Nutrición

18 ventajas y desventajas de ser vegetariano


¿Cuáles son las ventajas y desventajas de ser vegetariano?

Las ventajas y desventajas de ser vegetariano abarcan la prevención del cáncer, reducir la presión arterial, ayudar a bajar de peso, reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares o evitar el envejecimiento prematuro, pero también puede conllevar riesgos para la salud.

Es difícil relacionar el ser vegetariano con algún tipo de efecto negativo, ya que se asocia a una idea de garantía de salud, sin posibilidad de causar problemas. Y aunque no le falta razón a esta afirmación, lo cierto es que poco se habla de las repercusiones adversas.

Los expertos recomiendan ingerir las cantidades adecuadas de micronutrientes y vitaminas que se obtienen de los productos animales, como el hierro y la vitamina B12, en forma de suplementos para llevar de forma sana una alimentación vegetariana.

También educarse para elegir y combinar los alimentos vegetales, y mantener una dieta correcta y balanceada que cubra todos los requerimientos nutricionales. 

De todas maneras, hay que distinguir entre diferentes niveles en el vegetarianismo:

– Alimentación vegana: se erradica todo alimento de origen animal, como los lácteos, los huevos o la miel.

– Alimentación ovoláctea: tanto los huevos como los derivados lácteos (yogur, queso, mantequilla) se incluyen. En la India se suele seguir este tipo de alimentación.

– Alimentación semi vegetariana: se incluyen los vegetales y los alimentos procedentes de animales, como los huevos y los lácteos, y también pescados y aves, dejando por fuera las carnes rojas.

– Alimentación crudívora: es la dieta en la que no se cocina ni se calienta ningún alimento, y se consumen crudos. Esta alimentación se basa en frutas, semillas, verduras y germinados de legumbres.

Ventajas de ser vegetariano

1. Reduce el riesgo de padecer cáncer de colon

Si eres vegetariano, podrás reducir notablemente el riesgo de padecer cáncer de colon. Aumentar la ingesta de fibra y eliminar las carnes rojas son dos de las claves más importantes.

2. Disminuye la presión arterial

La dieta vegetariana ayuda a reducir la presión arterial de forma natural. Así que si sufres una presión alta, no dudes en intentar realizar una dieta vegetariana.

3. Ayuda a bajar de peso

Hacerte vegetariano también te ayudará a bajar de peso. Una dieta bien planeada puede ayudarte a bajar hasta dos kilos a la semana. Por ello, hay que elegir qué alimentos bajos en calorías son los adecuados.

Esto ha sido ratificado por investigaciones realizadas en Nutrition Reviews, las cuales afirmaron que la pérdida de kilos es una de las principales causas para dejar de comer carnes. 

4. Controla y reduce el riesgo de padecer diabetes tipo 2

Una de las consecuencias de ser vegetariano deriva en la disminución de sufrir diabetes tipo 2.

Por otro lado, si ya sufres diabetes, puedes ayudar a controlarla de manera natural. La “culpa” la tienen las frutas, hortalizas, frutos secos y legumbres, las cuales aumentan la resistencia a la insulina, trayendo como consecuencia un menor riesgo de contraer algún tipo de complicación.

5. Reduce el nivel de colesterol y triglicéridos

Cuando dejamos de ingerir alimentos de origen animal, se reducen nuestros niveles de triglicéridos, colesterol general y por ende, colesterol LDL o malo. Los productos animales contienen mucha grasa, que resulta perjudicial para el sistema cardiovascular.

6. Funciona para prevenir el envejecimiento

Ser vegetariano se deriva en una producción de un mayor número de antioxidantes para nuestro cuerpo. Se produce un menor estrés oxidativo, lo que conlleva a una mejor conservación de nuestro cuerpo, tanto a nivel externo como interno.

7. Menor riesgo de enfermedades degenerativas

Derivado del anterior punto, al gozar de una mayor concentración de antioxidantes, tenderemos a evitar que nuestro organismo se desgaste más rápidamente.

La consecuencia de esto será un menor riesgo de padecer enfermedades degenerativas, como puede ser el alzhéimer.

8. Menor probabilidad de sufrir enfermedades cardiovasculares

Cuando dejamos de ingerir carnes, también dejamos de introducir grasas saturadas y colesterol en nuestro cuerpo.

¿En qué se traduce esto? En un menor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, como infartos o ateroesclerosis.

9. Previene el cáncer de mama

Varios estudios han demostrado que las mujeres vegetarianas tienen un menor riesgo de sufrir cáncer de mama.

Además, los datos reflejan que este tipo de cáncer es menor en lugares donde el consumo de carne no está tan extendido, como podrían ser los países del sudeste asiático.

10. Previene la litiasis renal y biliar

Está comprobado que las dietas ricas en carnes producen grandes cantidades de ácido úrico y oxalato para los riñones, lo que conlleva a la formación de cálculos renales.

Por este motivo, la dieta vegetariana consigue que los pacientes propensos a sufrir de cálculos renales puedan prevenirlas eficazmente.

Asimismo, una vez disminuido el consumo de carne, desciende tanto el nivel de grasas saturadas como el de colesterol, evitando la litiasis biliar.

Desventajas de ser vegetariano

1. Huesos frágiles

Los huesos se nutren de proteína animal y su carencia hace que nuestra salud ósea se vea debilitada. Es por ello que hay que tener especial cuidado con el consumo de proteínas, calcio, hierro o vitamina D.

2. Deficiencia de vitamina B12

La vitamina B12 solo se obtiene a partir de alimentos cárnicos. Este supone uno de los principales problemas para las personas vegetarianas.

La fatal consecuencia de esto es la carencia de hierro, lo que conlleva a la aparición de anemia.

Otro de los grandes problemas de la carencia de vitamina B12 es la disminución de energía. Los alimentos vegetarianos no aportan por sí solos la cantidad necesaria como para hacer que nuestro cuerpo consiga mantenerse de la misma manera de la que sí lo haría con las carnes.

La solución se traduce en la ingesta de suplementos o algas que adquieren la vitamina por medio de una síntesis bacteriana o contaminación.

3. Vulnerabilidad a las enfermedades

El conjunto de carencias, como la ya mencionada vitamina B12, zinc u otro tipo de nutrientes, hace que nuestro sistema inmune se vuelva menos fuerte y aumenten las posibilidades de contraer algún tipo de enfermedad.

4. Problemas dentales

Si conoces a algún vegetariano, es muy probable que muestre caries y diferentes deficiencias dentales.

Los alimentos cárnicos ayudan a mejorar nuestra placa dental y a mantener distintas enfermedades dentales a raya. Esto se debe a que la L-arginina consigue que los microorganismos que causan los problemas bucales se reduzcan.

5. Menores niveles de ácidos grasos omega-3

Los vegetarianos presentan unos niveles bajos de ácidos grasos omega-3. Esto es fundamental para mantener una salud cardiovascular adecuada.

Ahora bien, si se solventa el problema consumiendo aquellos alimentos vegetales con mayor índice de omega-3, como los frutos secos, soja, tofu, y con suplementos, se conseguirá incluso fortalecer la salud.

6. Pérdida de masa muscular

El vegetarianismo no se suele recomendar a los culturistas. Para la creación de masa muscular se necesitan grandes dosis de proteínas, cuya fuente se encuentra abundantemente en los productos cárnicos. 

7. Proteínas más complicadas de absorber

Las proteínas vegetales están denominadas como incompletas. Esto quiere decir que son mucho más complicadas de absorber que las proteínas animales.

Esto obliga a ingerir los suplementos adecuados y a realizar una correcta combinación de vegetales para no sufrir ningún tipo de problema.

8. Aparición de efectos secundarios a corto plazo

Iniciarse en una dieta vegetariana puede conllevar a una serie de efectos secundarios para nuestro organismo, nada satisfactorios.

Debido a la inmediata disminución de ácido araquimónico, seremos más propensos a sufrir episodios depresivos.

Asimismo, otro de los efectos que suelen aparecer durante los primeros días de dieta es una sensación de malestar. Esto se explica con la falta de triptófano, un generador de serotonina que se encarga de la producción de la sensación del bienestar.