Definición de oleaginosa
Oleaginosa u oleaginoso es un adjetivo que proviene de oleagĭnus, un término latino. En concreto, este podemos decir que es fruto de la suma de tres componentes de esa citada lengua:
• El sustantivo “oleum”, que puede traducirse como “aceite”.
• La partícula “-inus”, que se usa para indicar “procedencia”.
• El sufijo “-oso”, que es sinónimo de “abundancia”.
El concepto se emplea para calificar a aquello que es aceitoso. Cabe destacar, por otra parte, que el aceite es una sustancia que se obtiene mediante el procesamiento de diversos frutos o semillas.
Se conoce como plantas oleaginosas a aquellas que permiten obtener aceite. Esto quiere decir a los frutos o las semillas de estos vegetales pueden ser procesados para conseguir una sustancia que tiene utilidad en la industria, ya sea alimenticia o de otro tipo.
De ese tipo de plantas merece la pena destacar algunas de sus principales señas de identidad, que vienen a indicar el importante papel que desempeñan en la sociedad actual:
• Su producción se ha convertido en una de las más significativas y voluminosas en todo el mundo.
• Hay que exponer que entre los diez cultivos más cotizados y vitales se encuentran cuatro plantas oleaginosas. Este sería el caso de la soja, el cártamo, el girasol y la canola.
• Son fundamentales dentro de la alimentación del ser humano no sólo porque contienen ácidos grasos sino también porque aportan proteínas de alta calidad.
El maíz, la soja y el girasol son algunas de las plantas oleaginosas. Por lo tanto, existen el aceite de maíz, el aceite de soja y el aceite de girasol. Más allá de esta productividad para obtener aceite, las oleaginosas también pueden servir para otras cosas: producir harina, obtener madera, desarrollar fibras, etc.
El aceite de girasol es uno de los que se obtienen de plantas oleaginosas que más éxito tiene. Eso es debido a que trae consigo un importante número de beneficios para el organismo, entre los que destacan los siguientes:
• Mejora la circulación, lo que supone, por ejemplo, que sea de gran utilidad a la hora de evitar que aparezcan varices en las piernas.
• Disminuye los niveles del llamado “colesterol malo” (LDL) y, por el contrario, sube los del “bueno” (HDL).
• Previene la aparición de arterioesclerosis.
• Tiene un marcado carácter antiinflamatorio, de ahí que sea bueno para tratar artritis o el síndrome premenstrual.
• Permite mantener en buen estado de forma al corazón.
Para producir aceite, el proceso varía según la planta oleaginosa en cuestión. A nivel general, puede hablarse de dos procedimientos: con diluyentes o a través de la acción mecánica.
Los primeros pasos son comunes a todas las plantas oleaginosas: es necesario limpiar, quitarla la cáscara y moler las semillas de las que se pretende obtener el aceite. Recién en ese momento habrá que optar por apelar a un diluyente o por un medio mecánico.
Cuando se usa un diluyente, se busca que la sustancia disuelva las materias grasas y las permita aislar. A través del proceso mecánico, en cambio, se usan mazas, prensas y tamices para obtener el aceite.