolombinas: ubicación, características, arte
¿Qué son las culturas precolombinas?
Llamamos culturas precolombinas a aquellas civilizaciones o pueblos que ocupaban lo que luego llamarían el Nuevo Mundo, antes de la llegada de Cristóbal Colón. Por más de 10.000 años centenares de pueblos indígenas evolucionaron, interactuaron y combatieron entre ellos, prácticamente sin ningún contacto con el resto del mundo, a pesar de la breve presencia vikinga y los ocasionales intercambios con Polinesia.
En este largo aislamiento geográfico y temporal, desde Alaska a Tierra del Fuego, se desarrollaron desde culturas nómadas de cazadores recolectores, poco complejas y estructuradas, hasta sociedades altamente desarrolladas, como los mayas, los aztecas y los incas.
Para algunos historiadores los únicos sucesos comparables con el encuentro, o choque, de la cultura europea y las culturas precolombinas, acaecido en 1492, podrían ser la salida del Homo sapiens de África hace 70.000 años, o el futuro y quizás improbable encuentro con una civilización extraterrestre.
Principales culturas precolombinas
Toda la información que se tiene sobre estos pueblos proviene de los testimonios de los conquistadores, misioneros y cronistas de Indias, arqueólogos, y códices y testimonios indígenas.
Mayas
Los mayas son quizás la cultura más desarrollada y compleja del Nuevo Mundo surgida en Mesoamérica, pero ya en decadencia cuando llegaron los españoles. Su historia se remonta al 2000 a.C. y culmina, o colapsa, en el 900 d.C., cuando abandonaron sus principales ciudades.
A pesar de este colapso, la cultura maya-quiché continuó presente hasta el encuentro con los españoles, la derrota y el surgimiento de la Nueva España. En su momento de mayor desarrollo conformaron ciudades estados, con costumbres y creencias comunes, pero enfrentadas con otros pueblos, o entre sí.
Ubicación geográfica
Se calcula que su área de influencia alcanzó más de 500.000 kilómetros cuadrados, desde los estados del sureste de México (Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán), toda la superficie de Guatemala y Belice, y partes de El Salvador y Honduras.
Los historiadores y arqueólogos dividen la cronología maya en al menos tres períodos: pre-clásico (primeros asentamientos y primeras ciudades en Yucatán, entre el 2000 a.C. y el 250 d.C.); clásico (surgimiento de las grandes ciudades, enfrentamientos con Teotihuacán, colapso; entre el 250 y el 900); y post-clásico (continuas guerras entre ciudades, crisis social y ambiental y conquista española; 950 a 1697).
Cultura
Los mayas hablaban distintas lenguas derivadas de un protomaya. Su escritura es considerada como una de las más desarrolladas entre las que surgieron en Mesoamérica; y en matemáticas destacaron por encontrarse entre las primeras cuatro culturas en descubrir y usar el cero explícito.
Resaltan también sus conocimientos de astronomía, que les permitieron predecir eclipses y elaborar calendarios muy precisos, su complejo sistema de creencias religiosas (en parte reflejado en el Popol Vuh); y la práctica de sacrificios humanos, presente también en otras culturas mesoamericanas.
Economía
Desarrollaron una intensa actividad comercial entre las ciudades que involucraba el intercambio de productos agrícolas, textiles, alfarería y herramientas. También practicaron el tráfico de esclavos.
Contaban con una agricultura avanzada, con terrazas y sistemas de riego; sus principales productos agrícolas fueron maíz, frijoles, calabazas, yuca, girasol, algodón, cacao y vainilla, entre otros.
Actividad bélica
Las campañas militares y conflictos bélicos entre las ciudades mayas o contra otros pueblos, son una constante de la cultura maya desde sus inicios hasta su derrota definitiva a manos de los españoles. Las causas iban desde el control de las rutas comerciales hasta intentos de expansión y dominio.
Aunque los principales guerreros salían de la aristocracia, en situación de guerra todos los varones participaban en los combates. Las ciudades estados maya mantuvieron ejércitos permanentes.
Arte
El arte maya es considerado un arte religioso y cortesano, dedicado a representar la vida de la aristocracia y sus dioses.
Practicaron la escultura en madera y piedra, adosada a las paredes o en relieve; las esculturas más grandes se hicieron en estuco, como parte de las fachadas de templos. También se destacaron en la pintura mural, de la que hay testimonio desde el 300 a.C.
Pero sin duda sus manifestaciones artísticas más conocidas e impactantes son sus obras arquitectónicas: templos piramidales, palacios, observatorios, canchas de juego de la pelota, calzadas. Sobreviven y son considerados patrimonio cultural de la humanidad Chichén Itzá, Copán, Tikal, Uxmal y Palenque, entre otras.
Organización social
La sociedad maya se caracterizó desde tiempos muy tempranos por una división estricta entre los plebeyos y la élite que rodeaba al rey de cada ciudad estado. Los plebeyos constituían el 90% de la población, conformado por agricultores, comerciantes y artesanos.
De la élite formaban parte familias o clanes dueños de la tierra, de la que surgían funcionarios de la corte, escribas, sacerdotes y guerreros. Eran una clase rica y poderosa, aunque es posible que en un período tardío haya habido una especie de clase media con miembros de estas profesiones.
El rey era considerado un semidiós, una especie de mediador entre los mortales y los dioses. Tenía un poder absoluto y la sucesión era patrilineal, de padre a hijo. No existía una burocracia como tal, pero sí una jerarquía clara en la corte y en la administración de las ciudades.
Aztecas
Los aztecas o mexicas vivieron un corto e intenso período de dominación sobre gran parte de los pueblos y culturas de lo que hoy es México, entre los siglos XIV y XVI. Eran un pueblo de origen nahua, que llegó al valle de México proveniente del norte.
Se establecieron en Texcoco, donde fundaron México-Tenochtitlán (1325), y se aliaron con otras dos ciudades estados nahuas con las que forjaron un imperio, que solo se derrumbó con la llegada y conquista de los españoles, y con la caída de Tenochtitlán en 1521.
Ubicación geográfica
En su punto de máxima expansión, el imperio azteca abarcó parte de Guatemala y el territorio actualmente ocupado por los estados mexicanos de Morelos, Veracruz, Guerrero, Puebla y Oaxaca, así como parte de los estados de Chiapas e Hidalgo.
Alianzas con otros pueblos: la Triple Alianza
Los aztecas hablaban náhuatl, lo que favoreció su alianza con dos ciudades nahuas del valle de México, Tecoco y Tlacopan, con las que llevó adelante una rápida expansión político-militar. A la llegada de Cortés estas dos ciudades estaban subordinadas a Tenochtitlán, y el imperio contaba con millones de súbditos.
El imperio creció gracias a una combinación de ataques militares con alianzas estratégicas con otras ciudades, que se sometieron al dominio y al pago de tributos.
Religión y sacrificios humanos
Rendían culto a varios dioses, entre los que destacaban Quetzalcóatl, Tláloc y Huitzilopochtli, a los que se ofrendaban numerosos sacrificios humanos, obtenidos a través de las llamadas “guerras floridas”, guerras rituales entre ciudades para capturar prisioneros para ser sacrificados.
Según algunos autores, como Marvin Harris, estos sacrificios, además de cumplir con una función ritual, servirían para complementar la dieta, es decir, constituía también una práctica de canibalismo.
Organización política
El imperio azteca era una teocracia encabezada por el huey-tlatoani, un gobernante elegido por un consejo integrado con representantes de los veinte clanes, que al ser elegido se convertía en un representante de los dioses.
El huey-tlatoani encabezaba una estructura político administrativa, con responsables de asuntos religiosos, judiciales y tributarios, jefes del ejército, gobernadores de provincias y administradores tributarios.
Con esta organización los aztecas mantenían el dominio sobre las ciudades vasallas, que les rendían tributo entregando parte de sus principales productos.
Economía
Aunque basaban gran parte de su economía en los tributos recibidos y en el ejercicio del comercio, los aztecas desarrollaron también novedosas técnicas agrícolas, como las chinampas, islas artificiales en los lagos para practicar la agricultura.
Literatura
Los aztecas contaron con una escritura pictográfica, sin embargo, lo que conocemos de su literatura se debe a la tradición oral y a recopilaciones hechas por los misioneros.
Practicaban la poesía, y uno de sus exponentes más representativos fue un tlatoani, Nezahualcoyotl (1402 -1472).
Arquitectura y escultura
Desarrollaron una imponente arquitectura religiosa: templos gemelos, pirámides escalonadas y templos excavados en la roca, como los de Tezpotlán y Malinalco.
Realizaron esculturas en madera y piedra dedicadas a los dioses, aunque también había pequeñas representaciones de animales.
Otras manifestaciones
Destacaron también en la orfebrería, la plumería (artesanía con plumas de diversas aves), y la pintura.
Organización social
Nobles
Miembros de las 20 familias o clanes que integraban la élite, de donde salían sacerdotes, guerreros y funcionarios.
Gente común
Eran los artesanos, comerciantes, agricultores y pueblo llano en general. Dependían y rendían tributo a alguna de las 20 familias.
Esclavos
Sector integrado por prisioneros de guerra, deudores o delincuentes. Los deudores se sometían o prestaban servicios a los acreedores.
Incas
La civilización inca o quechua se desarrolló a partir de su ciudad principal, Cuzco. Los incas, más que un pueblo, eran una familia dominante del pueblo quechua. Los orígenes del imperio se hunden en la leyenda, pero se atribuye su fundación a Manco Capac, y podría haber sido alrededor del siglo XIII.
El imperio Tawantinsuyo alcanzaría su máxima extensión, unos 3.000.000 de kilómetros cuadrados, a mediados del siglo XV, y menos de cien años después llegaría a su fin con la aparición de Francisco Pîzarro, y la ejecución del inca Atahualpa en 1533.
Ubicación geográfica
En su mejor momento, el tawantinsuyo, o Tahuantinsuyo, abarcó un territorio entre el océano Pacífico y la selva amazónica que iba desde la actual Colombia hasta el norte de Argentina, pasando por Perú, Ecuador, Bolivia y norte de Chile.
Una ciudad sagrada
El imperio y la cultura inca se expandieron desde la ciudad sagrada de Cuzco, creando un estado original que algunos historiadores han comparado con un estado socialista, por su interés en el bienestar de todos sus súbditos.
Lengua
Como otros elementos de la cultura inca, el quechua es anterior al nacimiento del imperio; sus orígenes se remontan al siglo V d.C., pero ciertamente el imperio contribuyó a expandir su área de influencia.
Con alrededor de 10 millones de hablantes, actualmente es la lengua indígena más hablada en América.
Escritura
Desarrollaron un sistema de escritura parcial, el quipus, especialmente para uso administrativo, usando cuerdas y nudos, con el que se podían llevar cuentas y otros registros. También contaron con dos sistemas ideográficos: los topacus y los quillcas.
Religión
Viracocha era el dios creador, sin embargo, el culto principal era al sol, Inti, y también a la luna, Quilla. Se hacían sacrificios de animales a las divinidades, y sacrificios humanos solo en ocasiones muy especiales.
Agricultura y ganadería
Contaron con sistemas de riego y acueductos, y desarrollaron un sistema de terrazas para poder sembrar en las grandes pendientes de la cordillera andina.
Sus principales cultivos fueron el maíz, la patata, la coca, el tomate, el ají, el maní, la palta, etc. Se calcula que cultivaron más de 80 especies vegetales y más de 200 variedades de patatas.
Domesticaron y criaron en grandes hatos varias especies: llamas, alpacas, vicuñas y guanacos. De ellas obtenían lana y carne.
Economía
Había tres formas de trabajo que se combinaban: la actividad individual, el trabajo comunal y el trabajo para el estado. Las comunidades entregaban tributos que iban a los depósitos del estado, y que el imperio redistribuía en parte, para apoyar regiones donde pudiera haber escasez.
Sin embargo había privilegios y sectores como el de funcionarios, sacerdotes y guerreros, y nobles en general, que recibían mayores beneficios.
Infraestructura
Parte del legado del imperio inca está constituido por la red vial pedestre, que conectaba Cuzco con todas las regiones del imperio, por donde circulaban mensajeros, funcionarios, ejércitos y caravanas.
El establecimiento y mantenimiento de esta vialidad incluyó la construcción de puentes colgantes y flotantes, de madera y piedra.
Organización política
El imperio era una monarquía teocrática, en la que el Inca era considerado de origen divino y la máxima autoridad, asesorado por un consejo imperial. El imperio estaba dividido en cuatro regiones, cada una con una especie de virrey.
Arte
Destacan sus trabajos en cerámica y orfebrería (en oro, plata y cobre); cuentan también con una tradición literaria de la que son expresión los yaravíes (poemas cortos similares al haikú japonés), fábulas e historias que sobrevivieron gracias a la tradición oral.
Sin embargo, la mayor expresión artística que ha sobrevivido del imperio es su arquitectura; una arquitectura megalítica cuyo ejemplo más célebre es Machu Picchu.
Organización social
La estructura social inca era rígida y jerárquica, encabezada por el Inca y su familia, y cuyo último eslabón eran los piñas, una especie de esclavos.
Realeza
Estaba integrada por la familia real: el Inca, la esposa (Coya), y el hijo y heredero (Auqui).
Nobleza
La integraban los parientes de la familia real (nobleza de sangre), integrada por dos linajes que se enfrentaban cada vez que había sucesión; y la nobleza de privilegio, formada por personas que ocupaban los altos cargos del estado (sacerdotes, gobernadores, jefes del ejército), llamados también “orejones”.
Ayllu
El resto de la sociedad inca estaba formada por campesinos que tributaban al imperio (hatun runa), grupos de pueblos dominados y desplazados a otras regiones (mitimaes), servidores que trabajaban para el imperio (yanaconas), y prisioneros de guerra, rebeldes y enemigos políticos, bajo tratamiento de esclavos (piñas o pinacunas).
Otras culturas precolombinas
Además de las culturas descritas, existieron otras culturas altamente desarrolladas, como la anazazi, misisipiana, tolteca, teotihuacana, zapoteca, olmeca, muisca, cañaris, moche, nazca, chimú y tiahuanaco.
También hubo culturas menos desarrolladas pero con grandes áreas de influencia, y estructuras sociales y políticas más flexibles, como los apaches y navajos en América del Norte, los caribes y arawakos en Centro y Suramérica, o los mapuches y los tupí guaraní en la Amazonía y el cono sur.
Referencias
- Ortiz de Montellano, B. (1978). Aztec Cannibalism: an Ecological necessity? Tomado de researchgate.net.
- Pärssinen, M. (1992). Tawantinsuyu. The Inca State and Its Political Organization. Tomado de doria.fi.
- Harris, M. (1997). Caníbales y reyes. Madrid: Alianza editorial.
- Miguel, M.A. (2006). Las culturas precolombinas de América. Tomado de webnodes.es.
- Los piñas o pinacunas (2013). Tomado de incasdeltahuantinsuyo.carpetapedagogica.com.
- Najar, A. (2019). Los mayas, el pueblo fundamental para Centroamérica que México tardó en valorar. Tomado de bbc.com.
- Cultura azteca (2020). Tomado de winner.fandom.com.
- La enigmática cultura maya (2020). Tomado de historia.nationalgeographic.com.es.