12 Ejemplos de Moral y Ética para la vida cotidiana
El mundo es un lugar muy diverso en el que cada cultura establece qué está bien y qué está mal hacer.
Lo correcto es definido tanto por normas legales, que al ser quebrantadas implican delitos, o normas morales, las cuales pueden causar el rechazo social de quien no las obedece.
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¿Qué es la moral?
La moral es un concepto que hace referencia al conjunto de comportamientos socialmente bien vistos, los cuales dependen de la cultura de cada país y su religión. En contraposición, la ética es el conjunto de valores individuales guían el comportamiento de una persona.
Lo que es moral en un país puede ser mal visto en otro, por lo tanto hay que ser consciente de la diversidad cultural que hay en nuestro planeta y vigilar de no comportarse de una forma ofensiva en el extranjero.
Ejemplos de moral
La moral de cada cultura ofrece una serie de reglas que definen lo que es apropiado. No necesariamente que sea moral significa que sea apropiado.
A continuación presentamos algunas máximas morales y ejemplos de conductas moralmente aceptables en la mayoría de culturas.
1. Decir la verdad
En la mayoría de las culturas, se considera una máxima fundamental. Decir la verdad implica ser sinceros y no mentir, aunque la mentira nos pueda ser beneficiosa.
Sin embargo, esta máxima acepta ciertos tipos de mentiras, como sería el caso de ver una persecución entre una víctima y su agresor, saber dónde se esconde la persona perseguida y mentirle al agresor para evitar que la encuentre.
También hay otras situaciones específicas, inculcadas desde pequeños, que implican la obligación de no decir la verdad, como sería el caso de decir lo que uno piensa realmente de alguien con respecto a su físico u otros aspectos.
2. Generosidad y altruismo
El compartir lo propio es considerado moral y socialmente cooperativo, especialmente si es con la finalidad de garantizar el bien ajeno y la prosperidad de la comunidad.
3. No contradecir lo que la sociedad manda
Cada cultura tiene una serie de reglas que hace que funcione de una determinada forma y de acuerdo a una ideología elaborada durante cientos de años de historia.
No seguir la norma, ya sea en comportamiento, pensamiento, vestimenta u otros aspectos, puede ser vista como un ataque a la propia cultura y tradiciones de un país.
Por ejemplo, en las sociedades islámicas más fundamentalistas, en las que la mujer está obligada a llevar el velo, el hecho de no llevarlo se consideraría conducta inmoral, además de poder estar penada por ley.
4. Respeto por la vida
Esta máxima moral es propia de las culturas con influencia cristiana. Se debe respetar tanto la integridad física de uno mismo como la de los demás, considerando el asesinato y el suicidio el máximo exponente de la violación de esta premisa.
Sin embargo esta máxima presenta un cierta controversia en según qué situaciones, como lo son los casos de abortos en los que de no ser realizados peligra la vida de la madre, o en la eutanasia, dado que puede verse como poco moral el permitir que una persona siga sufriendo.
5. Tratar a los demás de acuerdo a como uno quiere ser tratado
Básicamente se puede reducir como la de no hacer a los demás lo que no se desea que le hagan a uno mismo. Solemos referirnos a esta máxima como "la regla de oro".
En la Antigua Mesopotamia esta premisa se tenía muy clara, tanto a nivel moral como legal, y básicamente muchas leyes presentes en el Código de Hammurabi parten de la idea del ojo por ojo, ejecutando las penas de la misma manera en que se habían realizado los actos vandálicos.
6. No hacer trampas
El camino fácil y rápido puede no ser moralmente aceptado. En la sociedad occidental se inculca el valor del esfuerzo y la perseverancia, con lo cual hacer trampas es considerada una conducta inapropiada.
Al jugar un deporte o realizar un examen se debe ofrecer lo máximo de uno mismo y comportarse de forma respetuosa. El sacrificio y la perseverancia son valores muy bien vistos moralmente.
7. Lealtad
Ser firme a los propios ideales y no dejar de lado al grupo social al que se pertenece, como por ejemplo la familia o el grupo de amigos. El abandono de los ideales o el no cumplirlos se puede interpretar como hipocresía y el dar la espalda a los seres cercanos se considera traición.
No obstante, se puede ver como correcto el abandonar al grupo cuando este se comporta de forma inmoral o lleva a cabo conductas inadecuadas.
8. Alegrarse por los méritos ajenos y no ser envidiosos
Un comportamiento socialmente cooperativo es el de alegrarse por lo que han conseguido los demás, independientemente de si uno mismo ha contribuido en su consecución.
9. Vivir de acuerdo a la voluntad de Dios
Por ejemplo, en las sociedades cristianas esta premisa parte de los Diez Mandamientos de la ley de Dios, en los que se indica la forma en que deben vivir los creyentes para no ofender a Dios y agradecerles su propia existencia.
Moral japonesa: varios ejemplos
La cultura japonesa es una sociedad muy compleja religiosa y moralmente. A diferencia de en Occidente, en el Japón no se perciben las acciones como buenas o malas pero sí solas, pero deben hacerse respetando una serie de deberes y obligaciones.
Es curioso como algunos comportamientos que en nuestra cultura veríamos como inadecuados, como lo es la infidelidad o el abuso de sustancias, en Japón no se ven como algo negativo e incluso se defienden y se perciben como algo natural.
El código de conducta japonés parte de tres conceptos, los cuales son como engranajes que trabajan en conjunto para definir el buen proceder en el país del sol naciente.
1. Giri
Los nipones consideran que al nacer se contraen una serie de deudas para con los padres, como el hecho de recibir un nombre y haber sido traído al mundo. Esta idea es algo similar a la que se tiene en Occidente con respecto al Pecado original, sin embargo sin la connotación negativa.
2. On
Surge de la interacción con otras personas, cuando se realizan o reciben favores u otras conductas altruistas. La idea de estar en deuda adquiere un punto que roza la exageración en Japón, llegando a ser percibida como algo que jamás será satisfecha del todo y las relaciones se ven profundamente influidas por ello.
Esta idea es la que está detrás del hecho de que los japoneses se agradezcan mútuamente varias veces.
3. Chu
Es un deber de carácter patriótico, que hace referencia al respeto que se debe sentir por el Japón, su ley y el emperador.
Hoy en día estas tres ideas están fuertemente presentes, pero en el Japón feudal tuvieron un papel mucho más llamativo. Por ejemplo, si un samurái era insultado en público su giri era ensuciado y tenía la obligación de limpiarlo, ejerciendo su venganza sobre el que le había proferido la ofensa, normalmente en un duelo.
Sin embargo, si esta situación se daba en el palacio imperial se tenía que tener en cuenta el chu, dado que atacar a otra persona allí suponía ofender al emperador. Es por ello que la solución ante esta situación sería la propia muerte del ofendido, cometiendo el harakiri o suicidio honroso.
Referencias bibliográficas:
- Aznar, Hugo (1999). Ética y periodismo. Códigos, estatutos y otros documentos de autorregulación. Paidós.
- Camps, V. (1990). Virtudes públicas, Madrid, España, Espasa Calpe.
- Maliandi, Ricardo (2004). Ética: conceptos y problemas.
- Rachels, James (2007). Introducción a la filosofía moral.
- Zavadivker, Nicolás (2004). Una ética sin fundamentos.