Las 6 diferencias entre condicionamiento clásico y operante
Cuando se habla de conductismo, son dos términos los que es inevitable que se nos vengan a la cabeza: condicionamiento clásico y condicionamiento operante.
Muchos son quienes confunden estas ideas, a veces vistas como prácticamente lo mismo. Naturalmente, no lo son y por ello vamos a profundizar en las diferencias entre condicionamiento clásico y operante, no sin antes ver en detalle a qué se refiere cada uno.
- Artículo relacionado: "Conductismo: historia, conceptos y autores principales"
¿Cómo distinguir entre el condicionamiento clásico y el operante?
Entre las corrientes de pensamiento más famosas de la psicología nos encontramos con el conductismo, la cual toma al aprendizaje como su objeto de estudio principal y el motivo de sus teorías. Dos de las principales formas de aprendizaje asociativo son el condicionamiento clásico y el condicionamiento operante, dos modalidades del aprendizaje que a veces son confundidas al hablarse de ellas en forma de un binomio inseparable.
El más básico de los dos es el clásico, que consiste en un aprendizaje implícito asociativo en el que se asocian dos estímulos, un estímulo incondicional y uno condicionado. El operante, descrito por primera vez por el psicólogo E. Thorndike a comienzos del siglo XX y profundizado por el conductista radical B. F. Skinner, el individuo aprende a asociar una respuesta a un estímulo importante para él.
¿Qué es el condicionamiento clásico?
La historia sobre cómo se descubrió el condicionamiento clásico es ya de sobras conocida. Ocurrió a principios del siglo XX, en la Rusia zarista. Un fisiólogo llamado Ivan Pavlov, de la tradición objetivista-reflexológica, estaba investigando sobre la salivación en animales, queriendo descubrir su función y composición. Hacía sus experimentos con perros y, un día, notó que los canes comenzaban a salivar antes siquiera de ver la comida. ¿Cómo podían saber los perros que se acercaba comida sin verla?
Pavlov se dio cuenta de que los perros se comportaban así al oír sus pasos. Los canes habían asociado el ruido que hacía Pavlov al acercarse a ellos con comida, por ese motivo empezaban a salivar antes incluso de verla. Les bastaba con oír los pasos del científico ruso para saber que pronto iban a recibir un suculento manjar. Fue así como Ivan Pavlov descubrió el condicionamiento clásico, también llamado aprendizaje asociativo y, gracias a ello, fue galardonado con el Premio Nobel de Medicina en 1904.
Los principales conceptos del condicionamiento clásico son:
- Estímulo incondicionado (EI): estímulo con intensidad suficiente para producir una respuesta. No requiere de experiencia previa por parte del organismo para emitir una respuesta.
- Respuesta incondicionada (RI): es la respuesta desencadenada por el estímulo incondicionado.
- Estímulo neutro (EN): es un estímulo que no produce ningún efecto sobre la conducta.
- Estímulo condicionado (EC): tras una asociación repetida entre el EI y el EN, el segundo adquiere propiedades del primero y hace que se dé una respuesta similar a la RI.
- Respuesta condicionada (RC): es la respuesta que se produce ante el EC, siendo básicamente RI provocada por lo que antes era un EN pero ahora es un EC.
Principios del condicionamiento clásico
Un estímulo incondicionado (EI) provoca una respuesta incondicionada (RI). Si a ese EI se le añade un estímulo neutro (EN), tras varias presentaciones conjuntas de ambos estímulos, el EN se convertirá en un estímulo condicionado (EC), es decir, sin necesidad del EI, hará que se emita la respuesta condicionada (RC).
En el caso de los perros de Pavlov, el EI sería la comida y la RI sería la salivación. El EN/EC sería el sonido de los pasos de Pavlov que, acompañados de la presentación de comida, haría que los perros asociaran ambos estímulos y llegara el momento en que bastaría con oír tales pasos para que los perros salivaran (RC), sin necesidad de ver comida.
El condicionamiento clásico explica la adquisición de conductas primarias como el miedo al dolor, el hambre al ver comida, la salivación al ver un limón…
Este mecanismo explica la adquisición de comportamientos primarios como el miedo al dolor, el hambre, etc. Su uso permite la inducción de reacciones de alarma (aceleración cardíaca, activación del sistema nervioso, etc.) pero es inadecuado para construir comportamientos articulados, como la eliminación del peligro y la prevención del riesgo.
- Quizás te interese: "El condicionamiento clásico y sus experimentos más importantes"
¿Qué es el condicionamiento operante?
El condicionamiento clásico es lo que hace que un organismo asocie una respuesta con un estímulo, inicialmente neutro y luego condicionado. No obstante, este tipo de condicionamiento es muy básico y primitivo, y tiene como principal limitación que la respuesta emitida en sí no era nueva, sino que ya estaba presente antes de ser condicionada a un estímulo determinado.
El condicionamiento operante o instrumental, en cambio, es la situación en la que el organismo, cuando realiza una conducta nueva, recibe como consecuencia un estímulo diferente. Este tipo de aprendizaje se refiere al proceso en el cual la frecuencia de una conducta se modifica o se ve alterada a causa de las consecuencias que esa conducta produce. Las consecuencias son siempre el resultado de una respuesta ante un estímulo concreto.
Una consecuencia puede ser positiva (recompensa) o negativa (castigo) para el organismo que lleve a cabo la respuesta. Si las consecuencias son positivas, la probabilidad de que se repita la conducta que las provocó aumentará, mientras que si son negativas, esta probabilidad se verá reducida. El refuerzo se usa para inducir que se repita la conducta deseada, mientras que el castigo se usa para prevenir o extinguir una conducta indeseada.
Entre los conceptos fundamentales del condicionamiento operante tenemos:
- Refuerzo: cualquier evento que aumente la probabilidad de que se haga una determinada conducta. Este puede ser positivo o negativo. Un refuerzo positivo implica algo que le guste al organismo que realiza la conducta, mientras que uno negativo implicará algo que le desagrade.
- Castigo: es cualquier procedimiento usado para eliminar una determinada conducta. Este puede ser positivo o negativo. Decimos que un castigo es negativo cuando se suministra algo que desagrada al sujeto experimental, mientras que es negativo cuando se le retira algo que le gustaba.
- Extinción: es la reducción de la frecuencia de la respuesta del sujeto cuando esta deja de ser reforzada o es castigada.
- Adquisición: es el incremento en la frecuencia de un patrón conductual, habitualmente cuando este es reforzado.
Principios del condicionamiento operante
La figura más importante con respecto al condicionamiento operante es la de B. F. Skinner. De hecho, los experimentos de este psicólogo conductista son tan importantes que uno de los principales elementos usados para aplicar condicionamientos operantes recibe su apellido: la caja de Skinner.
En esa caja, Skinner metía ratones que eran libres de moverse al azar. En un momento dado, el roedor activaba una palanca diseñada para dejar caer comida. En poco tiempo los ratones comenzaron a repetir ese comportamiento una y otra vez, aprendiendo que si pulsaba la palanca obtendría comida, su refuerzo. El aprendizaje de este tipo fue llamado por Skinner operante, dado que el organismo opera sobre el entorno a sabiendas de que ello le traerá una determinada consecuencia.
Así pues, en este caso concreto de condicionamiento operante tenemos un animal que, al pulsar la palanca de forma casual, recibe comida (refuerzo positivo). A medida que va pulsando más y más esa palanca, asocia esa acción con recibir algo que le gusta, y por ello no dejará de hacerla.
- Artículo relacionado: "B. F. Skinner: vida y obra de un conductista radical"
Principales diferencias entre el condicionamiento clásico y operante
Ahora que entendemos mejor qué es el condicionamiento clásico y el condicionamiento operante, vamos a abordar cuáles sus principales diferencias:
1. Definición
El condicionamiento clásico es un tipo de aprendizaje que implica la asociación entre dos estímulos, siendo uno el que indica la aparición del otro.
En cambio, el condicionamiento operante implica que los organismos vivos aprendan a comportarse de una manera particular debido a las consecuencias que ha provocado una determinada acción hecha por ellos en el pasado.
2. Proceso de condicionamiento
En el clásico, el proceso de condicionamiento se produce cuando el organismo experimental asocia dos estímulos, uno que le provoca una respuesta involuntaria y el otro que, originalmente, no le provocaba nada. Tras ser expuesto a ambos con frecuencia, acaba emitiendo una conducta involuntaria frente a un estímulo que antes era neutro.
En cambio, en el condicionamiento operante, el comportamiento del organismo se modificará en función de las consecuencias que le suponga esa misma conducta.
- Artículo relacionado: "Los 13 tipos de aprendizaje: ¿cuáles son?"
3. Comportamientos implicados
El condicionamiento clásico se basa en comportamientos involuntarios o reflexivos (reflejos) como respuestas fisiológicas y emocionales del organismo. También en emociones, pensamientos y sentimientos.
En el caso del condicionamiento operante, este se basa en conducta voluntaria, acciones activas del organismo que lleva a cabo un comportamiento para obtener una consecuencia después.
- Quizás te interese: "¿Qué es la Psicología Fisiológica?"
4. Control de las respuestas condicionadas
En el condicionamiento clásico, las respuestas del organismo están bajo el control del estímulo, mientras que en el operante el control de las respuestas lo ejerce el organismo experimental.
5. Definición de estímulo
En el condicionamiento clásico se habla de estímulo condicionado e incondicionado. En el operante, no se define el estímulo condicionado, sino que se habla de respuesta operante, refuerzo, castigo, extinción y adquisición de una determinada conducta.
- Quizás te interese: "17 curiosidades sobre la percepción humana"
6. Rol del organismo
El organismo desempeña un rol pasivo en el condicionamiento clásico, estando la ocurrencia del estímulo incondicional bajo el control del investigador.
Contrario a esto, en el operante la aparición del refuerzo está bajo el control del organismo, quien ejerce un rol activo llevando a cabo una conducta determinada que supone que le implicará algún tipo de consecuencia.