Ejemplos de
Aminoácidos (y su función)

Los aminoácidos son compuestos orgánicos que se combinan para formar proteínas. De esta manera, la importancia que tienen las proteínas para el ser humano se manifiesta en la necesidad de que existan los aminoácidos. Por ejemplo: treonina, lisina, glicina.

Se trata de los ladrillos con los cuales el organismo reconstituye permanentemente sus proteínas específicas consumidas por la sola acción de vivir. Físicamente se trata de sustancias cristalinas, casi siempre de sabor dulce pero con carácter ácido como propiedad básica.

Funciones generales de los aminoácidos

Por la condición de ser el principal productor de proteínas, los aminoácidos son los responsables de una gran cantidad de funciones de notable importancia para el ser humano.

En primer lugar, dotan al cuerpo de estructura y ayudan en la reparación de los tejidos desgastados y en la curación de heridas. Se encargan de la síntesis de los neurotransmisores, los elementos esenciales de transmisión de información al interior del cuerpo humano.

Los aminoácidos son muy importantes en mantener y mejorar la salud cardiovascular, así como (en algunas ocasiones) en producir la energía necesaria para el metabolismo.

Ejemplos de aminoácidos

Existen veinticuatro grupos de aminoácidos, de los cuales ocho se consideran indispensables o esenciales para la vida humana, pues si falta alguno de ellos no será posible sintetizar ninguna de las proteínas en la que sea requerido dicho aminoácido; el resto son un poco más prescindibles.

Sin embargo, algunos de los que no son esenciales (los que son producidos por los cuerpos aun cuando no se obtengan de los alimentos consumidos) también requieren ser incorporados al organismo en la cotidiana alimentación, y es por eso que vale la pena enumerar la lista completa de aminoácidos y sus funciones, siendo los primeros ocho los indispensables:

  1. Isoleucina. Interviene junto a otros aminoácidos en la formación y reparación del tejido muscular. Estabiliza y regula el azúcar en sangre y los niveles de energía.
  2. Valina. Útil en el tratamiento de enfermedades del hígado y la vesícula biliar, por su fuerte poder en la reparación de tejidos.
  3. Treonina. Aminoácido con función de mantener la cantidad adecuada de proteínas en el cuerpo, e importante para la formación de colágeno, elastina y esmalte en los dientes.
  4. Triptófano. Esencial para promover la liberación del neurotransmisor serotonina, fundamental en la regulación del sueño y el placer.
  5. Fenilanina. Utilizada por el cerebro, fundamental para transmitir las señales que este pretende dar, promoviendo el estado de alerta y vitalidad.
  6. Metionina. Antioxidante de gran alcance, que ayuda a prevenir la acumulación de grasa en diferentes partes del cuerpo.
  7. Leucina. Interactúa con otros aminoácidos para promover la cicatrización del tejido muscular, además de reducir los niveles de azúcar en sangre.
  8. Lisina. En asociación con otros, ayuda al crecimiento y a la reparación de tejidos, pero también al desarrollo de anticuerpos en el sistema inmunológico.
  9. Histidina. Se encuentra en la hemoglobina, y es esencial para el crecimiento y la reparación de los tejidos.
  10. Arginina. Importante en la actividad sexual, también retrasa el crecimiento de los tumores y el cáncer. Facilita un aumento de la masa muscular y una reducción de la grasa corporal.
  11. Prolina. Involucrada en la producción de colágeno, con importancia en la reparación y mantenimiento de músculos y huesos.
  12. Cisteína. Está implicada en la desintoxicación, principalmente como antagonista de los radicales libres.
  13. Glicina. Retarda la degeneración muscular, así como promueve una próstata sana, el sistema nervioso central y el inmunológico.
  14. Alanina. Importante en la transferencia de nitrógeno de los tejidos periféricos hacia el hígado.
  15. Serina. Junto con otros aminoácidos, interviene en la desintoxicación del organismo, en el crecimiento celular y en el metabolismo de ácidos grasos.
  16. Cistina. Interviene en la desintoxicación, así como en la síntesis de la insulina y en las reacciones de ciertas moléculas a la insulina.
  17. Ácido glutámico. Con gran importancia en el funcionamiento del sistema nervioso central, y como estimulante del sistema inmunológico.
  18. Ornitina. Ayuda a pedir la liberación de hormonas de crecimiento, así como ayuda en la regeneración del hígado y estimula la secreción de insulina.
  19. Glutamina. Ayuda a construir y mantener el tejido muscular, así como aumenta la función cerebral y la actividad mental, ayudando a mantener el equilibrio de ácido alcalino en el cuerpo.
  20. Ácido aspártico. Aumenta la resistencia, y es bueno para la fatiga crónica y la depresión. Ayuda a facilitar la circulación de ciertos minerales a través de la mucosa intestinal.
  21. Taurina. Fortalece el músculo cardíaco y ayuda a prevenir la degeneración macular. Es importante para la utilización adecuada de sodio, potasio, calcio y magnesio.
  22. Tirosina. Aminoácido importante para el metabolismo general, pues es un precursor de la adrenalina y la dopamina que regulan el estado de ánimo.

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