Definición de pétalo
El primer paso que vamos a dar antes de entrar de lleno en el establecimiento del significado de la palabra pétalo es determinar su origen etimológico. En este sentido, podemos decir que emana del griego, concretamente del término “petalon”, que puede traducirse como “cosa ancha”.
Un pétalo es una hoja que, a partir del desarrollo evolutivo, adquirió características diferentes y experimentó una transformación significativa. Los pétalos componen la corola de la planta y se encuentran dentro de la estructura que se conoce como perianto, que se halla alrededor los órganos reproductivos de la flor.
Por ejemplo: “Me encantan las rosas de pétalos blancos”, “Los geranios, con sus pétalos violetas, alegraban el jardín”, “Cuando era pequeña, arrancábamos los pétalos de las margaritas para preguntarle al destino si un chico nos quería o no”.
En la actualidad los pétalos son muy importantes en las celebraciones de boda. Y es que, al igual que sucede con el arroz, los pétalos de flores les son lanzados a la pareja que acaba de contraer matrimonio. En concreto, estos les son lanzados con el mismo significado que el otro elemento, con el claro objetivo de desearles felicidad y también fertilidad, para que así tengan descendencia.
De la misma manera, también se han convertido los pétalos en un símbolo del romanticismo. Por ese motivo, es habitual que cuando un chico o una chica le organiza una velada romántica e íntima a su pareja no dude en llenar la cama o el suelo de la habitación con aquellos.
No hay que olvidar tampoco que darse un baño en agua donde haya pétalos de rosas es muy aconsejable porque estos son realmente beneficiosos:
-Aportan a la piel un aroma muy agradable.
-Consiguen que la piel esté mucho más suave y además “rejuvenece” después de que el cuerpo, por distintas circunstancias, esté fatigado.
-De la misma manera, su fragancia se considera que despierta la pasión de la pareja. En concreto, se cree que los pétalos de rosa son un magnífico afrodisíaco.
Lo habitual es que los pétalos sean coloridos y que definan la estética de la planta en cuestión. El color de los pétalos depende de distintos pigmentos, como los flavonoides, los flavonoles o los carotenoides. En algunos casos, los pétalos pueden cambiar de color con el paso del tiempo por la variación de pH.
Los pétalos tienen la función de lograr la atracción de los agentes polinizadores. De acuerdo a la cantidad de pétalos que exhibe la flor, la planta podrá calificarse como monocotiledónea (si el número de sus pétalos es múltiplo de tres) o dicotiledónea (que tienen cinco o cuatro pétalos).
Cabe destacar que los pétalos de las flores tienen formas muy variadas. En ocasiones se vinculan formando una especie de taza, mientras que en otros casos la apariencia es similar a un tubo. Incluso existen flores con pétalos de tamaño muy reducido que se califican como apétalas. Las flores apétalas reciben el polen por la acción del viento: no necesitan, por lo tanto, pétalos que atraigan a los polinizadores.