Activo inmovilizado
El activo inmovilizado son los bienes y derechos adquiridos, o fabricados, por la compañía. Estos están destinados, de forma duradera, a la actividad principal de la empresa, por lo que es la partida más importante del activo no corriente.
El activo inmovilizado puede estar compuesto tanto de activos adquiridos por la compañía (maquinaria o terrenos por ejemplo), como fabricados por la misma (patentes o software, por ejemplo).
Características del activo inmovilizado
Entre las características que presenta el activo inmovilizado, cabe destacar las siguientes:
- Permanece de forma duradera en la empresa: Esto quiere decir que su presencia en la compañía es, al menos, superior a un año.
- En principio, no está destinado a ser vendido: Como por ejemplo, sí ocurre con las mercaderías. Aún así, excepcionalmente puede enajenarse algún elemento del inmovilizado.
Clasificación del activo inmovilizado
El inmovilizado se puede dividir en dos grandes grupos, en virtud de si tiene apariencia física o no la tiene:
- Inmovilizado material
- Inmovilizado intangible
A continuación, pasamos a desarrollar cada uno de los conceptos anteriores.
Inmovilizado material
El inmovilizado material se define como aquellos elementos del activo que son tangibles y están representados por bienes muebles o inmuebles, salvo los que deban calificarse como inversiones inmobiliarias, según el Plan General de Contabilidad español. El propio Plan establece la siguiente clasificación de elementos del inmovilizado material:
- Terrenos y bienes naturales.
- Construcciones.
- Instalaciones técnicas.
- Maquinaria.
- Utillaje.
- Otras instalaciones.
- Mobiliario.
- Equipos para procesos de información.
- Elementos de transporte.
- Otro inmovilizado material.
Esta clasificación, que es un listado abierto y no excluyente, se encuentra dentro del subgrupo 21 del cuadro de cuentas del Plan General de Contabilidad.
Dentro del inmovilizado material se encuentran los activos de mayor valoración, principalmente por la presencia de los terrenos y las construcciones.
Inmovilizado intangible
El inmovilizado intangible está formado por los activos no monetarios sin apariencia física, siempre que sean susceptibles de valoración económica. Al igual que en el inmovilizado material, el Plan General de Contabilidad establece una clasificación de elementos del inmovilizado intangible:
- Investigación.
- Desarrollo.
- Concesiones administrativas.
- Propiedad industrial.
- Fondo de comercio.
- Derechos de traspaso.
- Aplicaciones informáticas.
- Anticipos para inmovilizaciones intangibles.
Además de los anteriores, se permite la apertura de nuevas cuentas del inmovilizado intangible si existe algún activo de naturaleza inmaterial que cumpla los requisitos para ser considerado como activo intangible.
Amortización, depreciación y deterioro de valor del inmovilizado
Con el paso del tiempo, el inmovilizado, tanto material como intangible, pierde valor. Existen una serie de figuras contables para reflejar estas pérdidas de valor:
- La amortización y la depreciación: Reflejan la pérdida de valor por el uso habitual del inmovilizado.
- Deterioro de valor: Refleja la pérdida de valor por otros motivos distintos al uso habitual del inmovilizado. A diferencia de la amortización y la depreciación, este deterioro puede revertirse en un futuro. Esta figura no es exclusiva del inmovilizado; también existe deterioros de valor en las existencias o en las mercaderías.