Biografías de personajes históricos

Alonso de Ojeda: biografía, viajes, ciudades fundadas, muerte


Alonso de Ojeda (1466-1515) fue un conquistador español que formó parte del segundo viaje que realizó Cristóbal Colón a América. Durante los siguientes años recorrió las costas de Colombia, Guayana, Trinidad, Curazao, Tobago, Aruba y Venezuela. Uno de los hechos por lo que es reconocido es por haber dado nombre a ese último territorio.

Después de participar en 1492 en la conquista de Granada, hasta entonces un reino musulmán, Alonso de Ojeda se trasladó a América con Colón, concretamente a La Española. Allí luchó contra los indígenas de la isla antes de regresar a España por una temporada.

Enemistado con Colón, Alonso de Ojeda logró el permiso real para capitanear nuevas exploraciones en el continente recién descubiertos. Comenzaron así los llamados “viajes menores” o “viajes andaluces”. Durante los mismos, el conquistador exploró las costas de Venezuela y Colombia. Bajo su mando se fundó el primer asentamiento castellano en el continente: Santa Cruz.

Ojeda fue nombrado gobernador de Urabá (Nueva Andalucía), pero tras fracasar en varias expediciones de conquista acabó perdiendo su prestigio. Sus últimos años los pasó en Santo Domingo, donde falleció en 1515.

Biografía

Primeros años

Alonso de Ojeda nació en Torrejoncillo del Rey, Cuenca. No existe acuerdo sobre su fecha de nacimiento, ya que algunos afirman que fue en 1466 y otros en 1470.

De familia noble, el futuro conquistador trabajó como paje del duque de Medinaceli. Según algunas fuentes, su primer encuentro con Cristóbal Colón pudo producirse en casa de este duque. En 1492, De Ojeda destacó por sus habilidades militarse en la conquista de Granada.

La mejor descripción sobre su figura fue realizada por fray Bartolomé de las Casas. El religioso afirmó que Ojeda “era pequeño de cuerpo, pero muy bien proporcionado y muy bien dispuesto, hermoso de gesto, la cara hermosa y los ojos muy grandes: de los más sueltos hombres en correr y hacer vueltas en todas las otras cosas de fuerzas”.

Llegada a La Española

La protección que le brindó el obispo Juan Rodríguez de Fonseca fue fundamental para que Alonso de Ojeda recibiera el encargo de capitanear uno de los barcos que iban a formar parte del segundo viaje de Colón, en 1493.

Tras una parada en la isla de Guadalupe, la expedición llegó a la Española. A comienzos de 1494, De Ojeda recibió el encargo de explotar el interior de la isla, concretamente la región de Cibao. Allí, el explorador encontró las primeras muestras de oro del Nuevo Continente, que fueron enviadas a los Reyes Católicos.

Su siguiente misión consistió en llevar ayuda a un capitán castellano que había tenido que buscar refugió en la fortaleza de Santo Tomás ante el ataque de los indígenas de la zona, encabezados por el cacique Caonabo. Los hombres de Alonso de Ojeda, sin embargo, fueron también sitiados y tuvieron que ser socorridos por una nueva expedición.

Ante la amenaza que suponía el cacique Caonabo, Ojeda emprendió una campaña para capturarlo. El éxito en esta misión le valió ser premiado con un terreno en Maguana.

Viajes menores

La estancia de Alonso de Ojeda en la Española se prolongó hasta finales de 1498, cuando regresó a Castilla. Uno de los motivos de su vuelta fue que se había enemistado con Cristóbal Colón.

En la Corte, Ojeda convenció a su antiguo protector, el obispo Fonseca, para que la Corona lo pusiera al frente de un nuevo viaje a América. Esta expedición, que partió el 18 de mayo de 1499, fue la primera de los “viajes menores” o “viajes andaluces”.

Uno de los aspectos más destacados de la expedición fue la participación de Juan de la Cosa y Américo Vespucio. El primero realizó un mapa del Nuevo Mundo. El segundo, al ver el lago de Maracaibo, bautizó la zona como Venezuela, ya que la le recordó a Venecia.

Durante este viaje, los explotadores encontraron oro y perlas, que llevaron de vuelta a España. Este éxito hizo que los reyes firmaran una nueva capitulación con Ojeda, el 8 de junio de 1501. Mediante la misma, el conquistador fue nombrado gobernador de Coquibacoa.

Poco después, organizó un nuevo viaje que recorrió parte de la costa venezolana. Sin embargo, su violenta actuación contra los indígenas y los portugueses le costaron ser condenado a la cárcel. Fue liberado en 1504 gracias a la intervención del obispo Fonseca.

Gobernador de Urabá

La celebración de la Junta de Burgos en 1508 fue muy importante para la vida de Alonso de Ojeda. La Corona dividió la llamada Tierra Firme en dos gobernaciones de cara a su colonización. Una de ellas fue la de Veragua (la actual Panamá), mientras que la segunda fue la de Nueva Andalucía o Urabá.

Esta última fue adjudicada a Ojeda, quien asumió el cargo de gobernador de un territorio que comprendía la actual costa colombiana entre el golfo de Urabá y el cabo de la Vela.

A pesar del éxito personal que suponía este nombramiento, las siguientes exploraciones realizadas por el conquistador fueron un fracaso. En 1508, casi pierde la vida en un enfrentamiento con los indígenas.

Más adelante, en 1510, Alonso de Ojeda llegó al golfo de Urabá, donde fundó el fuerte de San Sebastián.

La falta de alimentos y los continuos ataques de los nativos llevaron a Ojeda a renunciar al cargo de gobernador. Además, en uno de esos ataques fue alcanzado por una flecha envenenada que le provocó una dolencia en la pierna durante el resto de su vida.

Últimos años

En su vida personal, Alonso de Ojeda se había casado con Guaricha, una indígena a la que bautizó como Isabel.

Después de fracasar en su expedición a Urabá, Ojeda se instaló definitivamente en Santo Domingo. Allí se retiró al monasterio de San Francisco, donde falleció en 1515.

Viajes

Su primer viaje a América tuvo lugar en 1493, en el segundo de los realizados por Cristóbal Colón al Nuevo Continente. Cuando se enemistó con Colón decidió regresar a España para negociar la realización de nuevas expediciones con él al mando.

Primer viaje a Venezuela

Los Reyes Católicos querían comprobar si lo relatado por Colón sobre las riquezas de las nuevas tierras era real. Así, encargaron a Alonso de Ojeda que realizará una nueva expedición y que informara sobre lo hallado.

Los barcos partieron hacia América el 18 de mayo de 1499. Américo Vespucio, que formaba parte de la misión, se dirigió después hacia la zona de Brasil.

El resto de la flota recorrió las desembocaduras de los ríos Orinoco y Esquibo, el golfo de Paria y las islas Trinidad y Margarita. Después, llegó a la isla Curaçao, a la que Ojeda bautizó como isla de los Gigantes.

Fue en ese viaje cuando Alonso de Ojeda descubrió un golfo al que denominó Venezuela por su parecido con Venecia.

Por último, llegaron al cabo de Vela, en la Guajira. Esta península fue bautizada por los conquistadores como Coquibacoa. Desde el cabo, cargado de algo de oro, perlas y esclavos, regresaron a La Española.

En la isla, los partidarios de Colón recibieron muy mal a los expedicionarios. El mal ambiente llegó a provocar peleas e, incluso, algunos muertos.

Ojeda debió volver a España. Según las crónicas, sus barcos llevaban bastantes indígenas. Pero pocas riquezas.

Segundo viaje a Venezuela

El 8 de junio de 1501, los Reyes Católicos nombraron a Alonso de Ojeda gobernador de Coquibacoa. Además, les concedieron permiso para hacer un nuevo viaje para fundar allí una colonia, pero le negaron visitar Paria.

La expedición, compuesta por cuatro carabelas, partió en enero de 1502. Su primer destino fue la isla Margarita y después se dirigió a las costas de Venezuela. En la península de la Guajira, en 1502, fundó el primer asentamiento español en tierra firma: Santa Cruz.

Esta población, sin embargo, no duró demasiado. Ojeda y sus hombres realizaron múltiples ataque a los indígenas de la zona y, además, dentro de sus filas se sucedieron los problemas.

Finalmente, dos de sus socios lo apresaron para quedarse con el botín que habían conseguido y apresaron a Ojeda. Después, todos los colonos regresaron a Santo Domingo, donde De Ojeda fue recluido en prisión hasta 1504.

El abandono del asentamiento y la escasez de las riquezas conseguidas hicieron que la misión fuera considerada un fracaso. Ante esto, la gobernación de Coquibacoa fue eliminada.

Viaje a Nueva Andalucía

Tras ser liberado, Alonso de Ojeda se quedó en la isla hasta 1508. Ese año, el rey Fernando el Católico decidió organizar la colonización de Tierra Firme.

Juan de la Cosa viajó a la península para representar los intereses de Alonso de Ojeda. Su principal rival para encargarse de la colonización era Diego de Nicuesa. Finalmente, el monarca dividió el territorio en dos partes. A Ojeda le correspondió Nueva Andalucía o Urabá, de la que fue nombrado gobernador.

Alonso de Ojeda organizó una nueva expedición para dirigirse a Nueva Andalucía. Su partida desde La Española se produjo el 10 de noviembre de 1509.

La expedición desembarcó en la bahía de Calamar, donde hoy se ubica Cartagena. Allí se encontraron varios indígenas, a los que se les urgió a jurar fidelidad a la Corona. Los nativos se negaron y comenzó una batalla que terminó con la victoria de los conquistadores.

Sin embargo, cuando intentaron perseguir a los indígenas que habían huido, los exploradores llegaron a la aldea de Turbaco. Los nativos derrotaron allí a los españoles. Juan de la Cosa murió en el combate, pero Ojeda y unos pocos hombres más lograron escapar.

Los supervivientes recibieron la ayuda de la flota de Nicuesa. Ambos conquistadores, olvidando sus diferencias, se unieron para masacrar a los nativos de Turbaco.

Llegada al golfo de Urabá

Nicuesa siguió su propio camino mientras Ojeda continuaba navegando por las costas de Nueva Andalucía. En el golfo de Urabá fundó un nuevo asentamiento, el fuerte de San Sebastián, el 20 de enero de 1510.

Como ocurriera en Santa Cruz, los habitantes del fuerte sufrieron pronto la falta de alimentos. Además, el clima afectó negativamente la salud de los colonos, quienes también fueron atacados por los indios urabaes en varias ocasiones. En una de ellas, Alonso de Ojeda resultó herido en la pierna con una flecha envenenada.

Alonso de Ojeda y sus hombres esperaban la ayuda que habían apalabrado antes de partir desde La Española, pero esta no llegaba.

Ante esto, el conquistador dejó el fuerte y pidió a Francisco Pizarro, entonces solo un soldado, que los protegiera durante cincuenta días. Si en ese periodo no había regresado, le ordenó que abandonara el asentamiento y volvieran a Santo Domingo.

Después de que pasaran esos 50 días sin que Ojeda regresara, Pizarro emprendió el regreso a Santo Domingo. El fuerte quedó abandonado y fue incendiado por los indígenas.

Ojeda, después de este nuevo fracaso, embarcó en el barco de Bernardino de Talavera, un pirata español, con intención de volver a Santo Domingo.

Naufragio en Cuba

El viaje de regreso de Ojeda fue muy accidentado. Primero, Bernardino de Talavera lo tomó prisionero con idea de pedir un rescate. Después, un huracán provocó que el barco quedara varado en Cuba.

Ante esto, los hombres del pirata junto con el propio Ojeda tuvieron que recorrer a pie toda la costa de la isla

Durante ese trayecto, la mitad de los hombres murieron de hambre y de varias enfermedades. Ojeda realizó una promesa a la virgen: levantar un templo en el primer pueblo indígena que los recibiera con hospitalidad.

De los 70 hombres que comenzaron la travesía, solo doce de ellos llegaron a Cueybá, donde fueron recibidos amablemente por el cacique Cacicaná. Gracias a sus cuidados, todos pudieron sobrevivir y Ojeda cumplió su promesa y levantó una ermita en el poblado.

El conquistador Pánfilo de Narváez encontró a los refugiados y los trasladó a Jamaica, primero, y a La Española, después.

Ciudades fundadas

Población de Santa Cruz

El primer asentamiento fundado por Alonso de Ojeda fue Santa Cruz, el 3 de mayo de 1502. Esta ciudad, situada en el noroeste de Venezuela, fue el primero fundado por los españoles en el territorio continental americano.

Este asentamiento se encontraba en la bahía de los Castilletes, en la orilla de la laguna de Cocinetas, en la Guajira venezolana.

La colonia tuvo una historia muy corta, ya que los ataques continuos de Ojeda a los indígenas provocaron la reacción violenta de estos. Además, se produjeron problemas internos entre el conquistador y sus hombres. Finalmente, Santa Cruz fue abandonada.

Fuerte de San Sebastián de Urabá

El 20 de enero de 1510, Ojeda fundó un nuevo asentamiento, el Fuerte de San Sebastián. De nuevo, su existencia fue muy corta. Sus habitantes padecieron la falta de alimentos y los ataques de los indígenas, por lo que al final abandonaron la zona.

Referencias

  1. Real Academia de la Historia. Alonso de Ojeda. Obtenido de dbe.rah.es
  2. Américas. Alonso de Ojeda y sus viajes a América. Obtenido de americas-fr.com
  3. Busca biografías. Biografía de Alonso de Ojeda. Obtenido de buscabiografias.com
  4. Chronicles of America. Biography of Alonso de Ojeda. Obtenido de chroniclesofamerica.com
  5. McColl, Richard. The forgotten conquistador. Obtenido de thecitypaperbogota.com
  6. The Biography. Biography of Alonso de Ojeda (1470-1515). Obtenido de thebiography.us
  7. Encyclopedias almanacs transcripts and maps. Alonso de Ojeda. Obtenido de encyclopedia.com