Depresión atípica: 8 señales que indican que la sufres
La depresión es uno de los principales motivos por los que se suele solicitar atención psicológica. La mayoría de las personas la han padecido alguna vez en su vida, en alguna de sus formas.
Sin embargo, en este caso, vamos a hablarte acerca de la depresión atípica que, a pesar de su nombre, no se trata de nada inusual, incluso es posible que la hayas experimentado en primera persona alguna vez.
¿Cómo detectar los síntomas de este trastorno?
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¿Qué es la depresión atípica?
Dentro de los trastornos depresivos se pueden encontrar varios tipos, este es uno de ellos. Lo que diferencia a la depresión atípica del resto son sus síntomas; por ende, la respuesta al tratamiento también varía, lo que hace necesario para su cura un seguimiento personal y psicológico que, probablemente, tenga que ir acompañado de la medicación oportuna, prescrita, obviamente, por un profesional.
Para poder detectar este tipo de depresión, así como cualquier otra, es básico conocer los síntomas y señales que se nos pueden presentar. Por ello, te explicamos los más relevantes y representativos.
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¿Cómo puedo saber si sufro depresión atípica?
Los indicios pueden ser muy variados, teniendo en cuenta, además, la poca frecuencia con la cual se diagnostica este problema, a pesar de lo presente que está en el campo de la piscología. Te hablamos de algunas de las principales señales que pueden ayudar a que se realice el diagnóstico de depresión atípica.
1. Hipersensibilidad
Tendemos a exagerar situaciones, haciendo de cualquier traspiés sin importancia del día a día el devenir de una jornada o, incluso, una existencia catastrófica. Un comentario o una respuesta dudosa por parte de otra persona, nos puede suponer todo un mundo, siendo interpretada como una ofensa o burla.
Esto se debe a la falta de seguridad en uno mismo, y es por eso que quien sufre depresión atípica todo lo entiende como un ataque directo.
2. Hipersomnia
Si padecemos una depresión atípica puede que sintamos una necesidad imperiosa de dormir no solo en horas nocturnas, sino todo el día. Esto es lo que se conoce como hipersomnia.
3. Cansancio extremo
Es frecuente que una sensación de cansancio se apodere de nosotros retroalimentando la enfermedad. Es entonces cuando esta situación puede afectar negativamente a tus relaciones psicosociales y laborales. Es justo en este punto cuando tienes que tener cuidado: comienza el aislamiento.
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4. Aumento del apetito
Este efecto es completamente opuesto a las depresiones comunes, ya que, en este caso, no dejamos de tener apetito, sino que, es probable que nos demos atracones y hagamos continuas visitas a la cocina.
5. Ansiedad
Los estados de ansiedad son más habituales en otros tipos de trastornos psicológicos que en las depresiones, aun así es un síntoma que se hace notar. Es muy común que te preocupe en exceso la opinión de los demás o que sientas angustia al ser consciente de la situación que se está dando.
6. Problemas en las relaciones interpersonales
Si padeces depresión atípica es posible que tengas dificultades para mantener mantener relaciones a largo plazo. Una de las causas de esto es hipersensibilidad al rechazo o la crítica, que afecta a diferentes aspectos de tu vida como el trabajo o las relaciones con otras personas.
7. Sensación de tristeza
Como en otros tipos de depresión, la tristeza es uno de los síntomas característicos. Sin embargo, se diferencia de otros trastornos depresivos porque puedes sentirte muy bien cuando recibes buenas noticias. La tristeza pero, acaba volviendo al poco tiempo.
Ahora bien, es necesario que sepass que aunque la tristeza y la depresión se solapan en parte, no son lo mismo: "Las 6 diferencias entre tristeza y depresión".
8. Estado de resentimiento
La hipersensibilidad y la baja autoestima que presentan las personas con depresión atípica hace que exista un gran resentimiento hacia los demás o hacia el mundo.
¿Por qué me pasa a mí?
No existe ninguna causa concreta o detonante específico que desencadene esta enfermedad. Como en la mayoría de los trastornos psicológicos, aquello que haya podido desencadenar esta situación puede proceder tanto de elementos genéticos, como culturales o incluso aprendizajes de interacción.
La manera en la que procesamos los problemas, sean de la índole que sean, o en cómo los vemos y vivimos puede influir y, de hecho, influyen en cómo eso nos afecta.
¿Hay tratamientos para salir de ella?
Sobra decir que la atención psicológica es una de las principales armas frente a la depresión atípica. Por ello, la terapia psicológica online es una buena opción. Desde TherapyChat ponen a tu disposición los servicios y los conocimientos del mejor psicólogo online, para que no puedas poner ninguna excusa a la hora de solicitar atención psicológica.
Además, cuentan con una terapia online que te ayudará a gestionar ideas y a modificar ciertas conductas dañinas que te arrastran a la depresión haciéndote entrar en bucle. Así, podrás encontrar el apoyo necesario para conseguir efectos positivos en la interacción con el entorno.
También son importantes los psicofármacos a la hora de tratar este tipo de depresión: habitualmente, te recetarán antidepresivos, ya que los efectos de esta enfermedad pueden llegar a ser devastadores porque pueden llegar a afectar todos los ámbitos de tu vida. Estate seguro de que, con el tratamiento adecuado, será más sencillo recuperarse y retomar las actividades cotidianas con total normalidad.
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Algunos consejos
Lógicamente, para que la recuperación sea una realidad, también deberás poner de tu parte. De no ser así, el apoyo profesional servirá de bien poco. Para que el proceso llegue a buen puerto, es necesario que cumplir con el tratamiento de forma estricta, prestar atención a las características de la depresión y a las señales de advertencia, hacer ejercicio en la medida de lo posible y evitar el alcohol y las drogas a toda costa.
Por último, para prevenir ese estado depresivo, ten muy en cuenta que es importantísimo aprender a tomar medidas para controlar el estrés, apoyarse en los demás y actuar rápidamente ante las primeras señales para evitar que el trastorno empeore.