Definición de procesos industriales
Lo primero que hay que llevar a cabo antes de determinar el significado del término procesos industriales es conocer el origen etimológico de las dos palabras que le dan forma:
-Proceso deriva del latín, concretamente de “processus”, que puede traducirse como “marcha” o “desarrollo”.
-Industrial, por su parte, emana del latín “industrialis”, que significa “relativo a las operaciones y materiales que se usan para hacer algo”. Una palabra que es fruto de la suma de tres componentes: el prefijo “in-”, que es equivalente a “hacia dentro”; el verbo “struere”, que es sinónimo de “juntar o fabricar”; y el sufijo “-al”, que se usa para indicar “relativo a”.
Proceso es un concepto con varios usos. Puede tratarse de las diversas etapas que hay que atravesar para completar una cierta operación. Un proceso, en este sentido, contempla el paso por diferentes estados hasta que se alcanza la forma final de algo.
Industrial, por su parte, es lo que está vinculado con la industria. Este concepto (industria) puede nombrar a las instalaciones en las que se desarrollan tareas destinadas a obtener o modificar productos.
Los procesos industriales, por lo tanto, son actividades que se llevan a cabo para transformar materias primas y convertirlas en diferentes clases de productos. A través de un proceso industrial se pueden alterar las diversas características de la materia prima, como su tamaño, su forma o su color.
Es importante tener claro que todos los procesos industriales como conjunto global se encuentra compuesto de otra serie de procesos o tareas que son necesarios para lograr el fin propuesto. En este sentido, podemos establecer que los procesos más significativos al respecto son los de conformado, los de fundición, los de unión, los de maquinado, los de acabado, los de procesamiento…
De la misma manera, no se debe pasar por alto que, por regla general, los procesos industriales requieren hacer uso de un importante cantidad de energía, ya sea eléctrica, vapor, gas…En este sentido hay que decir que, en los últimos años, se están dando importantes avances al respecto y es que cada vez son mayores las empresas que toman la decisión de llevar a cabo aquellos haciendo empleo de las llamadas energías renovables.
La producción de papel, por ejemplo, contempla el desarrollo de un proceso industrial que se inicia cuando se tala un árbol y se lleva la madera a una fábrica de celulosa. Allí se descascara y se descorteza para luego procesarla y obtener pasta de celulosa. La aplicación de peróxido, dióxido de cloro, soda cáustica y otras sustancias permite blanquear la pasta, que luego se somete a una etapa de secado y prensado. De este modo, podemos ver que este proceso industrial comienza en un bosque con un árbol y termina con la creación de las hojas de papel.
Otro proceso industrial se desarrolla con la leche. Tras ordeñar al animal, la leche obtenida se somete a una serie de procesos (homogeneización, esterilización, pasteurización, etc.) para que pueda ser envasada y comercializada.