Qué es Oído:

Se conoce comooídoal órgano que sirve para oír, en el hombre y en animales. La palabra oído proviene del latín “auditus”, que significa “audición”.

Como tal, el oído es el órgano de la audición y del equilibro. Es el órgano sensorial que percibe los sonidos a través de un proceso denominado audición. Esto es, las ondas sonoras que viajan por el aire las transforma, primero, en vibraciones mecánicas y, luego en impulsos nerviosos eléctricos que son enviados al encéfalo, donde son interpretados como sonidos.

El oído también percibe la posición del cuerpo en relación con la gravedad y envía la información necesaria para que el cuerpo mantenga el equilibrio. El oído está situado en un espacio hueco del hueso temporal del cráneo.

El término oído también se utiliza en diversas frases o expresiones populares, como:

  • “Al oído”: una persona habla cerca de la oreja de la otra persona para que nadie pueda oír.
  • “Oído al parche” / “oído al tambor” / “ser todos oídos”: tres expresiones coloquiales que significa prestar atención a una advertencia, comentario, o discurso.
  • “Llegar a oídos de”: cuando un determinado asunto es conocido por otra persona.
  • “Hacer oídos sordos”: individuo se desentiende de un asunto.
  • “Entrar por un oído y salir por otro”: cuando una persona no toma en cuenta o no cumple lo que la otra le dice, le ordena, o le pide.

En inglés, la expresión oído es traducida como “hearing”. En caso, de identificar al órgano del cuerpo humano oreja es traducido al inglés como “ear”.

Partes del oído

El oído se compone de tres secciones separadas:

  • Oído externo: recoge las ondas sonoras y las canaliza hasta el tímpano (membrana timpánica). El oído externo está formado por tres partes:
  1. La oreja o el pabellón auricular.
  2. El conducto auditivo externo.
  3. El tímpano; fina membrana semitransparente de unos 9mm de ancho que separa el oído externo del oído medio. La cera o cerumen que segregan las glándulas recubren el conducto auditivo para proteger al tímpano de los daños que pueden ocasionar el polvo y la suciedad.
  • Oído medio: en el se encuentra tres huesos pequeños, denominados en conjunto como osículos, se trata del martillo, el yunque y el estribo. El oído medio se encarga de transmitir mecánicamente las vibraciones por los osículos, para llegar a una membrana que recubre la ventana oval (la abertura de la entrada al oído interno).
  • Oído interno: tiene como función convertir en impulsos nerviosos las vibraciones mecánicas, transmitidas por el aire, recibidas de los osículos, situados en el oído medio. El oído interno también el órgano del equilibrio, contiene para ello unos órganos minúsculos capaces de percibir el comportamiento del cuerpo en relación con la fuerza gravedad. El oído interno está formado por el utrículo, el sáculo y el laberinto.

Vea también Laberinto.

Oído absoluto

Oído absoluto u oído musical, conocido también como individuos con buen oído, términos que realzan la capacidad o habilidad que posee el individuo para reconocer las notas y tonalidad por su nombre, sin ninguna referencia, con tan solo escucharlo.

Algunos de los músicos más importantes de la historia, han sido diagnosticados con oídos absolutos, entre los clásicos, Mozart, Beethoven. En el siglo XX, Jimmi Hendrix, Ella Fitzgerald y Bing Crosby, al igual que Michael Jackson y Mariah Carey.

Oído tapado

La sensación de sentir los oídos tapados puede derivarse por múltiples causas, las más comunes son:

  • Acumulación de cerumen en los oídos.
  • Acumulación de agua en los oídos.
  • Gripes, congestión nasal y/o infecciones.
  • Inflamación de los oídos.
  • Estrés.
  • Bloqueo de la Trompa de Eustaquio, en virtud de que la presión del ambiente es diferente de la presión del oído, lo cual puede generar una sordera pasajera.

El individuo puede aplicar diferentes métodos para liberar la tensión del oído y regular la presión, entre ellos se encuentran:

  • Mascar chicle.
  • Abrir la boca.
  • Tapar la nariz y sacar el aire por los oídos.
  • En caso de ser por cera, el individuo debe de dirigirse a un profesional para realizar un lavado a los oídos.