Racionamiento
El racionamiento es el acto de gestionar un conjunto de bienes ante un momento de escasez. De ese modo, se busca que estos recursos puedan durar lo máximo posible.
El racionamiento es entonces la administración del consumo de algo. Por ejemplo, el racionamiento de alimento frente a una mala cosecha.
El racionamiento suele darse en coyunturas extraordinarias como una guerra o un desastre natural. Además, quien ejecuta la distribución de los bienes usualmente es el Gobierno, a través de la autoridad directamente responsable. Por ejemplo, un alcalde.
Sin embargo, el racionamiento no solo puede darse a nivel macro, sino a nivel micro, donde sería dirigido por el jefe de la familia, por ejemplo.
Otro punto a tomar en cuenta es que el racionamiento, en un sentido amplio, no tiene que darse siempre en medio de una crisis. Puede tratarse simplemente de una persona o empresa que busca limitarse el consumo de un bien a manera de ahorro.
Por ejemplo, un individuo puede comprar dos manos de plátanos, y calcular que esa cantidad de alimento le debe durar exactamente una semana.
Cabe señalar que también puede generarse un racionamiento por una sobredemanda. Ante la imposición (por parte del Gobierno) de un precio máximo por debajo del precio de equilibrio, por ejemplo, la cantidad ofrecida por los vendedores será insuficiente para satisfacer todos los requerimientos. En consecuencia, los consumidores competirán por abastecerse, incluso haciendo colas. En ese escenario, se podría ordenar un límite de compra por individuo.
Otro escenario, similar al anterior, es cuando una subida incontrolable de precios (hiperinflación) impulsa al público a comprar (antes de que el producto encarezca). En ese caso, las autoridades también podrían optar por un racionamiento.
Otras acepciones de racionamiento
Otra acepción de racionamiento es la ración que corresponde a una persona cuando la oferta de un producto es limitada.
Asimismo, se conoce como ración no solo al acto, sino también al periodo de escasez en la que se limita de distribución de víveres o productos de primera necesidad.
Ejemplo de racionamiento
En tiempos modernos no es común enfrentarnos a una situación de racionamiento. Sin embargo, puede ocurrir en determinados países o situaciones. Por ejemplo, con la expansión de una pandemia puede ser que las personas compren mascarillas en grandes cantidades.
En consecuencia, la oferta de mascarillas en el mercado se agotará rápidamente. Ante esa circunstancia de escasez, el Gobierno o los propios establecimientos comerciales pueden limitar o racionar la cantidad máxima de mascarillas que pueden vender por cliente.