Comité Económico y Social Europeo (CESE)

Esta organización plurinacional se originó en el año 1957, de la mano del Tratado de Roma. Su sede se encuentra en Bruselas.

En el, importantes organismos representantes de sectores, así como instituciones, se dan cita para defender sus intereses. A el acuden representantes de la industria, la agricultura, grupos de consumidores, la sociedad civil, sindicatos y patronales de toda Europa.

Los gobiernos de cada uno de los países miembros elige a sus representantes (atendiendo a su número de habitantes), que ocupan su puesto en esta institución por periodos de cinco años renovables y bajo nombramiento del Consejo de la Unión. El número de reuniones anual suele estar cerca de la decena.

La configuración del comité consta por lo tanto de 350 miembros. Todos ellos en representación de cada uno de los países miembros de la Unión Europea. España por ejemplo suma hasta 21 representantes actualmente en esta organización.

Además de contar con un presidente, es necesario llevar a cabo el nombramiento cada dos años y medio de dos vicepresidentes. En cuanto a la organización del consejo hablaríamos de la existencia del pleno, de la mesa, tres grupos (destinados a empresarios, trabajadores y actividades diversas), seis secciones (dirigidas a cada ámbito de acción europea) y una secretaría general. Su misión por lo tanto es ser puente entre la dirección política de la Unión a través de sus instituciones y el ciudadano europeo trabajador y emprendedor.

Aunque cuenta con gran nivel de independencia, actúa bajo la tutela de la Unión Europea. De esta forma, siendo su principal función la elaboración de informes o dictámenes para otros órganos como la Comisión Europea, el Consejo de la UE o el Parlamento Europeo. A veces, estas publicaciones se originan por encargo de dichas organizaciones o por iniciativa propia del CESE.

Estas son sus principales funciones:

• Ofrecer el punto de vista de la sociedad civil europea: Por medio de los grupos dedicados a la vida laboral y empresarial, de las decisiones y legislaciones emprendidas por la UE.
• Dar voz a trabajadores y empresarios de todo el continente: Promoviendo el diálogo con las instituciones y la creación de una Unión más coral, democrática y participativa.
• Mantener contacto con los órganos homólogos en cada región de la Unión: Con el fin de recopilar información de cada país.