Definición de placa base
Antes de descubrir el significado del término placa base, se hace necesario conocer el origen etimológico de las dos palabras que le dan forma. En este caso, tenemos que destacar lo siguiente:
-Placa deriva del francés “plaque” y este a su vez del neerlandés “placken”, que significa “untar”.
-Base, por su parte, emana del latín “basis” y este del griego “bainein”, que es equivalente a “caminar”.
Un equipo informático se crea a partir de múltiples componentes. En una computadora, uno de los elementos más importantes es la placa base, que también puede denominarse como placa madre o, en inglés, como motherboard.
Esta placa cuenta con múltiples circuitos impresos que posibilitan la interconexión de los distintos elementos que forman parte del ordenador. Para esto, dispone de conectores y zócalos que permiten concretar los vínculos necesarios entre cada uno de estos elementos.
La placa base, además, tiene integrado un firmware que se conoce como BIOS. Esta clase de software comienza a desarrollar sus funciones en el mismo momento en el que se enciende la computadora, cargando el sistema operativo y aportando las instrucciones esenciales al hardware.
Piezas fundamentales en las placas base, además de las ya expuestas, son los buses. Estos se encargan de transportan la información entre las distintas zonas del ordenador y los hay de varias modalidades: de datos, de control, del sistema, de dirección o de expansión.
En la placa base también se halla la memoria CMOS que, gracias a una pila, sigue funcionando cuando la computadora se apaga. De este modo, la memoria CMOS se utiliza para guardar la configuración del equipo, el día y la hora, entre otros datos importantes que no pueden perderse pese a que el ordenador no reciba corriente eléctrica.
Aunque, por lo general, la placa base sólo tiene espacio para un microprocesador, hay tarjetas que están capacitadas para lograr la conexión de múltiples procesadores. La gestión de dos o más microprocesadores en una misma placa base puede desarrollarse de manera simétrica (las tareas se reparten equitativamente entre los procesadores) o asimétrica (cada uno de los microprocesadores desarrolla una función distinta).
Además de todo lo expuesto, no podemos pasar por alto que actualmente se realizan dos tipos de placas base para ordenadores, ya sean de sobremesa o portátiles. Por un lado, están las que se realizan para microprocesadores AMD y por otro, las que se desarrollan para microprocesadores Intel.
A lo largo de la historia, este tipo de componentes han evolucionado mucho. De ahí que se haya asistido a una gran variedad de formatos de placa base, tales como estos: XT, AT, ITX, ATX, BTX o DTX.
Entre los principales fabricantes de placas base, podemos mencionar a Intel, Dell, Foxconn, ASUS, VIA, MSI y Biostar, entre otros.
Por distintas razones, las placas base sufren problemas que ocasionan la paralización de las tareas de su ordenador. Entre los más frecuentes se encuentran estos: se quema la BIOS, se estropean los slots, tienen lugar fallos en la fuente de energía eléctrica, se produce un sobrecalentamiento del chip del puente norte, hay cortocircuitos…