Leasing operativo
El leasing operativo, o arrendamiento financiero operativo, es el alquiler de un bien, por el cual, en ocasiones, se tiene el derecho de compra al finalizar el contrato.
El leasing operativo es una práctica muy utilizada en el mundo empresarial. A través del leasing, la compañía adquiere un bien, por el cual pagará durante unos años una prima periódica, posteriormente, pudiendo comprar dicho bien, si así se pactó con el arrendador.
De esta forma, y al igual que ocurre con el renting, la persona no tiene necesidad de realizar grandes inversiones para adquirir maquinaria o herramientas que, posteriormente, no podrán venderse en el mercado a un precio rentable para la compañía.
El leasing operativo es una variedad de leasing.
Diferencia entre leasing operativo y leasing financiero
Aunque muchos tienden a unificar ambos conceptos, no son del todo iguales.
En un primer momento, ambos conceptos presentan muchas similitudes.
Es decir, presentan las siguientes características:
- La entrega de un bien para su uso y goce.
- El establecimiento de un pago recurrente, que lleva implícito el precio del derecho a ejercer una opción de adquisición.
- La existencia, en favor del locatario, de una opción de adquisición al terminarse el plazo pactado en el contrato.
- Que el bien objeto del leasing sea capaz de producir renta.
Sin embargo, cabe destacar que, en el leasing operativo, donde se encuentra su principal diferencia, no siempre existe la opción de adquisición al finalizar el contrato. Además de que, si existe, dicha adquisición debe ser por el valor comercial del bien y no, como ocurre en el leasing financiero, por el valor que falta de amortizar.
Ventajas y desventajas del leasing operativo
El uso del leasing operativo, para las empresas, conlleva una serie de ventajas y desventajas.
Entre estas, conviene destacar las siguientes:
- No necesitan realizar grandes inversiones de compras de activos, pueden renovar los activos periódicamente al término del contrato.
- El leasing tiene la consideración de gasto (pagos por alquiler), por lo que pueden deducirse estos costes.
Entre las desventajas, conviene resaltar las siguientes:
- No se tiene el bien en propiedad.
- Podría resultar más costoso que otras alternativas, por lo que debemos valorarlo siempre en comparación con otras opciones.
- Las cláusulas podrían ser desventajosas.
Uso del leasing operativo en la empresa
El leasing operativo, como decíamos, es una práctica cada vez más habitual en las empresas. Especialmente cuando estamos hablando de empresas pequeñas que, por sus recursos, se muestran incapaces, en muchas ocasiones, de asumir las grandes inversiones que conllevaría tener adaptado su negocio a las últimas innovaciones y actualizaciones en materia de maquinaria.
Este tipo de práctica es empleado en muchos casos para la red comercial de vehículos con la que cuenta una empresa. Para no tener que adquirir 50 coches, por ejemplo, la empresa realiza dicha operación a través del leasing. Máxime, teniendo en cuenta que, pese a no decirlo, cuando hablamos de leasing, hablamos de un bien arrendado, por lo que el mantenimiento y las reparaciones corresponden al verdadero propietario de dicho bien, el arrendador.