Definición de retail
Retail es un término de la lengua inglesa que se emplea para nombrar a la venta minorista. La comercialización de productos al por menor, por lo tanto, constituye el retail.
El concepto suele vincularse a la venta de grandes cantidades, pero a muchos compradores diferentes. De este modo se diferencia de la venta mayorista, que implica la venta de un elevado volumen de unidades a un mismo comprador.
Los supermercados son uno de los grandes actores del sector de retail. Estas cadenas venden diariamente una enorme cantidad de unidades a miles de clientes. Un supermercado, de este modo, puede vender 2.000 litros de cerveza en una tarde, que son adquiridos por 900 clientes.
Cada vez son más las personas que a la hora de adquirir productos de diversa índole se decantan por hacerlo de mano de una empresa retail y no de un pequeño comercio. ¿Por qué? Básicamente porque esa le ofrece una serie notable de ventajas, tales como estas:
-Sus artículos tienen un precio mucho más económico, lo que les permite ahorrar de manera considerable.
-No hay que pasar por alto que les brinda una gran variedad de posibilidades en cuanto a un mismo producto, es decir, la oferta es mucho más amplia.
-En cualquier retail, de manera periódica, se suelen lanzar promociones, descuentos y ofertas especiales que permiten también disfrutar de unas compras con un coste menor.
-Asimismo se resalta el hecho de que cuenta con un horario de venta al consumidor final mucho más amplio.
Las cadenas que se dedican al retail disponen de una importante estructura. Por un lado, suelen contar con almacenes, depósitos o centros de distribución donde reciben los productos que compran al por mayor. Luego estos productos son enviados a los distintos locales comerciales o sucursales, que constituyen los puntos de venta donde acude al consumidor final a comprar la mercadería.
Esto supone que la gestión del retail es una tarea compleja, que requiere articular diferentes cuestiones. En este marco, la logística es esencial para el éxito de los negocios. Retomando el ejemplo de las cadenas de supermercados, si no existe una buena comunicación con los proveedores mayoristas o falla la distribución de los productos a los puntos de venta, el consumidor final tendrá problemas para realizar sus compras (notando que faltan productos en las góndolas, por citar una posibilidad).
No menos importante es el hecho de que en muchos retailers llega un punto en el que se toma la decisión de darle impulso a los mismos, de conseguir aumentar la cartera de clientes y de marcar diferencias con los competidores. Por eso, lo que optan por hacer es por contar con unas características específicas y por ofrecer a los consumidores ventajas, tales como estas:
-Un sistema realmente eficiente de compra así como un tiempo de espera mínimo en las cajas.
-Una ubicación cercana y unas instalaciones de primer orden.
-Constantes ofertas y promociones.
-Respuesta inmediata a posibles quejas.
-Atención al cliente exhaustiva y agradable.
-Una larga lista de precios bajos en productos de todo tipo.