Seguridad Social
La Seguridad Social es el sistema que se ocupa de garantizar el Estado del Bienestar en una sociedad.
Visto desde otro punto de vista, la Seguridad Social es la mayor y más importante plataforma de bienestar que ofrece el Estado a sus ciudadanos.
Su existencia se basa en las aportaciones que hacen los contribuyentes, de manera obligatoria, mediante sus nóminas de trabajo o mediante las cuotas legalmente exigidas por desarrollar una actividad.
¿Qué es la Seguridad Social?
Aunque ya hemos hablado sobre qué es la Seguridad Social desde un punto de vista práctico, en realidad la Seguridad Social es una aseguradora pública. Es decir, cubre riesgos y los ciudadanos pagan una prima de seguro por ello.
Por ejemplo, al igual que pagamos un seguro de hogar, para intentar compensar el riesgo de que ocurran determinadas situaciones, en el caso de la Seguridad Social es exactamente lo mismo.
Por ejemplo, la Seguridad Social, por norma general, cubre contingencias como las siguientes:
- Baja por maternidad.
- Baja por accidente laboral.
- Situación de desempleo.
- Jubilación.
Historia de la Seguridad Social
Aunque cada país adoptó la Seguridad Social en una fecha concreta, en términos generales la creación de la Seguridad Social corresponde a Otto von Bismarck. Otto von Bismarck fue el canciller que a finales del siglo XIX, concretamente en 1889, puso en funcionamiento el sistema de Seguridad Social.
A pesar de lo anterior, y en honor a la verdad, es justo y necesario mencionar el papel que tuvo Guillermo I de Alemania. Quien en 1881 propuso una medida de este tipo al parlamento alemán afirmando lo siguiente:
«Aquellos que están discapacitados del trabajo por edad e invalidez tienen un bien fundamentado derecho a recibir atención del estado.»
Tras la Primera Guerra Mundial el desarrollo de este tipo de sistemas de cobertura social creció y fueron muchos países los que la fueron desarrollando y creando de forma progresiva. Y es que, si en el año 1900 solo 17 países contaban con Seguridad Social, en 1946 ya eran 104.
En esta línea, sería después de la Segunda Guerra Mundial, cuando la Organización de Naciones Unidas (ONU) incluyó en la Declaración Universal de los Derechos Humanos el artículo 22 que dicta lo siguiente:
«Toda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho a la seguridad social, y a obtener, mediante el esfuerzo nacional y la cooperación internacional, habida cuenta de la organización y los recursos de cada Estado, la satisfacción de los derechos económicos, sociales y culturales, indispensables a su dignidad y al libre desarrollo de su personalidad.»
Según la OIT en el año 2015 ya eran casi 200 países los que tenían en funcionamiento su propio sistema de Seguridad Social.
Objetivos de la Seguridad Social
El objetivo principal de este sistema es dar protección a los ciudadanos. Para ello, realiza un conjunto de actividades financiadas con los presupuestos del Estado y que tienen objetivos sociales y redistributivos, protegiendo a las personas para que no se produzcan desequilibrios sociales. Estas actividades sociales se desarrollan en cuatro ámbitos:
- Transferencias de dinero, como las prestaciones de desempleo, la jubilación o las pensiones por discapacidad.
- El seguro médico, que debe ser universal y gratuito.
- Servicios de educación gratuita y universal.
- Supervisión de vivienda, alimento y otras necesidades básicas.
La financiación de la Seguridad Social procede mayormente por la contribución de los trabajadores del país. En España, por ejemplo, está organizado mediante el Código de Cuenta de Cotización. Este es un número de once dígitos que se le asigna a las personas al comienzo de su vida laboral y que servirá para que se le identifique.
Además, hay que aclarar que la asistencia médica no está cubierta con las cuentas de la Seguridad Social.
Subregímenes de la seguridad social
La Seguridad Social se divide en dos subregímenes según los profesionales a los que esté dirigido. Distinguimos:
- Régimen general: Protege a los profesionales de la hostelería, los trabajadores del sector agrario, los empleados del hogar o trabajadores fijos discontinuos.
- Régimen especial: Se protege a aquellos profesionales que, bien por su lugar de trabajo o las condiciones de la labor que desarrollan, necesitan una ayuda especial. Aquí entrarían los funcionarios civiles, los trabajadores autónomos y los trabajadores que realicen su labor en el mar.