Definición de sahumerio
La primera acepción del término sahumerio en el diccionario de la Real Academia Española (RAE) refiere al proceso y el resultado de sahumar. Este verbo hace mención a generar un humo con aroma para lograr que algo tenga un perfume agradable o para proceder a su purificación.
La noción de sahumerio, de este modo, también hace referencia al humo aromático y a aquello que se quema con la intención de sahumar. El uso más habitual de sahumerio, en definitiva, refiere al producto que se comercializa con fines aromáticos, para perfumar un ambiente.
Por ejemplo: “Voy a prender un sahumerio para quitar el olor a fritura que quedó en la casa”, “Cuando deseo relajarme, enciendo un sahumerio de sándalo y escucho jazz”, “Para una cita romántica, nada mejor que cenar a la luz de las velas y aromatizar el hogar con un buen sahumerio”.
Es habitual que sahumerio se emplee como sinónimo de incienso. De acuerdo a la RAE, un incienso es una combinación de elementos resinosos que emanan una fragancia agradable al quemarse. Esto quiere decir que los inciensos, efectivamente, son sahumerios (se emplean para sahumar).
Por lo general, los sahumerios se presentan como varillas delgadas que se colocan en unos dispositivos conocidos como porta-sahumerios. Para que desprendan su fragancia, hay que prender fuego su extremo y, de este modo, el sahumerio comienza a quemarse y a perfumar el ambiente.
Gracias a sus diferentes componentes, es posible encontrar sahumerios con aroma a coco, vainilla, uva, rosas, jazmín o chocolate, entre muchos otros. A continuación se listan algunos de los más comunes y de composición más pura, detallando las aplicaciones de cada uno:
* ámbar: está relacionado con el aire, el conocimiento y la historia. Entre sus beneficios se encuentra que propicia la meditación necesaria para la búsqueda de información, como ocurre cuando intentamos entender una situación confusa. Los tarotistas también utilizan este tipo de sahumerio para realizar sus lecturas y otras tareas propias de la adivinación;
* cedro: está asociado al fuego, como otros sahumerios de madera. Por lo general, lo consideran sinónimo de fuerza y poder. Se aconseja su uso en edificios de reciente construcción o inauguración, para que atraiga buenas energías y promueva un buen comienzo de actividades. Los hombres pueden aprovechar sus efectos en rituales de virilidad;
* sándalo: se considera una madera sagrada y está vinculada al agua y al fuego. Se suele usar con fines de purificación y santificación, especialmente de viviendas y oficinas, combinado con imágenes de diversas creencias;
* lavanda: es un promotor del glamur y se valoran mucho sus efectos para generar atracción física, así como en rituales que buscan el aumento de la belleza. Por otro lado, también se usa para despertar el amor en otra persona, e incluso en encuentros románticos para que la experiencia sea muy especial;
* jazmín: otro sahumerio asociado al amor, aunque no específicamente a la atracción física, sino a la conexión interior entre las personas, tanto en el plano emocional como en el mental. Se centra en la belleza que no pueden percibir nuestros sentidos, y por eso suele usarse en rituales relacionados con la amistad y los sentimientos puros;
* canela: está entre los sahumerios más fáciles de conseguir, dado que se demanda mucho en el mercado. Éste sí tiene un estrecho vínculo con el deseo sexual y la pasión, razón por la cual se aplica a rituales que buscan mejoras en la vida sexual de una pareja. Por otro lado, dado que su elemento más representativo es el fuego, también sirve para aumentar la energía positiva para afrontar situaciones desgastantes;
* vainilla: el sahumerio del aire, asociado a las habilidades cognitivas y a la inteligencia. Se usa especialmente para acompañar proyectos de estudio y trabajo en donde se necesita tener la mente despejada y enfocada.