Qué es Etopeya:
La etopeya es un recurso retórico que consiste en la descripción del carácter, las acciones, las costumbres y demás aspectos intrínsecos que determinan la personalidad de un individuo.
La palabra, como tal, proviene del griego ἠθοποιΐα (ethopoeia), que se compone con ethos, que traduce ‘manera de hacer las cosas’; poiein, que significa ‘crear’, ‘imitar’, ‘describir’, y el sufijo -ia, que indica ‘acción o cualidad’.
Así, la etopeya es la descripción por medio de la cual se da a conocer el conjunto de características internas (psicológicas, morales, espirituales) de un personaje.
En este sentido, se diferencia de la prosopografía, que es la descripción de las características externas de un personaje, es decir, sus rasgos físicos.
Vea también Prosopografía.
La etopeya, como tal, es una técnica de construcción literaria que nos permite referir las características más notables o resaltantes de un personaje a propósito de la trama en que está inmerso. Además, nos ayuda a entender cómo es este personaje, y cómo actuaría o reaccionaría en una situación determinada.
Para el abordaje de una etopeya, podemos valernos de una serie de rasgos a partir de los cuales se puede configurar la manera de ser de alguien. Por ejemplo, hablar de sus virtudes y defectos, sus gustos y aficiones, sus afectos y desafectos, sus creencias y prejuicios, de su forma de ver la vida y el mundo, etc.
Miguel de Cervantes, por ejemplo, en su Quijote, traza una etopeya del héroe homónimo de esta novela cuando dice: “[…] Es, pues, de saber que este sobredicho hidalgo, los ratos que estaba ocioso —que eran los más del año—, se daba a leer libros de caballerías, con tanta afición y gusto, que olvidó casi de todo punto el ejercicio de la caza y aun la administración de su hacienda […]”.
Vea también Figuras literarias.