Qué son Movimientos sociales:
Los movimientos sociales son grupos de base organizados en torno a la defensa o promoción de una causa que, de manera coordinada, planificada y sostenida en el tiempo, pretenden el cambio social.
Los movimientos sociales se articulan en torno a dos claves fundamentales: la percepción de una identidad compartida entre sus miembros y la organización sistemática con proyección de futuro, todo orientado a intervenir de manera concreta en la sociedad. Esto distingue al concepto de movimiento social de los conceptos de comportamiento colectivo y acción colectiva.
Objetivo de los movimientos sociales
El objetivo de los movimientos sociales es promover cambios en las estructuras sociales y los valores que las legitiman, ya que dichas estructuras, por su propensión a la estabilidad, tienden a naturalizar el estado de las cosas, lo que es causa del estancamiento y la perpetuación de condiciones anacrónicas generadoras de conflicto.
Eventualmente, puede ocurrir que un movimiento social se articule en contra del cambio y no a favor. Esto pasa cuando las medidas implementadas por otros actores sociales, casi siempre el gobierno, introducen cambios que amenazan en algún grado el estilo de vida de una comunidad. En este caso, se habla de movimientos de resistencia, término adoptado del ámbito militar.
Características de los movimientos sociales
En términos generales, los movimientos sociales se caracterizan por los siguientes elementos:
- Surgen a partir de tensiones o conflictos estructurales en la sociedad;
- sus integrantes comparten una identidad expresada en objetivos, ideas, creencias e intereses compartidos;
- se articulan en torno al principio de solidaridad colectiva;
- crean redes de interacción con la comunidad;
- creen en la participación colectiva como motor de cambio social o de intervención social;
- gozan de una cierta estabilidad organizativa;
- con frecuencia sus estructuras son horizontales;
- diseñan y desarrollan acciones colectivas coordinadas para el abordaje de conflictos;
- por norma, su relación con el poder es conflictiva;
- sus intervenciones ocurren fuera del ámbito institucional. Por ello, se diferencian de partidos políticos, sindicatos, grupos de interés y grupos de presión;
- sus recursos predominantes son simbólicos (líderes y miembros emocionalmente comprometidos, relatos alternativos, etc.) más que materiales.
Tipos de movimientos sociales
La clasificación de los movimientos sociales parte de la diversidad de áreas, agendas y propósitos que se manifiestan entre ellos. Veamos a continuación cuáles son los tipos de movimientos sociales más importantes.
Según la cualidad del cambio
- Movimientos innovadores o progresistas: aquellos que promueven una nueva forma de organización social. Ejemplo: movimiento obrero.
- Movimientos conservadores: aquellos que resisten los cambios introducidos por los actores políticos o que pretender la legitimación de estructuras o sistemas de creencias tradicionales. Ejemplo: movimientos monárquicos.
Según los objetivos del cambio
- Movimientos estructurales o sociopolíticos: se orientan a la modificación del aparato legal, sea parcial o total.
- Ejemplo: el movimiento por los derechos civiles en EE.UU. en la década de 1960.
- Movimientos socioculturales: persiguen la modificación del sistema de creencias, los valores o los modos de vida.
- Ejemplo: el feminismo actual en el mundo occidental.
Según la estrategia
- Movimientos de lógica instrumental: el objetivo es conquistar el poder.
- Ejemplo: movimientos revolucionarios.
- Movimientos de lógica expresiva: el objetivo es defender los valores o identidades de los grupos emergentes frente al orden hegemónico.
- Ejemplo: movimiento LGBT.
Según el desarrollo histórico
- Movimientos viejos o tradicionales: son aquellos que tuvieron su origen al inicio de las sociedades modernas.
- Ejemplo: el movimiento sufragista en Gran Bretaña y EE.UU. en el siglo XIX.
- Movimientos nuevos: se refiere a aquellos movimientos sociales que resultan de las sociedades de consumo y postindustriales. Sus causas suelen ser identidades, cultura y derechos civiles.
- Ejemplo: movimiento altermundista.
Según la dimensión geográfica de las reivindicaciones solicitadas
- Movimientos locales: se organizan en torno a los asuntos de una determinada ciudad, comunidad, sector, barrio o urbanización.
- Ejemplo: Movimiento “Nuestras hijas de regreso a casa”, Chihuahua, México.
- Movimientos nacionales: son aquellos cuyas demandas tienen alcance nacional y están siempre dirigidas hacia el Estado.
- Ejemplo: Movimiento por la paz, con justicia y dignidad, de México.
- Movimientos transnacionales: son aquellos movimientos que se estructuran en redes de alcance global y supranacional ante los actores internacionales.
- Ejemplo: Greenpeace, movimiento ecologista global.
Vea también:
Origen o causas de los movimientos sociales
Existen muchas teorías respecto del origen de los movimientos sociales. El modelo explicativo convencional lo atribuye a tres variables: causas estructurales, causas coyunturales y detonantes.
- Causas estructurales, es decir, tensiones que se generan en el marco de una determinada sociedad, y que alimentan gradualmente la alienación, la frustración, el resentimiento o la sensación de inseguridad e indefensión.
- Causas coyunturales, es decir, crisis agudas que hacen evidente el estado de malestar.
- Detonantes, referidos a aquellos acontecimientos (promulgación de leyes, alocuciones públicas, accidentes, eventos noticiosos, etc.) que colman la capacidad de aguante y estimulan la necesidad de buscar alternativas.
La consolidación de los movimientos sociales, es decir, la real eficacia de estos una vez constituidos, está relacionada a diversos factores. Veamos los principales.
- Condiciones estructurales, esto es, crisis, acontecimientos detonantes, etc;
- liderazgo comunitario, es decir, presencia de suficientes líderes sólidos que animen y orienten el proyecto;
- recursos materiales y organizativos.
Movimiento social, comportamiento colectivo y acción colectiva
No toda manifestación social en lo público puede considerarse un movimiento social. Existe una tendencia a confundir este concepto con los de comportamiento colectivo y acción colectiva debido a la estrecha relación que hay entre ellos.
El comportamiento colectivo se refiere a las acciones espontáneas y aisladas que responden a fenómenos coyunturales. No está dirigido al cambio social sino a la expresión de un malestar o frustración, aunque puede ser el germen de nuevos movimientos sociales.
Un ejemplo histórico de comportamiento colectivo es la ola de saqueos llamada Caracazo en Venezuela, desatada entre el 27 y 28 de febrero de 1989.
Una acción colectiva es aquella que pretende beneficiar a la colectividad y cuenta con un mínimo de organización interna. No necesariamente llega a consolidarse en torno a un programa permanente.
Por ejemplo, la organización de una manifestación pública ante el anuncio de una medida de gobierno impopular.
Los movimientos sociales, que en efecto promueven acciones colectivas, lo hacen en el marco de un programa sistemático con objetivos de largo plazo y alcance, ya que se orienta a cambios estructurales en la sociedad y no solo coyunturales.
Movimientos sociales y medios de comunicación
La relación entre los movimientos sociales y los medios de comunicación suele ser compleja, ya que los medios tradicionales tienen la posibilidad de visibilizar o invisibilizar las acciones de estos movimientos, así como informar o desinformar al respecto de sus pretensiones.
En los movimientos sociales juegan un papel muy importantes los medios de comunicación alternativos, especialmente los de corte comunitario (pequeñas televisoras locales, radios comunitarias, prensa local) y, por supuesto, internet y las redes sociales, que permiten que cualquier persona se convierta en productor de contenido e información.
Vea también Medios de comunicación.