Cucaracha americana: características, reproducción, alimentación
La cucaracha americana o cucaracha roja (Periplaneta americana) es un insecto de la familia Blattidae que puede llegar a medir más de 5 cm de longitud, lo cual la convierte en la especie de cucaracha común de mayor tamaño. Presenta una coloración marrón rojiza prácticamente uniforme, excepto por los márgenes del pronoto que es amarillento.
A pesar de su nombre, esta especie es originaria de África y Medio Oriente y actualmente está distribuida en las regiones templadas y tropicales del mundo entero gracias a la introducción accidental por parte del hombre. Habita en sótanos, alcantarillas, grietas, espacios públicos urbanos, basureros, entre otros espacios.
Periplaneta americana es omnívora oportunista y puede alimentarse de cuero, pegamento, cabello, escamas de piel seca, telas, almidón, papel, animales muertos, vegetales frescos y en descomposición, restos de alimentos en descomposición, incluso pueden alimentarse de congéneres muertas o moribundas.
Es un insecto de hábitos nocturnos, muy veloz y con capacidad de alcanzar una velocidad de 5,4 km/h. Presenta sexos separados, siendo la hembra capaz de reproducirse por partenogénesis de forma facultativa. Los huevos son colocados en una cápsula u ooteca de hasta 0,9 cm de largo, del cual eclosionan las ninfas que requieren hasta 13 mudas para alcanzar la madurez.
Índice del artículo
- 1 Características
- 2 Taxonomía
- 3 Reproducción y ciclo de vida
- 4 Hábitat y distribución
- 5 Alimentación
- 6 Importancia sanitaria
- 7 Control biológico
- 8 Referencias
La cucaracha americana es aplanada dorsoventralmente, ovalada, con una talla que oscila entre 34 y 53 mm de largo y 7 mm de alto, con un pronoto en forma de escudo que cubre la región cefálica y dos pares de alas presentes en ambos sexos. Estas alas, en los machos sobrepasa el extremo distal del abdomen, mientras que en las hembras no.
El primer par de alas son del tipo tegmina, es decir más robustas y resistentes que las posteriores, de apariencia coriácea y se insertan en la región media del tórax o mesotórax, mientras que las alas posteriores surgen del tórax posterior o metatórax. El último par de alas es usado para el vuelo, el cual generalmente es corto.
La coloración es marrón rojiza uniforme, excepto por una banda amarillenta que corre por el margen del pronoto. Presenta un solo par de antenas, las cuales son filiformes y multiarticuladas.
Su ciclo de vida consta de 13 estadios ninfales que pueden tardar hasta 20 meses para madurar, dependiendo de la temperatura y la disponibilidad de alimento. Estas ninfas eclosionan de una ooteca que contiene 14 a 16 huevos. Cada hembra puede colocar entre entre 6 y 14 ootecas, las cuales puede dejar caer o colocar cerca de algún alimento.
La cucaracha americana es un insecto ubicado dentro del orden Blattodea, un taxón descrito por Wattenwil en 1882 y que actualmente incluye más de 4500 especies de cucarachas y termitas, las cuales presentan ancestros comunes con las cucarachas.
Dentro de este orden se incluye a la familia Blattidae, que contiene al género Periplaneta, con cerca de 50 especies, entre ellas Periplaneta americana, especie descrita originalmente por Carlos Linneo en 1758. Esta especie está más relacionada genéticamente a las termitas que a la cucaracha alemana (Blatella germánica).
Periplaneta americana se reproduce principalmente de forma sexual. Machos y hembras son muy similares entre sí, pero los machos tienen las alas ligeramente más largas que las hembras. Ambos maduran sexualmente entre seis meses y un año después de haber emergido de la ooteca.
Durante la época de reproducción, las hembras producen y liberan feromonas que atraen a los machos y estimulan su comportamiento reproductivo. La fecundación es interna y ocurre luego de una etapa de cortejo. También puede ocurrir la partenogénesis facultativa.
Luego de la cópula, la hembra va a producir entre 12 y 16 embriones que depositarán en una estructura en forma de cápsula denominada ooteca. Esta ooteca tiene apariencia coriácea, es de color marrón, de aproximadamente 0,9 cm de largo y de forma alargada, con un borde en forma de cresta el cual se romperá para liberar las ninfas.
La hembra acarrea la ooteca en el abdomen por uno o dos días y luego la deja caer o la fija con una sustancia pegajosa a cualquier sustrato cerca de comida. Luego de mes y medio a dos meses de la puesta, los embriones se han desarrollado completamente y eclosionan los organismos en fase de ninfa.
La primera fase de ninfa es de color gris, pero las siguientes etapas presentan la misma coloración de los adultos. El número de estadios ninfales puede variar entre 9 y 14, pero generalmente son 13, existiendo una muda entre cada uno de estos estadios. Las ninfas son similares a los adultos, pero carecen de alas y órganos reproductores funcionales.
Las ninfas tardan hasta 12 meses para madurar, aunque algunos autores señalan que pueden tardar hasta 20 meses antes de ser sexualmente reproductivas. Las cucarachas adultas pueden vivir cerca de un año más (luego de alcanzar la edad reproductiva) y durante esta etapa, una hembra puede producir hasta 10 ootecas.
Periplaneta americana puede sobrevivir con o sin ayuda del ser humano (es peridoméstica). Prefiere ambientes húmedos y cálidos, sin exposición directa a los rayos del sol. Habita en edificios, alcantarillas, ductos de ventilación, pozos sépticos, áticos, basureros, huecos en troncos de árboles, entre otros.
Su temperatura ideal de desarrollo es 29 °C aunque puede sobrevivir en temperaturas más elevadas si existe humedad ambiental y posee una fuente adecuada de agua. Es de hábitos nocturnos y solo se le observa en horas diurnas cuando existen condiciones de estrés ambiental o cuando hay escases de alimento.
La especie es originaria de África y Medio Oriente y fue introducida accidentalmente en el continente americano luego de la conquista y colonización, probablemente como polizontes durante la comercialización de productos y el tráfico de esclavos.
Actualmente es cosmopolita y está distribuida a lo largo de las todas regiones tropicales y subtropicales del mundo entero, así como en las templadas con el clima más benigno, debido a que no soportan temperaturas bajas.
Periplaneta americana es una especie omnívora oportunista que puede alimentarse tanto de alimentos frescos como en descomposición, su dieta incluye alimentos ricos en almidón, material vegetal fresco o en descomposición, animales muertos, queso y otros productos lácteos. También puede comer papel, pegamento, cabellos, telas, entre otros.
Puede practicar el canibalismo, alimentándose de otras cucarachas de su misma u otras especies, ya sean muertas o moribundas. Es una especie muy resistente y existen reportes que señalan que puede sobrevivir hasta tres meses sin alimentarse. Sus requerimientos de agua son mayores y solo sobrevive hasta 5 días sin líquido.
La cucaracha americana es un agente causante de alergias en el ser humano, las cuales pueden producirse por distintas causas, entre ellas la inhalación de las heces. Restos de cucarachas muertas que se acumulan en el polvo de las casas también puede ser un desencadenarse por contacto.
El consumir alimentos que hayan sido parcialmente consumidos por las cucarachas, y la mordedura del insecto también pueden ocasionar reacciones alérgicas. Eventualmente, si una cucaracha se desliza en la boca de una persona dormida en busca de alimento, esta puede desarrollar una patología denominada herpes blattae.
Periplaneta americana puede ser vector mecánico de microorganismos patógenos para el ser humano como virus, bacterias, hongos, protozoos y helmintos. Estos microorganismos pueden adherirse a las patas y exoesqueleto de la cucaracha y contaminar los alimentos al transitar el insecto por encima de ellos.
Entre las bacterias patógenas que han sido halladas asociadas a la cucaracha americana se encuentran Bacilus subtilis, agente causal de la conjuntivitis, Escherichia coli, responsable de algunas formas de diarrea y gastroenteritis y Salmonella tiphi que puede ocasionar la fiebre tifoidea.
Los científicos han encontrado que al menos siete especies de helmintos de importancia sanitaria para el ser humano están asociados a la cucaracha americana, entre ellos Ascaris lumbricoides, Necator americanus y Ancylostoma duodenale.
Mientras que, entre los protozoo patógenos se encuentran especies tan importantes como Trypanosoma cruzi, Toxoplasma gondii y Entamoeba hystolitica.
El uso de insecticidas es la principal herramienta en la lucha contra la cucaracha americana. Sin embargo, presenta algunos inconvenientes como el poder desarrollar resistencia al plaguicida por parte de la cucaracha, así como la contaminación ambiental por los componentes del producto.
Debido a ello, se han intentado desarrollar otras técnicas para erradicar a la cucaracha americana como el empleo de sustancias que originen la desecación del insecto, como el ácido bórico y la tierra de diatomeas.
Otra forma de luchar contra la cucaracha es empleando organismos que directa o indirectamente controlen sus poblaciones o simplemente las maten. Estos organismos son conocidos como controladores biológicos. Estos enemigos naturales se pueden clasificar en tres grandes grupos: parásitos, depredadores y patógenos.
Uno de los problemas que presenta el control biológico de la cucaracha americana es que esta, al igual que el resto de los insectos, puede producir una gran cantidad de moléculas bioactivas, incluyendo péptidos y polipéptidos, con propiedades antibacterianas y antifúngicas.
La bacteria Bacillus thuringiensis, así como los hongos Beauveria bassiana, Metarhizium anisolpiae, Moniliformis moliniformis y Aspergillus spp. inducen la muerte de distintas especies de cucarachas.
Los investigadores también han probado el empleo de parasitoides, principalmente himenópteros, para el control biológico de las etapas grávidas de las cucarachas, entre ellos se encuentran por ejemplo Aprostocetus hagenowii, Anastatus tenuipes y Evania appendigaster.
Periplaneta americana ha mostrado mayor resistencia que otras especies de cucarachas a algunos compuestos elaborados con base en hongos entomopatógenos. También es la menos susceptible al ataque de nematodos patógenos de insectos, como diversas especies del género Steinernema.
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