Anatomía y fisiología

James Creelman: biografía y entrevista con Porfirio Díaz


James Creelman fue un periodista canadiense que se alzó a la fama luego de conseguir una entrevista con el dictador mexicano Porfirio Díaz. La entrevista tuvo como dato principal la declaración de Díaz diciendo que no se iba a postular a las elecciones presidenciales de 1908, lo cual resultó siendo mentira.

Fue un periodista que viajaba incansablemente a donde se requiriera para encontrar historias relevantes, sin importar que tuviese que poner su vida en peligro. Cruzó el río Mississippi y el río Yellowstone junto al aventurero Paul Boyton y se destacó por ser una importante figura periodística en la época cumbre de la prensa amarillista.

Sin embargo, su hazaña más importante fue, sin dudas, la entrevista con Díaz. Muchos historiadores piensan que las respuestas que dio el dictador en la entrevista fueron un punto de giro extremadamente importante para que se llevase a cabo la Revolución mexicana.

Índice del artículo

Biografía

James Creelman nació el 12 de noviembre de 1859 en la provincia canadiense de Montreal. Fue hijo de Matthew Creelman, el cual se dedicaba a inspeccionar calderas, y Martha Dunwoodie. Sus padres eran descendientes de escoceses, pero su padre vivía en Irlanda antes de mudarse a Montreal.

Cuando tenía tan solo 14 años, él y su familia se mudaron a Nueva York, Estados Unidos. Allí se interesó ampliamente por las leyes y la literatura. Sus aptitudes llamaron la atención de Thomas De Witt, uno de los reformistas de la Iglesia católica más importantes del siglo XIX en la nación americana.

Además, obtuvo el tutelaje de la figura republicana Roscoe Conkling, quien fue líder del partido y miembro de la Casa de Representantes estadounidense.

Se casó con Allice Leffinwell en 1891, con quien tuvo cuatro hijos. Tuvo una exitosa vida profesional, pero una relativamente corta vida. Falleció a los 56 años, el 12 de febrero de 1915, siete años después de la publicación de su entrevista con Porfirio Díaz.

Vida periodística

Llevó a cabo muchísimas labores periodísticas tras haberse preparado en el área de la literatura en Nueva York. Su primer trabajo fue en un periódico episcopal de la ciudad, luego pasó por el Brooklyn Eagle hasta recalar en el prestigioso New York Herald.

Además de sus odiseas con Paul Boyton, reportó en persona el conflicto entre los Hatfield y los McCoy, un enfrentamiento entre dos familias rurales norteamericanas que habitaban West Virginia.

Este evento duró varios años y pasó a la historia de Estados Unidos como parte del folclor local, además de como una fuente de honor familiar.

También entrevistó al famoso líder aborigen “Sitting Bull” (Toro Sentado, según su fiel traducción al español). Este nativo americano fue uno de los líderes de la resistencia contra el gobierno de Estados Unidos, antes de ser asesinado en 1890 cuando fuerzas policiales trataron de arrestarlo.

Guerra de Cuba y España

Además, Creelman cubrió el desarrollo de tensiones y la guerra entre España y Cuba que se llevó a cabo en 1898. Como era costumbre para la mayoría de los reporteros de guerra de la época, llevó un arma consigo durante sus investigaciones.

Apoyó firmemente a la resistencia cubana en la guerra. De hecho, cuando estaba cubriendo la batalla de El Caney para el periódico de Nueva York con el que trabajaba, le pidió al general norteamericano que estaba a cargo de una redada en un almacén español que lo dejase unirse a la batalla.

El general finalmente estuvo de acuerdo con dejarlo avanzar. El periódico de Creelman había sido uno de los principales instigadores del conflicto, así que cuando las tropas lograron tomar el fuerte en el que se encontraban los españoles, Creelman tomó una bandera de España para llevarla de vuelta a la sede.

Sin embargo, al momento de tomar la bandera, el periodista se levantó frente a una trinchera que todavía tenía soldados españoles y la aventó varias veces contra el viento. Los soldados, furiosos, dispararon varias veces contra Creelman, hiriéndolo en la espalda y en uno de sus brazos.

Estilo

Su estilo periodístico era acorde a como se solía llevar a cabo esta profesión en la época. Durante sus entrevistas solía escuchar al entrevistado tanto como él mismo intervenía.

Tenía un ego bastante pronunciado, y en una ocasión incluso llegó a darle un sermón al papa acerca de la relación entre protestantes y católicos.

Sin embargo, Creelman era reconocido como uno de los periodistas más importantes del momento cuando ejercía su función profesional.

Entrevista con Porfirio Díaz

Las razones por las cuales Porfirio Díaz decidió conceder una entrevista a un periodista norteamericano siguen siendo desconocidas hasta el día de hoy. El dictador fue quien contactó al periodista para concederle la entrevista y pedirle que hiciera un artículo extenso acerca de la misma.

De igual forma, no ha sido posible entender por qué decidió prometer cosas que finalmente no cumplió; especialmente de temas tan delicados como su no reelección.

Hay quienes creen que la razón por la que dijo esto fue porque pensó que la entrevista estaría dirigida exclusivamente a un público extranjero y quería dar una buena imagen de sí ante el mundo.

Sin embargo, otros autores creen que la razón fue porque México estaba teniendo dificultades económicas para el momento, y pensó que la noticia serviría para apaciguar las aguas y mantener contento al pueblo mexicano.

Se cree que pudo haber sido también para hacer salir a la luz a quienes no simpatizaban con su ideología o incluso para persuadir a sus seguidores de que le pidieran que volviese a postularse para las elecciones.

Elecciones y desenlace

Para el momento en que el dictador compareció ante Creelman, el periodista trabajaba con la revista norteamericana Pearson’s Magazine.

El artículo oficial de este encuentro fue publicado el 17 de febrero de 1908 y luego, el 3 de marzo del mismo año, fue publicada su versión en español en un periódico conocido como El Imparcial, en Ciudad de México.

Las elecciones presidenciales iban a llevarse a cabo en 1910 y para ese momento Porfirio Díaz iba a tener 80 años. Por tanto, anunció que no participaría en estas elecciones.

Además, alentó a la formación de otros partidos políticos, lo que había estado prohibido durante el transcurso de los 30 años de su régimen.

Lo cierto es que el resultado de la entrevista fue catastrófico para el porfiriato. El dictador se volvió a postular a la presidencia y ganó en 1910 con  más de un 98 % de los votos. Esto ocasionó una revuelta que conllevó a la Revolución mexicana y al subsecuente derrocamiento de Díaz en 1911.

Referencias

  1. Creelman Interview, Encyclopedia of Latin American History and Culture, 2008. Tomado de encyclopedia.com
  2. James Creelman – Porfirio Díaz, (n.d.). Tomado de porfiriodiaz.com
  3. Biography of James Creelman, Poem Hunter Database, (n.d.). Tomado de poemhunter.com
  4. James Creelman, Wikipedia in English. Tomado de wikipedia.org
  5. Sitting Bull, Wikipedia in English. Tomado de wikipedia.org
  6. Hatfield–McCoy feud, Wikipedia in English. Tomado de wikipedia.org