Lonja
Una lonja es un espacio habitualmente público dedicado al comercio de pescado y marisco. Principalmente supone venta al por mayor de dichos géneros tras su pesca extractiva inicial en el mismo día.
En zonas marítimas y puertos, una lonja supone aquel lugar destinado a concentrar la venta de pescados y mariscos. Dentro del sector alimentario, estos centros logísticos suponen un importante punto de venta y selección de producto.
Los pescadores depositan allí su género recién traído del mar, a disposición de comerciantes de pescaderías y otros empresarios que acuden a sus proveedores por la compra del mismo y su posterior transporte a los puntos de venta habituales.
Si bien es cierto que la mayoría del negocio desarrollado en estas instalaciones es al por mayor, existe la posibilidad también de que pequeños compradores o individuos tengan las posibilidad de realizar compras al por menor.
En cuanto a infraestructura y medios, toda lonja debe poseer las instalaciones suficientes para el desempeño de las labores de descarga en el muelle y posterior carga en otros medios de transporte destinados a llevar el género vendido.
Al mismo tiempo, deben existir elementos de inmovilizado que posibiliten el pesaje, preparación y etiquetado de los productos, como paso previo a su comercialización tras subasta.
Características de una lonja
Por su singularidad como entorno empresarial e industrial, una lonja cuenta con una serie de rasgos característicos a destacar:
- En zonas con menor población se sitúa como el centro empresarial y económico, atrayendo a la mayoría de agentes económicos de una localidad. Esto ocurre en territorios mayoritariamente costeros y cuya economía se basa en la pesca.
- Facilita a las pymes o pescadores autónomos el desarrollo de su actividad productiva, pues estas no cuentan a menudo con infraestructura o logística para poseer sus propias instalaciones en puerto.
- El horario de venta en lonjas se sitúa hacia las primeras horas de la mañana. Los barcos atracan con el género conseguido y los compradores acuden sobre la madrugada para hacerse con este y tenerlo en horario comercial ya dispuesto para su comercio.
- Todo pescado y marisco ofrecido en estos centros logísticos entra y sale en el mismo día. Debido a la naturaleza de estos productos y su pronta caducidad, es necesario su tratamiento en pocas horas, precisando de medidas de conservación en frío y un packaging adecuado. Por ello, suele identificarse como un ejemplo destacado de cross docking.
- El precio de venta es determinado en muchas ocasiones por medio de subastas. Si bien lo tradicional era la realización de este proceso por medio de la voz, con las nuevas tecnologías se han desarrollado métodos de subasta informatizados.
Etapas que experimenta el producto en la lonja
Desde que la pesca extractiva de una jornada llega a la lonja hasta su venta al mayorista, existen algunos pasos intermedios que explican el funcionamiento habitual de estos centros logísticos.
Todo producto que llega a puerto es clasificado atendiendo a la especie de la que se trate. La misma determinará su pesaje, el empaquetado y un correspondiente etiquetado según procedencia.
Por otra parte, es frecuente que los precios de cada pescado o marisco varíen y no estén delimitados. Por este motivo es común la realización de subastas del género en el mismo espacio.
Uno de los aspectos diferenciadores de las lonjas respecto a otros centros de trabajo o de negocios es que sirve en muchas ocasiones como punto de atracción a nuevos clientes o consumidores por medio del turismo.
Esto sucede porque gran número de lonjas costeras están situadas en entornos marítimos y vacacionales. Es decir, cuenta con posibilidad potencial de aumentar su red de clientes de manera estacional.