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Frases sobre el derecho


El derecho es el conjunto de normas que rigen la conducta de los ciudadanos de un país. Desde la fundación de los primeros asentamientos humanos organizados, siempre hubo un sistema que trató de indicar lo que era justo para los iguales y el comportamiento que cada persona debía llevar.

Muchos siglos han pasado desde que Hammurabi estableciera su famoso código con las 282 normas de la antigua Mesopotamia, y muchas leyes han cambiado desde entonces. El derecho es parte fundamental de una sociedad, y como tal, ha sido siempre objeto de reflexión de filósofos, intelectuales y políticos.

Te dejamos una lista de frases de derecho de excelentes autores como René Descartes, Charles Dickens, Mahatma Gandhi, Henry David Thoreau, Abraham Lincoln, Aristóteles, Platón y muchos más.

Las mejores frases sobre el derecho

-La misericordia da frutos más ricos que la justicia estricta.– Abraham Lincoln.

-La justicia no puede ser solamente para una de las partes, debe de ser para ambas.– Eleanor Roosevelt.

-La paz y la justicia son dos lados de la misma moneda.– Dwight D. Eisenhower.

-Ninguna ley u ordenanza es más poderosa que el entendimiento.– Platón.

-Es el espíritu y no la forma de la ley la que mantiene viva a la justicia.– Earl Warren.

-La ley es razón, libre de pasión.– Aristóteles.

-La justicia que el amor da es la rendición, la justicia que la ley da es el castigo.– Mahatma Gandhi.

-En tiempos de guerra, la ley calla.– Marco Tulio Cicerón.

-Cuanto más corrupto es el Estado, más numerosas son las leyes.– Tácito.

-No se hará justicia hasta que los que no se vean afectados estén tan indignados como los que sí.– Benjamin Franklin.

-Una ley mala no es ley.– Cassandra Clare.

-La verdad nunca daña una causa que es justa.– Mahatma Gandhi.

-Cualquier necio puede hacer una regla. Y a cualquier necio le importará.– Henry David Thoreau.

-Las leyes inútiles debilitan a las leyes necesarias.– Charles de Montesquieu.

-Justicia aplazada es justicia negada.– William E. Gladstone.

-Es imposible saber dónde termina la ley y comienza la justicia.– Arthur Baer.

-Las buenas leyes tienen sus orígenes en malas morales.– Ambrosio Macrobio.

-La justicia es la voluntad constante y perpetua de dar a cada hombre lo que merece.– Domitus Ulpian.

-Más ley, menos justicia.– Marco Tulio Cicerón.

-Si tiemblas de indignación ante cada injusticia, entonces eres un camarada mío.– Ernesto Che Guevara.

-La protesta más allá de la ley no es un alejamiento de la democracia; es absolutamente esencial para ello.– Howard Zinn.

-Si no mantenemos la justicia, la justicia no nos protegerá a nosotros.– Francis Bacon.

-Incluso cuando las leyes han sido escritas, no deberán siempre de permanecer inalteradas.– Aristóteles.

-Está prohibido matar; por tanto, todos los homicidas son castigados a menos que maten en gran número y al son de las trompetas.– Voltaire.

-No es tan deseable cultivar el respeto por la ley tanto como el respeto por lo correcto.– Henry David Thoreau.

-Los buenos hombres no deben de obedecer la ley tan bien.– Ralph Waldo Emerson.

-La ley es orden, y una buena ley es un buen orden.– Aristóteles. 

-Ser rico y honrado en una sociedad injusta es una desgracia.– Confucio.

-Es correcto darle a cada hombre lo que le corresponde.– Platón.

-Donde encuentres que las leyes son más numerosas, también encontrarás que la injusticia abunda más.– Arcesilao.

-Las leyes no son inventadas. Nacen de las circunstancias.– Azarías.

-Ética es conocer la diferencia entre lo que tienes derecho de hacer y lo que es correcto hacer.– Potter Stewart.

-En la vida civilizada, la ley yace sobre un mar de ética.– Earl Warren.

-Si tienes diez mil reglamentos, destruyes todo respeto por la ley.– Winston S. Churchill.

-Podemos desafiar las leyes humanas, pero no podemos resistir las leyes naturales.– Julio Verne.

-Las leyes son telas de araña por donde pasan las moscas grandes y atrapan a las pequeñas.– Honoré de Balzac.

-La ley injusta es en sí misma un tipo de violencia.– Mahatma Gandhi.

-El castigo es justicia para los injustos.– San Agustín.

-No es la sabiduría, sino la autoridad la que hace una ley.– Thomas Hobbes.

-En lo que respecta a la conciencia, la ley de la mayoría no aplica.– Mahatma Gandhi.

-Un gobernante hace uso de la mayoría y descuida a la minoría, así como no se dedica a la verdad, sino a la ley.– Han Fei.

-La mejor manera de hacer que una mala ley sea derogada, es hacerla cumplir estrictamente.– Abraham Lincoln. 

-Donde la ley es incierta, no existe ley.– Proverbio.

-No podemos esperar que las personas respeten la ley y el orden hasta que enseñemos respeto a aquellos a quienes hemos confiado para hacer cumplir esas leyes.– Hunter S. Thompson.

-La mayoría de los abogados deshonestos son producto de clientes deshonestos. La demanda crea la oferta.– Morris Salem.

-La justicia sin fuerza es impotente, la fuerza sin justicia es tiránica.– Blaise Pascal.

-Vive tu vida como si cada acción fuera a convertirse en una ley universal.– Immanuel Kant.

-La justicia es el más grande de los intereses del hombre en la tierra.- Daniel Webster.

-Las leyes inglesas castigan el vicio. Las leyes chinas hacen más, recompensan la virtud.– Oliver Goldsmith.

-En su mejor momento, el hombre es el más noble de los animales, pero sepáralo de la ley y la justicia y se vuelve el peor.– Aristóteles.

-El amor es moral incluso sin un matrimonio legal, pero el matrimonio es inmoral sin amor.– Ellen Key.

-La ley y el orden existen con el propósito de establecer justicia, y cuando fallan en este propósito, se convierten en presas peligrosamente estructuradas que bloquean el flujo hacia el progreso social.– Martin Luther King, Jr.

-La ley es la perfección de la razón.– Sir Edward Coke.

-La seguridad de la gente se deberá de encontrar en la máxima ley.– Marco Tulio Cicerón.

-Logramos ganar justicia más rápidamente al darle justicia a la otra parte.– Mahatma Gandhi.

-El triste deber de la política es establecer justicia en un mundo lleno de pecado.– Reinhold Niebuhr.

-La gente no gana las peleas de la gente. Los abogados lo hacen.– Norman Ralph Augustine.

-La libertad es el derecho de hacer lo que la ley permite.– Charles de Montesquieu.

-La manera más clara de demostrar lo que el dominio de la ley significa para nosotros en el día a día es recordar lo que ocurría cuando no existía el dominio de la ley.– Dwight D. Eisenhower.

-La ley usualmente permite lo que el honor prohíbe.– Bernard Joseph Saurin.

-La justicia extrema es generalmente injusticia.– Jean Racine.

-Recaudar más impuestos de los absolutamente necesarios es un robo legalizado.– Calvin Coolidge.

-Es mucho más importante acabar con los proyectos de ley malos que aprobar los buenos.– Calvin Coolidge.

-Es mejor arriesgarse a salvar a un hombre culpable que condenar a uno inocente.– Voltaire.

-La ignorancia de la ley no es una buena excusa, ya que todo hombre está obligado a conocer las leyes bajo las que se encuentra sujeto.– Thomas Hobbes.

-El arco moral del universo es largo, pero se dobla hacia la justicia.– Martin Luther King, Jr.

-Haz pagar al crimen. Vuélvete un abogado.– Will Rogers.

-La ley y la justicia no siempre son lo mismo. Cuando no lo son, destruir la ley es el primer paso hacia desafiarla.– Gloria Steinem.

-Es el oficio de los abogados el cuestionar todo, no ceder nada, y hablar por horas.– Thomas Jefferson.

-Si el artefacto gubernamental es de tal naturaleza que requiere que seas el agente de injusticia hacia otro, entonces rompe la ley.– Henry David Thoreau. 

-El problema con la ley son los abogados.– Clarence S. Darrow.

-Ningún hombre está por encima de la ley, así como ningún hombre está por debajo de ella.– Theodore Roosevelt.

-No hago lo que me dice un abogado, sino lo que me dice la humanidad, la razón y la justicia.– Edmund Burk.

-No existe nación más poderosa que la que obedece las leyes, no por la razón, sino por la pasión.– Charles de Montesquieu.

-Los hombres tontos y obstinados hacen abogados ricos.– Proverbio.

-La justicia es el contrato de conveniencia pactado para prevenir que los hombres dañen o sean dañados.– Epicuro.

-Promulgamos diversas leyes que crean criminales, y muy pocas que los castigan.- Allan Tucker.

-Los hombres frecuentemente confunden el asesinato y la venganza con la justicia. Rara vez tienen el estómago para la justicia.– Robert Jordan.

-Cada vez que un hombre defiende sus ideales o sus actos para mejorar la suerte de los demás o ataca la injusticia, envía una pequeña oleada de esperanza.– Robert Kennedy.

-La justicia no consiste en ser neutral entre lo correcto y lo incorrecto, sino en encontrar lo correcto y defenderlo, donde sea que se encuentre, contra lo incorrecto.– Theodore Roosevelt.

-Apoyo la verdad, no importa quién la diga. Apoyo la justicia, no importa para quién o contra quién sea.– Malcolm X.

-Aprendí derecho tan bien, que el día que me gradué demandé a mi universidad, gané el caso y me regresaron mi colegiatura.– Fred Allen.

-La ley no es justicia. Es un mecanismo imperfecto. Si sabes qué botones presionar y también tienes suerte, puede que te toque la justicia.– Raymond Chandler.

-La ley es un agujero sin fondo.– John Arbuthnot.

-La ley es consciencia colectiva.– Thomas Hobbes.

-Los abogados son las únicas personas a quienes su ignorancia de la ley no se castiga.– Jeremy Bentham.

-La justicia social no puede ser lograda a través de la violencia. La violencia mata lo que se trata de crear.– Papa Juan Pablo II.

-Sin la ley, los hombres son bestias.– Maxwell Anderson.

-Las leyes son como las salchichas, es mejor no ver cómo las hacen.– Otto von Bismarck.

-Si quieres paz, trabaja por lograr la justicia.– Papa Pablo VI.

-La ley sin justicia es como una herida sin cura.– William Scott Downey.

-El primer deber de la sociedad es la justicia.– Alexander Hamilton.

-El bien dentro de las personas es la mejor ley.– Cicerón.

-Si queremos respeto por la ley, primero debemos de hacer las leyes respetables.– Louis D. Branders.

-Si no existieran malas personas, no existirían buenos abogados.– Charles Dickens. 

-Donde la ley termina, la tiranía comienza.– Henry Fielding.

-Ilegales son aquellos que convierten sus voluntades en su ley.– William Shakespeare.

-Cuando el hombre es puro, las leyes son inútiles. Cuando los hombres son corruptos, las leyes se rompen.– Benjamin Disraeli.

-El sentido común usualmente deriva en buenas leyes.– William O. Douglas.

-La justicia es conciencia, no una conciencia personal, sino la consciencia de toda la humanidad.– Alexander Solzhenitsyn.

-Nunca olvides que todo lo que hizo Hitler en Alemania era legal.– Martin Luther King Jr.

-La ley menoscaba a los pobres, y los ricos son los que gobiernan la ley.– Oliver Goldsmith.

-Tendrás justicia en el siguiente mundo. En este tendrás a la ley.– William Gaddis.

-El poder de un abogado yace en la incertidumbre de la ley.– Jeremy Bentham.

-La gente es más temerosa de las leyes del hombre que de las leyes de Dios, porque su castigo parece estar más cercano.– William Penn.

-La libertad prospera cuando la religión es enérgica y el dominio de Dios sobre la ley es reconocido.– Ronald Reagan.

-Las buenas leyes hacen fácil hacer lo correcto y difícil hacer lo incorrecto.– William E. Gladstone.

-Un jurado consiste en doce personas que decidirán quién tiene el mejor abogado.– Robert Frost.

-Las leyes escritas son como telarañas, atraparán, es cierto, a los débiles y a los pobres, pero serán destrozadas a pedazos por los ricos y poderosos.– Anarcarsis.

-Las leyes concebidas bajo consentimiento común no deben de ser pisoteadas por individuos.– George Washington.

-Un Estado es mejor gobernado con pocas leyes, pero estrictamente ejercidas.– René Descartes. 

-En su igualdad majestuosa, la ley prohíbe a los ricos y a los pobres dormir debajo de los puentes, limosnear en las calles y robar hogazas de pan.– Anatole France.

-Preferiría no tener leyes que tener demasiadas.– Michel de Montaigne.

-Las leyes, como las casas, se apoyan las unas en las otras.– Edmund Burke.

-La ley no es ley si viola los principios de la justicia eterna.– Lydia María Child.

-El fin no justifica los medios.– Ovidio.

-La obediencia de la ley se exige, no se pide como un favor.– Theodore Roosevelt.

-Las malas leyes son el peor tipo de tiranía.– Edmund Burke.

-La ley debe de obedecerse siempre, no solamente cuando lo tienen a uno agarrado de su lugar especial.– Vladimir Putin.

-Si bien es cierto que la ley no puede hacer que alguien me ame, puede pararlo de que me linche, y creo que eso es bastante importante.– Martin Luther King, Jr.

-Para la ley, un hombre es culpable cuando viola los derechos de otros. En la ética, es culpable solamente por pensar en hacerlo.– Immanuel Kant.

-La ética y la igualdad, y los principios de justicia no cambian con el calendario.– D. H. Lawrence.