Biología

Zona abisal: concepto, características, flora y fauna


¿Qué es la zona abisal?

La zona abisal es una de las regiones en las que está divido el mar según su batimetría. Algunos autores la sitúan entre los 2000 y 6000 metros de profundidad, aunque otros señalan que comienza a los 3000 o 4000 metros.

La zona abisal es una zona de perpetua oscuridad (afótica) pues a ella no alcanzan a penetrar los rayos del sol. Las aguas de esta zona son frías, con una temperatura que oscila generalmente entre 0 y 1 ºC.

Esta zona carece de plantas debido a la ausencia permanente de luz y la fauna ha debido sufrir fuertes adaptaciones a las condiciones extremas de ausencia de luz, bajas concentraciones de oxígeno, altas presiones y bajas temperaturas.

Índice del artículo

Características de la zona abisal

Esta zona se ubica entre los 2000 y 6000 metros de profundidad, justo por debajo de la zona batial y por encima de la zona hadal.

La presión es muy elevada pues en el ambiente marino esta se incrementa a razón de 1 atmósfera cada 10 metros, lo cual quiere decir que la presión en la zona abisal se encuentra en el intervalo de 200 a 600 atmósferas.

En esta zona no llega la luz del sol, por lo cual no existen organismos fotosintetizadores en ella. La productividad primaria en esta zona está a cargo de bacterias y otros organismos quimiosintetizadores.

Las aguas generalmente son ricas en nutrientes debido a que no existen organismos autótrofos que los aprovechen, por lo cual se van concentrando. Esto es lo que permite que en aquellas zonas donde ocurre afloramiento de aguas profundas, sean lugares altamente productivos.

La presión parcial de oxígeno en esta zona es muy baja debido a que no hay organismos fotosintetizadores que liberen este compuesto en el medio.

La salinidad de las aguas abisales también es bastante uniforme.

Flora de la zona abisal

No existe flora en los fondos abisales, debido a ello, la producción primaria la realizan bacterias quimiosintéticas que crecen asociadas a los fondos oceánicos.

Estas bacterias se desarrollan principalmente en sitios como osamentas de grandes animales muertos, troncos y otros restos vegetales de origen terrígeno, volcanes hidrotermales y filtraciones frías.

Fauna de la zona abisal

La fauna abisal puede dividirse en dos grandes grupos: la fauna abisopelágica y la abisobentónica.

Fauna abisobentónica

Vive asociada al lecho marino, ya sea fija al mismo, enterrada o simplemente viviendo encima de él. Entre este tipo de fauna se encuentran erizos, estrellas, holoturias, poliquetos, cangrejos, camarones, isópodos, picnogónidos así como también esponjas y ascidias, entre otros.

Estas especies pueden sufrir un fenómeno denominado gigantismo debido a que alcanzan tallas extremadamente grandes en comparación con sus pares de aguas más someras. Por ejemplo, los isópodos de aguas profundas pueden alcanzas los 40 cm de longitud, mientras que las especies de aguas someras, raras veces superan los 2 cm.

La mayoría de las especies abisobentónicas se alimentan de las partículas de alimento que caen desde las aguas superiores. Mientras, unas especies se alimentan de estas partículas que aún están en suspensión en el agua, otras se alimentan de las partículas que se han depositado ya en el sedimento.

Los depredadores también pueden ser conseguidos entre la fauna de la zona abisal, pero parecieran ser poco frecuentes, y están representados por ejemplo, por picnogónidos, estrellas de mar, ofiuros y cangrejos.

Algunas especies de peces también son bentónicas, entre las cuales se pueden mencionar los peces trípode, granaderos, brujas, brotúlidos y algunas especies de anguilas.

Las ventanas hidrotermales, filtraciones frías y las carcasas de grandes animales son una especie de oasis en los fondos abisales, que soportan una alta diversidad de especies. Trabajos recientes sitúan en 400 el número de especies que habitan en estos ambientes.

Fauna abisopelágica

Es la fauna ubicada directamente en la columna de agua de la zona abisal. Está comprendida por algunos invertebrados como moluscos, medusas, ctenóforos, poliquetos y peces.

Algunas especies son completamente ciegas, otras presentan ojos desproporcionadamente grandes para aprovechar la poca luz proveniente de la bioluminiscencia. Muchas especies emplean la bioluminiscencia tanto para atraer a congéneres con fines reproductivos como para atraer posibles presas.

Debido a la escasa cantidad de alimento disponible, las diferentes especies no son muy abundantes, por eso los peces han adoptado el hermafroditismo como estrategia para garantizar su reproducción. Sin embargo, esto no ha ocurrido con los invertebrados, en los cuales el hermafroditismo no es frecuente.

Todos los peces abisales carecen de vejiga natatoria, lo cual probablemente se deba a que el costo energético de llenar esta vejiga sea demasiado alto debido a las altas presiones que deben soportar.

Algunas especies de peces han adoptado la estrategia del parasitismo masculino, la cual consiste en que cuando el macho alcanza la madurez sexual y consigue una hembra de su especie, se aferra a ella y la parasita, de esa manera, siempre estará disponible para fecundar a la hembra en periodo reproductivo.

Entre las adaptaciones fisiológicas que han sufrido tanto peces como invertebrados abisales, está el desarrollo de un metabolismo más lento, de esta manera requieren mucho menos oxígeno y alimentos que las especies de las zonas batimétricas superiores.

Especies de la zona abisal

Bathynomusgiganteus

Los organismos de esta especie son conocidos como isópodos gigantes. Habitan en aguas profundas del océano Atlántico. La especie fue descubierta en 1879 y descrita por el zoólogo francés Alphonse Milne-Edwards, con base en un macho juvenil.

Puede llegar a medir hasta 50 cm de largo, presenta el cuerpo segmentado y se asemeja a las cochinillas de la humedad o bichos bolitas que comúnmente habitan bajo rocas y maceteros en los jardines.

Estos organismos presentan un estómago muy extensible lo cual indica que probablemente su alimento sea escaso y deba aprovecharlo al máximo cuando logre encontrarlo. No se le conoce depredador hasta la fecha.

Bathypterois grallator

Conocido como pez trípode por presentar proyecciones de sus aletas pélvicas y caudal que le permiten apoyarse sobre el fondo oceánico como si fuesen zancos. Este organismo posee una talla promedio de 30 cm, pero puede llegar a medir hasta 43 cm y sus aletas pueden llegar a medir más de un metro.

Este pez ha sido hallado desde los 878 m hasta los 4720 m de profundidad, y es cosmopolita, pues habita tanto en el océano Atlántico como en el Pacífico y el Índico.

Cryptopsaras couesi

La hembra de esta especie de pez pescador puede llegar a alcanzar los 30 cm, mientras que el macho solo llega a medir entre 1 y 3 cm y parasita a la hembra. Esta especie es cosmopolita y se encuentra en todos los grandes océanos del mundo a profundidades que van desde los 75 hasta los 4000 metros.

Referencias

  1. G. Cognetti, M. Sará & G, Magazzú (2001). Biología Marina. Editorial Ariel.
  2. G. Huber (2007). Marine Biology. 6th edition. The McGraw-Hill Companies, Inc.
  3. Abyssal zone. En Wikipedia. Recuperado de: en.wikipedia.org.
  4. D. Rodríguez. Llanura abisal: características, elementos, flora, fauna. Recuperado de: lifeder.com.
  5. Fauna abisal. En Wikipedia. Recuperado de: es.wikipedia.org.
  6. C. Lira. Zona hadal: características, flora y fauna. Recuperado de: lifeder.com.