Transferencia de tecnología

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La transferencia de tecnología consiste en la transferencia de habilidades, tecnología, así como conocimientos entre organizaciones. El fin de esto es la transferencia continua de avances tecnológicos que promuevan el desarrollo.

La transferencia de tecnología, o transferencia tecnológica, es el proceso mediante el que las organizaciones transfieren tecnología, habilidades y conocimientos entre sí. Estas transferencias se producen para que otra serie de organizaciones con menores recursos puedan acceder a los avances científicos, de forma más fácil y accesible. De esta forma, las transferencias tecnológicas permiten el desarrollo tecnológico de las organizaciones, así como la creación de valor en sus productos y servicios.

Habitualmente, un gran generador de transferencia tecnológica son el gobierno, los centros de investigación y las universidades. Estos, dado que se centran en la investigación, hacen transferencias tecnológicas continuas hacia el sector privado. El cual se aprovecha de todos los avances para continuar su mejora en los productos y servicios ofrecidos. Las transferencias tecnológicas, a su vez, son grandes generadores de competitividad. De ahí que, aquellos países que más capital destinan a investigación, también tienden a ser los más competitivos.

Objetivos de las transferencias de tecnología

Aunque el principal objetivo de este tipo de transferencias es la transferencia de conocimiento para el continuo desarrollo de las organizaciones. Las transferencias tecnológicas son un gran aporte para la sociedad y las organizaciones. Sin las transferencias tecnológicas, el desarrollo sería mucho más lento y, quizá, menos efectivo, barato y eficiente. 

No obstante, las transferencias tecnológicas tienen diversos objetivos entre los que podríamos destacar:

  • Generar valor y competitividad en las compañías.
  • Promover el continuo desarrollo de las organizaciones.
  • Generar conocimiento y nuevos productos y servicios.
  • Promover la investigación y el desarrollo de los centros y universidades.
  • Generar innovación y valor añadido para el país.
  • Atraer inversión al país.
  • Generar propiedad intelectual e industrial.

Fases del proceso de transferencia tecnológica

En un proceso de transferencia tecnológica podemos encontrarnos con diferentes fases. Ya que requiere de un proceso de investigación, esta transferencia tecnológica se produce de forma gradual, requiriendo una adaptación e implantación que no le permite una efectividad inmediata.

De este modo, la transferencia tecnológica se clasifica en ocho fases:

  • Descubrimiento: Proceso mediante el que se desarrolla un proyecto y se genera una innovación.
  • Documentación: Es la fase en la que se identifica la innovación, así como sus resultados y ventajas en la aplicación.
  • Evaluación: Fase en la que se evalúa el posible impacto de la implantación de dicho descubrimiento, así como los efectos en la práctica. 
  • Protección: Es la fase en la que se genera la patente. Es decir, donde desarrollamos la propiedad intelectual o industrial para garantizar que no se produzca el plagio.
  • Comercialización: Fase en la que se trata de comercializar la patente, tratando de que esta se implante y se desarrolló en un caso real.
  • Licencia: Fase en la que se logra un acuerdo con los inversores interesados, con el objetivo de poner en práctica la innovación y el desarrollo.
  • Desarrollo: Es la fase en la que la compañía, una vez tiene la licencia, pone en práctica y desarrolla el resultado extraído de la investigación.
  • Explotación: Es la fase en la que los nuevos productos o servicios producidos a través de la puesta en práctica de la investigación, se comercializan en el mercado y se generan rendimientos.

Ejemplos de transferencia tecnológica

Los mejores ejemplos de transferencia tecnológica se producen en los Estados Unidos. Grandes proyectos universitarios en centros de innovación como el MIT (Massachusetts Institute of Technology, por sus siglas en inglés) o la Universidad de Stanford han acabado siendo implantados en empresas tecnológicas residentes en Sillicon Valley.

El mejor ejemplo son los proyectos que desarrollan compañías como Facebook o Google. Muchas innovaciones que estas producen, realmente se originan en estos centros de innovación. De esta forma, las universidades generan proyectos financiados, en muchos casos, por las propias compañías, con el fin de ser implantados posteriormente en las compañías.

El smartphone (teléfono móvil), Ebay, el GPS, así como otra serie de innovaciones son ejemplos de transferencias tecnológicas. Esta serie de innovaciones fueron puestas en marcha en universidades y centros de investigación, posteriormente implantadas en el mercado real.